Описание книги
Las imágenes siempre han provocado reacciones ambivalentes. Sean miradas fascinadas o repulsión iconoclasta, las imágenes sin embargo raramente fueron vistas como verdaderas fuentes de conocimiento. Hoy en día, parece que la crítica tradicional del espectáculo ha dado paso a una aceptación incondicional de lo visual. Sin embargo, no es en absoluto obvio que nuestras interacciones cotidianas con las imágenes también implican que entendemos cómo funcionan. La imagen diáfana recorre la historia de la actitud occidental hacia las imágenes, y de la provocación que aquellas representan para el intelecto. Al mostrar cómo en la premodernidad, la cuestión de las imágenes estaba indisociablemente ligada a la dimensión de las apariencias y sus medios, el libro ofrece una novedosa genealogía de la fenomenología y del concepto de medio. Las imágenes no son ventanas transparentes al mundo ni son medios ocultos que realizan sus actividades a nuestra espalda. En su propia superficie, en su despliegue material, reactivan constantemente el poder de aparecer, dando visibilidad a algo que no podría aparecer de otra manera.