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Лили Рокс. Ya no me duele
Aparición de Félix
¿Quién de nosotros está más perdido?
Clínica de cirugía plástica
Adiós, Manicomio
Difícilmente se le puede llamar un jardín
¿Todo se reduce a los bienes materiales?
Me quedé bajo
Y inevitablemente cae la noche
Los recuerdos de la clínica
¿Fría o caliente?
Encuentro con Lana
Mientras sigamos siendo de su interés
Es solo una pesadilla nocturna
Solo mi paranoia
Nuestros días tranquilos
Esto ayuda a silenciar el dolor
Se habían convertido en una masa repugnante
Al menos lo intentaste
Mis dedos se ponen blancos por la tensión
Ni siquiera somos amigas
Incapaz de cambiar nada
Esa confianza en sí mismo me exasperaba
Era una risa a través del dolor
¿A quién más han traído los demonios?
Psicólogo con cara de extraterrestre
Ellos alguna vez estuvieron vivos
Y para mí se detuvo
Esto es mi culpa
La ceniza sigue cayendo
El papel de la alumna invisible
Culpable de su muerte
Mi primer amor
Contando las horas y los minutos
Me expulsó de su vida
Solo figuras del pasado
Su corazón no lo soportó
Incluso después del tiempo
En manos de cuatro maníacos
Como si los sonidos y colores se hubieran ido
El mordisco infernal me paralizó
La sangre caliente del animal
¡No fuiste tú a quien las ratas devoraron viva!
Quemar todo hasta las cenizas
El momento de cercanía familiar
Es un regalo muy valioso
Algo no dicho colgaba en el aire
A veces hay días así, llenos de luz
Mi cariñosa hermanita mayor
Su silencio era más pesado que las palabras
No me sientas lástima
Deja de buscar a mamá
No le diré nada a nadie
Nadie quiere vivir en una jaula
Ella ya había aceptado lo que sucedía desde hace tiempo
¡Esto es tan injusto!
Es solo un baile
Tú vuelves locos a los hombres borrachos
Así que mejor que se mantenga callado
La ira hacia mí misma me daba fuerzas
Una salida fallida al club
Necesitábamos encontrar la salida
Nadie nos dejaría ir
¿Por qué me hizo esto?
Ahora siempre será así
Él me compró
Nunca más hagas eso
El breve momento de tranquilidad llegó a su fin
Él es un verdadero demonio
Discoteca nocturna improvisada
Nuestro monstruo no es eterno
A una al burdel y a la otra al manicomio
Отрывок из книги
Todo esto se parece a una especie de representación teatral, pero los actores no conocen sus papeles. Nadie los dirige, simplemente existen en este mundo que hace mucho perdió su significado. A veces veo a otros pacientes, que recogen hojas caídas en grandes montones. Parecen hacerlo con seriedad, como si ese acto pudiera salvarlos. ¿Pero qué pueden salvar? Los montones de hojas se ven como ángeles otoñales cansados, que se han tumbado sobre el césped para no levantarse jamás. Se pudren lentamente, como todo aquí.
Observo esta escena desde mi habitación, sintiendo cómo poco a poco se funde con lo que ocurre dentro de mí. No puedo entender quién de nosotros está más perdido: los que caminan por el patio o yo, sentada tras la ventana, observándolos.
.....
– ¿Por qué te encoges como un erizo? – dijo con una ligera sonrisa, de la cual no sentí ni calidez ni tranquilidad. – Me llamo Angelina Alexandrovna. No tengas miedo, no muerdo.
Su voz era sorprendentemente suave, como si hablara con un niño. Pero detrás de esa tranquilidad había algo más: control, seguridad. En sus manos, yo era simplemente un objeto para futuras manipulaciones. Sabía qué hacer conmigo y también sabía que yo iba a obedecer.
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