Читать книгу Tragedia en cinco actos - Alejandro Barrón - Страница 13

Los errantes

Оглавление

Las luces parpadearon por un momento brevísimo. Parpadearon de nuevo y enseguida se encendieron. El aire acondicionado también se encendió. Habíamos estado en la penumbra por un buen rato. El vagón comenzó a moverse, a avanzar. Por momentos se detenía. Una chispa por aquí y otra por acá. Cuando por fin salió al exterior por el paso a desnivel, la ciudad era otra. Cuatro de los edificios más emblemáticos habían desaparecido, las avenidas estaban quebradas, tres socavones inmensos habían nacido caprichosamente. El ambiente estaba infecto, y el aire olía a cadáver, a nuestros cadáveres, porque en teoría cuando nos sacaron de allá adentro, ya nadie estaba vivo.


Tragedia en cinco actos

Подняться наверх