Читать книгу Abuso y maltrato infantil - Fátima Beatriz Garrido - Страница 6
ОглавлениеPRÓLOGO
Maltratar a un niño es destruir su futuro. Si repetimos hasta el hartazgo que ellos son nuestro futuro entonces tenemos sobre nuestras espaldas y conciencia la ardua y maravillosa tarea que ese futuro sea el tangible producto de la responsabilidad, la defensa, la custodia, el amparo y el amor del adulto.
El contenido de este libro nos propone conocer que el maltrato es una agresión que ocasiona grandes problemas e incluso víctimas fatales.
En su: “ABUSO Y MALTRATO INFANTIL”, Fátima Beatriz Garrido nos enfrenta –con crudeza- que “un niño que ha recibido maltrato (físico, verbal, psíquico) será un adulto con problemas” del que la sociedad –desde el que mira para otro lado hasta los que dictan y aplican las leyes- deberá hacerse cargo pues no ha realizado una intervención rápida y efectiva para prevenir o castigar al maltratador-abusador.
En sus escritos, Garrido hace una clara diferenciación entre abuso y maltrato (ambas actitudes donde existe una víctima débil e indefensa y un victimario).
El abuso es un uso contrario al correcto o indicado. Es un trato deshonesto, impropio, injusto, indecente, inmoral pues el victimario contraviene las normas de la moral y sabe que lo hace.
Luego de leer “ABUSO…” he elaborado mi propio concepto –del que me hago cargo- sobre el maltratador, violento y violador: NO TIENEN CURA y basándonos en esto se deberá trabajar para cambiar las leyes y aplicarlas en su rigurosidad.
Ante tanto horror de una víctima y su entorno que la ama (que también es víctima doliente), para todos los maltratados y abusados deseo citar a Mario Benedetti con su poema “NO TE RINDAS”.
No te rindas, aún estás a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo,
aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,
liberar el lastre, retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
continuar el viaje,
perseguir tus sueños,
destrabar el tiempo,
correr los escombros y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños,
porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
porque lo has querido y porque te quiero.
Porque existe el vino y el amor, es cierto,
porque no hay heridas que no cure el tiempo,
abrir las puertas quitar los cerrojos,
abandonar las murallas que te protegieron.
Vivir la vida y aceptar el reto,
recuperar la risa, ensayar el canto,
bajar la guardia y extender las manos,
desplegar las alas e intentar de nuevo,
celebrar la vida y retomar los cielos,
No te rindas por favor, no cedas,
aunque el frío queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se ponga y se calle el viento,
aún hay fuego en tu alma,
aún hay vida en tus sueños,
porque cada día es un comienzo,
porque ésta es la hora y el mejor momento,
porque no estás sola,
porque yo te quiero.
Responsable del prólogo, Betty Vera.