Читать книгу La trampa de los colores - Hernán Blanco - Страница 4
ОглавлениеAgradecimientos
A mi madre, que se agiganta con los años. A Ceci, Juan, Malú y Vicky, con ellos todo; sin ellos, nada. A Sara y familia. A mis hermanas, Romina y Gabriela, que amo cada vez más, y a sus familias, insustituibles en mi vida. A los miserables, mis hermanos y amigos que siempre me acompañan en todo. Al Sr. Daniel, a Juanjito por la tapa y mucho más. A Lean por el apoyo de siempre y la reseña. A la Subsecretaría de Educación de Tigre. A Geraldin y la asociación A.I.R.E., a Natalia V., a mis compañeros, a mis alumnos, a la gente hermosa de mi Don Torcuato querido y, siempre, a papá, que me acompaña en todo.
Prólogo
A Las mariposas y el tiempo le sigue La trampa de los colores. En él, Hernán Blanco intenta, desde sus cuentos, relatos y algunos ensayos, describir momentos de felicidad o tristeza, contados desde diferentes perspectivas. «Las segundas partes no son buenas» es el prólogo del presente libro; el autor nos lo afirma desde el inicio y es una ley universal, que a veces se cumple, pero otras no. Después de su debut, Hernán Blanco nos sigue dando un mensaje de vida: historias reales que nos conmueven, nos emocionan, nos transportan y nos hacen vivirlas junto a los protagonistas de sus relatos.
Encontraremos narraciones reales de adolescentes que querían ser grandes, pero ahora, en un mundo adulto, quieren ser chicos; de acoso en el ciberespacio; de dos amigas y una elección; de reivindicación; de racismo; de desigualdad en varias formas que duelen, y también de humor, como un recreo entre tanta realidad brutal. Además, se aborda la relación que tiene el ser humano con la tecnología, y nos deja pensando sobre ella. El vínculo con los animales se hace lugar en la diversidad temática del libro; el fútbol tiene su espacio, como no podía ser de otra manera, más en este contexto tan particular y doloroso para los argentinos: la pérdida física de nuestro capitán, el superhéroe de batallas imposibles que nos llevó a creer en nosotros mismos, un nombre que trasciende continentes, culturas, idiomas: Diego Armando Maradona. Aún queda sitio en este paseo narrativo de emociones y sentimientos, este es completado con la muerte y su aparición, que nos cambia la vida para siempre. Algo tan humano como la vida misma. Y, al final, la sorpresa, la frutilla del postre: un pequeño ensayo humanístico donde el autor dialoga consigo mismo sobre las decisiones de la vida y cómo estas nos condicionan en el presente, planteando un interrogante que todos nos hemos hecho alguna vez, ¿qué hubiera pasado si…?
Los textos están acompañados por el talento de Natalia Aranguez en las ilustraciones del interior, que son el complemento ideal para una lectura amena, sentida y visceral de la obra. Estas nos permiten visualizar los aspectos más notables de los relatos.
Párrafo aparte para el arte de tapa de Juan José Da Silva, una delicia atractiva desde la óptica de cualquier ojo. Podemos apreciar la amistad, una noche estrellada ideal, todo dentro de una gran trampa, que es la vida misma. La imagen nos invita a conjeturar una hipótesis de lo que se va a encontrar en el libro. Es una gran antesala introductoria para lo que vendrá después.
Se sentirán identificados en muchas de estas historias, las cuales expresan los momentos transitados de una vida común, con la simple diferencia de que el autor lo ha plasmado en cuentos y relatos.
Leandro Ariel Parrilla
Profesor de Lengua y Literatura
Abogado