Читать книгу Cantos del desterrado ll - José Vicente Casadiego León - Страница 2
Оглавление“Leo con agrado la obra de José Vicente Casadiego León, encuentro allí la necesidad del grito, el descontento de alguien que enfrenta, desde su poesía, diversas situaciones que arrastran a hombres y mujeres por turbias corrientes. La violencia en la cual nos sumergimos sin siquiera extender el brazo antes de hundirnos, es la peor de todas estas aguas. Los Cantos del desterrado son los cantos de los que salen de sus lugares de origen sin que así lo hayan querido, pero también son los cantos de la gente un poco más común que, aunque conviven en las ciudades, hacen parte de los desterrados, de los marginales, en fin... de los condenados por las sociedades indolentes de nuestros días.
Existe en esta obra beligerancia y a la vez sutileza, como una catana japonesa que detrás de su perfil delicadamente curvo y ligero esconde un filo insospechado y certero. El manejo de las imágenes a lo largo del libro es sugerente dentro del desarrollo del texto y directo cuando así lo requiere el poema, como la pincelada oscura y profunda que rompe por contraste un aburrido paisaje.”
Darío Sánchez Carballo
“Quiero comenzar con una frase que nunca he logrado recordar de quien copio siempre: “Lo mejor de la poesía son los amigos poetas”. Es la frase que mejor me sirve para tratar de hablar de un amigo que además de serlo, es un poeta. Y como dijera Germán Vargas Cantillo, ser poeta es la mejor forma de ser algo.
(...)
Pero bien, lo importante aquí es que se diga algo sobre su poesía, que es lo más digno que hace en la vida un poeta, diré que maravilla, que es el único de los nuestros, aprendiz y todo, deseoso de aprender, que logra traer para estas tierras el sueño surrealista. Diré que posee una intuición que a veces asombra por la vocación que ella contiene. Diré que es fundamentalmente él cuando poetiza, que no necesita de poses para decir en sus poemas lo tiene que decir y que no hace concesiones por hacerlas y que en fin, es él, y punto.
Ustedes entienden.
(...)
En fin, lo que quería decir es que con nosotros está un joven poeta criado en los barios más populares de Villavicencio, conocedor del verdadero olor de las muchachas, de todas las rutas de los buses dela ciudad, de los rincones donde se hace uno adulto en la urbe delos llanos, del taxi a las dos de la mañana. Conocedor de las canchas muy grandes para jugar al futbol a pesar del riesgo de los carros. Y conocedor también de las mismas calles en las noches de bohemia que una vez todos los que estamos aquí, sumidos en este calor que atosiga hemos sentido.
Quería decir lo que he dicho, quería contarles que ustedes no saben qué clase de poeta es este que está aquí a mi lado. Y quiero decirles que va siendo hora de que lo conozcan. Este es mi amigo, Vicente Casadiego León: que hable su poesía.”
Julio Daniel Chaparro Hurtado26 de diciembre de 1985