Читать книгу Resumen Completo: Hidden Valley Road - Basado En El Libro De Robert Kolker - Libros Maestros - Страница 5

Más allá de las peleas violentas, con Donald y Jim estaba sucediendo algo más. Jim siempre había sido un chico rebelde, mientras que Donald era un jugador estrella que parecía empeñado en enorgullecer a su padre.

Ya que los padres consideraban que sus dos hijos mayores tenían los comportamientos propios de la juventud, Mimi y Don no se preocuparon demasiado cuando Jim fue suspendido de la escuela por irrumpir en un avión de la Fuerza Aérea y jugar en la cabina, pues la consideraron una travesura atrevida, pero nada grave.

Cuando Donald tenía 17 años y rompió violentamente diez platos de repente, mientras estaba de pie en medio de la cocina, Mimi y Don volvieron a reaccionar de manera similar: no le dieron mucha importancia y descartaron el hecho como un típico drama adolescente. Sin embargo, cuando Donald comenzó su segundo año en Colorado State, las cosas empeoraron de manera rápida, hasta el punto en que Mimi y Don ya no pudieron ignorar la situación como antes.

Donald visitó el centro de salud del campus universitario cuatro veces entre septiembre de 1964 y el otoño de 1965. La primera vez, acudió para tratarse una misteriosa mordedura de gato; la segunda visita se debió a su preocupación de que su compañero de habitación pudiera contraer sífilis sin darse cuenta.

Llegó para que le atendieran un esguince de espalda en la tercera ocasión. El esguince era tan grave que le indicaron que debía pasar toda la noche en la enfermería. Cuando le pidieron una explicación de su lesión, Donald informó que uno de sus hermanos se le había echado encima por detrás cuando estaba visitando a sus familiares.

La última vez en la enfermería fue la peor de todas, y la que encendió la alarma en sus padres: Donald regresó en su cuarta visita con quemaduras graves y su ropa, según se notaba de manera evidente, había estado en llamas. En esta ocasión no hubo una explicación lógica, pues Donald se había arrojado a una hoguera por voluntad propia.

Ninguno de los viajes que hizo Donald al centro de salud esclareció el estado de su salud mental con suficiente rapidez. Sin embargo, a raíz del último incidente en la hoguera, Donald se sometió a su primer examen psiquiátrico. Aunque el psicólogo clínico identificó pruebas de inestabilidad que calificó como simples conflictos emocionales, a Donald se le permitió reanudar sus clases como si nada hubiera pasado.