Читать книгу Resumen Completo: Yo (Me) - Basado En El Libro De Elton John - Libros Maestros - Страница 4

Elton John nació en 1947 y creció en las afueras de Londres, dentro de un barrio de viviendas sociales. En ese entonces, no tenía fanáticos que lo adoraran ni nadie que lo alentara o aplaudiera en ningún aspecto de su vida.

En realidad, creció sin mucha dedicación ni cariño por parte de sus padres, pues Elton vivió sus primeros años entre maltratos. De hecho, pasó gran parte de su infancia soportando castigos y nalgadas inmerecidas, ya que nunca comprendía qué era lo que hacía mal, y sus padres jamás se molestaban en explicárselo.

Ahora, Elton tiene una fortuna de cientos de millones de dólares que ha producido gracias a su enorme catálogo artístico repleto de canciones exitosas, pero eso jamás lo ha hecho olvidar que alguna vez fue un chico común y corriente que perteneció a la clase trabajadora de Inglaterra y que ignoraba por completo que algún día alcanzaría la fama y la fortuna.

Elton era castigado con frecuencia por su padre, Stanley, literalmente por casi cualquier cosa. Elton, a los ojos de su padre, nunca podía hacer nada bien; su padre lo criticaba por todo, desde la forma en que se vestía con su humilde uniforme escolar hasta la forma en que masticaba su comida. Elton no podía encontrar consuelo en su madre, Sheila, pues también le tenía miedo. No es de extrañar, dado que, por ejemplo, su madre le enseñó a ir al baño con un método bastante cruel: lo golpeaba con un cepillo de alambre, a veces hasta que lo hacía sangrar. En aquel entonces, Elton era un pequeño que solo tenía apenas dos años de edad.

Entre el abuso psicológico y físico de su madre y las agresiones físicas y verbales de su padre, quien usaba de pretexto cualquier nimiedad, Elton se encontraba bajo un severo escrutinio constante y todo el tiempo era atacado por cosas que no podía controlar, como la forma de moverse. Así pues, su crianza no solo fue menos que deseable, sino que también fue tan deliberadamente venenosa que pareciera casi un milagro que Elton lograra mantener algún rastro de optimismo o imaginación para, años después, dedicarse a una actividad creativa como la música.

Stanley y Sheila, además, se peleaban todo el tiempo, pues eran un matrimonio bastante disfuncional, como fácilmente se puede deducir por la manera en que criaban a su hijo; de hecho, muchas de las discusiones subidas de tono que sostenían tenían como tema principal al propio Elton.

Cuando Elton tenía once años, por fin se divorciaron, aunque, según las reflexiones maduras de Elton muchos años más tarde, sus padres tendrían que haberse separado incluso desde mucho antes. El problema fue que en la Inglaterra de la década de 1950, el divorcio era un acto mal visto en la correcta sociedad inglesa.