Читать книгу Temor - Lou Priolo - Страница 4

Temor – librándose de su control

Оглавление

¿Alguna vez has tenido temor? Quiero decir, ¿Alguna vez has estado realmente asustado? No solo un poco asustado sino aterrorizado. ¿Alguna vez has estado tan lleno de temor que quedaste absolutamente paralizado? ¿O has estado tan completamente poseído por el temor que tu cuerpo y alma parecían impotentes para hacer algo al respecto?

El monstruo del miedo te ha tomado por la garganta, te ha levantado los pies del suelo y te ha atrapado contra la pared. Allí estás, colgando en el aire, atrapado en su dominio, incapaz de respirar, incapaz de moverte, incapaz de siquiera gritar por ayuda. A medida que él aprieta más y más fuerte tu garganta, todo lo que puedes hacer es mirar ese profundo, grotesco rostro de este monstruo llamado temor a quien temes más que casi cualquier otra cosa.

Tal vez sepas exactamente de qué estoy hablando. O tal vez has tenido encuentros más leves con el monstruo del temor. Lo has visto de lejos y lo respetas, aunque nunca has estado tan completamente incapacitado por su agarre paralizante como acabo de describir. Si estás leyendo este tratado, supongo que tú o alguien a quien amas ha experimentado más que solo un vistazo de esta realidad.

Si es así, tengo buenas noticias para ti: el temor no te posee realmente en el exterior como el agarre paralizador de un monstruo. El temor es una emoción que, en última instancia, puedes aprender a controlar (y eres responsable delante de Dios de hacer justo eso). El monstruo del temor nació, reside y debe ser aniquiladoen tu corazón. Me gustaría mostrarte en la Palabra de Dios qué puedes hacer para matar este falso ogro de manera que ya no te aterrorice.

Comencemos explicando brevemente el lugar que el temor debe tener en tu vida. El temor, como cualquier otra emoción (enojo, odio, celos, por nombrar algunos), puede ser tanto constructivo como destructivo. Tiene tanto poder para el bien como para el mal.

Pero, tal vez te preguntes, ¿cómo puede ser el temor constructivo? Bueno, primero, el temor puede guardarte del peligro físico (tal como caer de un edificio, o ir a la cárcel o contraer VIH/SIDA). Segundo, puede guardarte del peligro espiritual (tal como caer en pecado, exponerte a ti mismo a la tentación, ser traído a la esclavitud por una vida dominada por el pecado, ser disciplinado por tu iglesia local o ser descalificado del ministerio). Salomón dijo, “Y con el temor de Jehová los hombres se apartan del mal” (Proverbios. 16:6).

Si eres una persona temerosa, sin lugar a duda tienes alguna idea de cuán destructivo puede ser el pecado. Es esencial, sin embargo, que comprendas que más importante que la miseria que el temor pecaminoso produce, este es verdaderamente ofensivo para Dios.

Así que, ¿en qué punto el temor se vuelve pecaminoso? Esta es la pregunta que me gustaría que consideráramos a continuación.

Temor

Подняться наверх