Читать книгу Entre el árbol y el bosque - Marcus - Страница 10

Оглавление

CAPÍTULO I

El conocimiento humano

Como percibimos la realidad

Es muy importante saber cómo es que el mundo exterior, ya sea físico, o de cualquier otra índole, intelectual, sentimental, emotivo u otro, nos llega a nosotros. Es decir los mecanismos de los que disponemos para interactuar con nuestro entorno. Carl Jung, (1875 – 1961), psiquiatra y psicoanalista suizo, quien fuera discípulo de Sigmund Freud, y luego se independizó y formó su propia escuela, interpretó los problemas mentales como un modo patológico de procurar la autorrealización personal y espiritual.

Esta definición es muy importante, ya que Jung orientó su trabajo hacia la evolución espiritual humana, no solo a la mera observación y creación de un modelo médico científico.

Expresó, lo que a mi parecer, es el mejor modelo que explica la forma en que los humanos podemos relacionarnos con la realidad, dijo, que nosotros percibimos la realidad de dos formas, con los sentidos y con la intuición.

Cuando digo percibimos, es solo eso, la realidad se nos muestra, la observamos, la contemplamos, pero sin ninguna forma de análisis, comparación, o síntesis, es decir, no hay en la percepción ninguna opinión.

Los sentidos son los que conocemos, tacto vista etc., también son todas las lecturas de los aparatos de medición que tienen los hombres y que leen en rangos que los sentidos que el hombre no tienen, por ejemplo, los visores infrarrojos para ver de noche y medidores de todo tipo.

La intuición es aquella capacidad de percibir la realidad, pero no en la forma que los sentidos lo hacen, sabemos que hay alguien atrás nuestro, pero no lo vemos, es aquello que nos parece que existe, pero que no tenemos ningún método para confirmarlo en ese momento.

Estas dos formas de percibir la realidad son solo esas, y no tienen por sí mismas formas de análisis propias, son solo formas de captar datos.

Las formas de análisis de las percepciones que Jung describe, son dos, el análisis racional, y el sentir.

El análisis racional es el que usamos corrientemente para evaluar los datos aportados por los sentidos, podemos además, evaluar los datos aportados por la intuición, pero depende de la persona que, estos sean considerados como serios en un análisis racional, lo más común es que las personas racionales interpreten a los sentidos como datos reales y no a los intuidos.

El otro tipo de análisis, es aquel en que la persona siente, se siente bien o mal ante una percepción, o impulsada a hacer algo luego de haber procesado los datos, le queda una sensación, pero no es racional.

Esta es una forma típica de análisis de las personas llamadas “intuitivas”, el pálpito que lleva a un inversor a adquirir ciertos bienes, o el olfato del inspector de policía que sigue la pista del asesino.

Bien, todas las personas tienen una tendencia natural a utilizar más un tipo de percepción y un tipo de análisis, Jung nos muestra también que cuando se utiliza la capacidad principal, (que es la predominante en una persona), las otras capacidades actúan en forma secundaria o de apoyo.

Desde otro punto de vista, la percepción por la vía racional sería digital puntual, la vía del análisis racional, sería como la que emplean nuestras computadoras digitales, la solución es una o un conjunto de soluciones particulares.

La percepción por la vía de la intuición tendría una gran cantidad de datos desordenados, y el sentir actuaría como una computadora analógica, que a diferencia de las digitales, no da una solución, sino el conjunto de todas las soluciones posibles en un rango determinado, con lo que en el sentir, lo que se “siente,” es una tendencia, hacia donde ir, o un estado de ánimo que es característico.

Estas distintas operaciones se llevarían a cabo en los dos hemisferios cerebrales humanos, el racional es el izquierdo y el del sentir es derecho.

Estas formas también se dan en distinta proporción en lo femenino y lo masculino, por ejemplo, en general, los hombres son más racionales que las mujeres, y estas a su vez, tienen mayor capacidad para sentir que los hombres, de allí que se ha llamado hemisferio femenino al hemisferio derecho, y masculino al izquierdo.

De esta forma, podemos entender al mundo y a Dios de dos maneras, la racional, que emplea nuestra lógica, y la del sentir, con las dos elaboramos todos nuestros modelos y teorías.

La Lógica

El diccionario nos define lógica como: “La lógica es una ciencia formal, que se dedica a estudiar las formas válidas para demostrar, inferir o evaluar proposiciones”.

Una gran parte de la humanidad se ha basado en el criterio lógico para resolver los problemas que le plantea la vida a diario.

La mayoría de las personas toman sus decisiones con un criterio lógico, aún los gobiernos tienen leyes basadas en la lógica, trámites basados en la lógica etc.

La matemática está basada en la lógica.

Parecería que la lógica, al igual que las matemáticas, permiten al hombre armar un castillo estructurado por elementos que guardan una relación entre sí, y que puede seguir creciendo indefinidamente, y darnos la total certeza de que mientras sigamos sus reglas, jamás cometeremos un error, este fue el concepto imperante en muchas corrientes del conocimiento. El tiempo fue dando a luz a sus detractores, con lo que el sistema comenzó a tener algunas grietas.

Desde tiempos remotos ya se conocían errores que se producían en el castillo lógico, veamos algunos de ellos.

Sistemas auto–referenciales

Existen sistemas de razonamiento que se dicen auto referenciales, esto es que se definen a sí mismos, o que lo que dicen es acerca de sí mismos, como por ejemplo: Esta frase tiene 10 vocales”, esta expresión es una expresión lógica que habla sobre sí misma, nadie en su justa razón podría dudar de que esta frase es verdadera, no cabe ninguna posibilidad de que no sea cierta.

Por el contrario, si escribimos la paradoja griega del mentiroso: “esta frase es falsa”, vemos que también es un sistema auto–referencial, puesto que la misma frase se define a sí misma, pero será cierta o no?

Si la leemos la primera vez, nos encontramos que la frase es falsa, por lo tanto la frase es verdadera, pero si es verdadera, entonces es falsa, y así no acabamos más.

Las paradojas son declaraciones que conducen a un resultado contradictorio después de haber utilizado para la obtención de dichos resultados un sistema lógico impecable.

Las paradojas se presentan con frecuencia en sistemas que son auto–referenciales.

Estas se dan tanto en Lógica como en matemáticas, famosas son las paradojas de Zenón, Cantor, la del barbero, la de la trompeta etc.

Veamos de las más sencillas, la paradoja del barbero y la de Cantor.

La paradoja del barbero dice así:

“En un pueblo el barbero afeita a todos los hombres que no se afeitan a sí mismos”, ¿entonces quien afeita al barbero?

Analicémosla, la frase del principio es totalmente válida, yo puedo decir que en un pueblo existen personas que se afeitan cotidianamente a sí mismas y que no van al barbero para afeitarse, y que existen personas que no se afeitan a sí mismas, por lo tanto alguien las tiene que afeitar, en nuestro caso, por el enunciado, el barbero afeita a todos los demás.

¿Quién afeita entonces al barbero?

Si el barbero se afeita a sí mismo, contradice el enunciado de que el barbero no afeita a aquellos que se afeitan a sí mismos.

Por otro lado, si el barbero no se afeita a sí mismo, es el barbero el que lo afeita, pero como él mismo es el barbero, no se puede afeitar.

Por otro lado el barbero es hombre del pueblo, entonces si pudiéramos representar por un conjunto estarían:

En el pueblo hay: los que se afeitan a sí mismos, los que afeita el barbero, y el barbero que no encaja en ningún tipo.

La paradoja de Cantor, quien fuera un matemático muy importante, fue el primero que trató el tema del infinito con seriedad, y quien fuera autor de la teoría de conjuntos, es de orden matemático y se encaja dentro de la teoría de conjuntos.

Si usted no desea entrar en el aspecto matemático del libro lo puede hacer sin perder ningún elemento conceptual, el siguiente ejemplo no es necesario leerlo habiendo entendido el anterior,sin embargo, la matemática utilizada en el mismo es básica, y si usted puede hacer el esfuerzo completará la idea, solo lo doy para demostrar que la matemática también tiene sus problemas. La paradoja de Cantor puede verla al final del libro, en el anexo nota 1.

De estos dos ejemplos se deduce, que tanto las matemáticas como la lógica tienen algunos baches, o zonas donde los resultados de un pensamiento lógico, o de una secuencia de operaciones matemáticas, nos conducen a una paradoja, a una solución que no es posible, porque se contradicen los resultados provenientes de operaciones matemáticas o lógicas. Sin embargo, parecería a la opinión de muchas personas, que las matemáticas son como un lenguaje divino, que no contiene errores, a ningún ingeniero se le ocurre pensar si un edificio está mal calculado, si ha seguido el procedimiento de cálculo, ni a un contador se le ocurriría pensar que los balances de una empresa están mal hechos porque los cálculos matemáticos son inseguros en sí mismos.

El primero que trató de sistematizar la matemática, de manera tal, que ésta formara parte de la Lógica, fue Bertrand Russell.

Bertrand Russell (1872–1970), un gran filósofo y matemático inglés, premio Nobel de Literatura en 1950, fue uno los pilares de la defensa del libre pensamiento universal.

Russell, amante de la lógica, y del pensamiento positivista, alcanzó el éxito después de haber escrito junto al matemático británico A. Whitehead, la monumental obra “Principia Matemática”, en la cual se forzaba a la matemática a calzar en un criterio lógico. Después de mucho luchar tratando de ajustar la matemática a la lógica, y tratando de resolver los problemas que ello ocasionaba, encontró otra paradoja más, que no pudo resolver, la que quedó como “la paradoja de Russell”.

¿Entonces es la matemática, o es la lógica un camino seguro para entender a Dios o a su Universo, y el cómo funcionan las cosas?

Aún no podemos decirlo, antes tenemos que ver otras soluciones al mismo problema.

Godel

Kurt Godel (1906 – 1978), fue un brillante matemático estadounidense de origen Austríaco, en la foto adjunta lo vemos con Albert Einstein. Evidentemente, Godel tenía la capacidad técnica de un gran matemático, sumada a una visión global, lo que le permitiría formular una solución a los problemas que por la época se presentaban, tanto la matemática, como la lógica.

La estructura del teorema de Godel (1931) no tiene gran importancia para nosotros, lo describiré brevemente, pero lo importante es su conclusión.

Godel, representó cada operación lógica con un número entero, y por un procedimiento matemático que incluía a los números primos, convertía esas operaciones lógicas en números, (números de Godel), y lo hacía de tal manera, que el método de conversión era totalmente reversible, de tal forma que teniendo el número de Godel, podíamos resolverlo y saber cuál fue la operación lógica que le dio origen, es decir desarrolló un método tal, que transformaba las operaciones lógicas en un solo número, y la relación entre ambas, al estar basado el procedimiento en números primos, es decir, que solo son divisibles por uno y por sigo mismos, era singular y biunívoca. A cada número de Godel le correspondía una operación lógica y viceversa.

Se puede demostrar que el desarrollo que conduce a un número de Godel, es totalmente reversible.

O sea, que dado un número de Godel podemos mediante un proceso volver a obtener la formula lógica que le dio origen.

Un conjunto de fórmulas u operaciones lógicas puede expresarse repitiendo el proceso, y dando como resultado otro número de Godel, que representa ese grupo y también es reversible.

Si bien esto se desarrolló para demostrar el teorema, el solo hecho de poder poner expresiones lógicas transformadas en números, tiene un enorme significado.

Si bien estamos lejos de tener capacidad para decodificar estos enormes números de Godel, provenientes de la codificación de información más o menos extensa, ya que nuestros potentes ordenadores, parecen contadores para bebés en este problema, sí importa el concepto de este método, porque es el método más compacto de guardar información que se conoce, mucho más que el sistema biológico de ADN, o cualquier otro conocido.

Volviendo al teorema de Godel, entonces, una vez que el obtenía su número de Godel de una fórmula, repetía el proceso para otras fórmulas para armar su teorema, de tal manera que si tenía varias fórmulas, obtenía un nuevo número de Godel que es la representación de ese conjunto de fórmulas.

David Hilbert (1862 – 1943), destacado filósofo y matemático alemán, proponía que cualquier teorema matemático debía tener un sustento lógico, concreto y firme, basado en un conjunto de axiomas, (que son los supuestos fundamentales para demostrar el teorema, y que forman parte del modelo), y cuya demostración es la simple y mecánica aplicación de operaciones matemáticas basadas solo en la lógica. Esto debía dar, como consecuencia, la demostración del mismo, y por estar la demostración basada en las operaciones lógicas, entonces el resultado final también es verdadero.

Existe en matemática y en lógica axiomas básicos que no deben ser demostrados, y que parecen ser muy razonables, como por ejemplo “El Todo es mayor que cualquiera de las partes”, o “una proposición no puede ser verdadera y falsa al mismotiempo, o “todo es mayor que lo más pequeño”

La consistencia lógica es una propiedad de un conjunto de axiomas.

Se dice que un conjunto de axiomas es consistente, si a partir de él no puede deducirse simultáneamente una proposición (p) y su contraria (–p, o no p).Un conjunto de axiomas será completo, si es capaz de definir perfectamente el sistema pudiendo dar origen a un teorema que demuestre las propiedades del mismo, si el conjunto de axiomas es incompleto, no se puede demostrar ni (p, ni no p).

Para comprender mejor esto pondremos un ejemplo clásico.

Supongamos que un inspector de policía reúne pruebas para determinar la culpabilidad de un acusado de un crimen.

Este deberá contar con la cantidad de pruebas suficientes, que no den lugar a dudas que este es el criminal, es decir si el sistema (conjunto de pruebas), no es “completo” no se puede demostrar si el individuo es culpable, o inocente.

Por otro lado debe elaborar una teoría sobre cómo sucedieron los hechos, que a su vez sea “consistente”, es decir que no se pueda demostrar a través de su explicación del hecho que el acusado es inocente o culpable a la vez.

Esta era, y fue el mecanismo que imperó, y que inspiró el pensamiento científico occidental durante la historia de nuestra ciencia, que aún está vigente en la mayoría de los científicos y técnicos actuales.

¿Que deseaba Godel?

Lo que quería demostrar Godel, que conocía los problemas de las paradojas, era demostrar si existen en matemáticas o lógica propuestas, teoremas o fórmulas, que mediante el uso de axiomas propios, puedan definir si sus resultados son correctos o no.

Esto es, que es imposible formular una matemática, o una lógica que se pruebe a sí misma consistente, que carezca de contradicciones, sin la ayuda de algo fuera de las matemáticas o fuera de la lógica, en algún punto se requerirá que usemos algún patrón, o una idea externa, o un postulado que sencillamente es imposible de probar.

Godel imaginó una demostración que contenía una fórmula en que el número de Godel estaba contenido en la fórmula, no importa el desarrollo detallado de este punto, que es de difícil comprensión, lo importante, es que al incluir su número de Godel en una fórmula desarrollada por el método de Godel, el sistema se estaba convirtiendo en un sistema auto–referencial, como ya vimos unos cuantos de estos sistemas auto–referenciales conducen a paradojas, y en este caso pasó exactamente lo mismo, es decir el sistema no era ni consistente ni completo.

Por lo que la fórmula no pudo ser demostrada, entonces Godelpudo así expresar su idea de que se necesitan soluciones “metamatemáticas” para la matemática, algunos postulados que están más allá de la matemática para definir ciertos problemas matemáticos, de no hacerlo, no tienen resolución y quedan en un callejón sin salida. Un ejemplo sencillo sería la utilización de la conocida fórmula para resolver ecuaciones de segundo grado, que nos da dos números (raíces), uno de los cuales es el que resuelve la ecuación en sentido real, y el otro, no lo hace, aunque cumple la ecuación, como por ejemplo, cuando esas variables representan una magnitud física, la masa de un cuerpo que no puede ser negativa. Entonces por criterio humano elegimos la solución positiva, si quiere el lector hacer la prueba resolviendo la ecuación (x2 + 2x = 0), (ver anexo 6), verá que tiene dos resultados que cumplen la ecuación, uno positivo y otro negativo, la elección final es meta–matemática, según la variable que se trate, ya que hay variables, como por ejemplo la cantidad de personas que hay en una sala, que no puede ser negativo, y esto la matemática no lo sabe.

Esto nos dice que jamás una computadora podrá tener la capacidad de un cerebro humano, ya que la misma quedaría atrapada en su conjunto de axiomas, por no disponer de capacidad para soluciones meta–matemáticas, las cuales los seres humanos sí tienen.

Godel es el Magallanes del siglo XX, muchos sabían desde épocas remotas que la tierra no era plana, sino que tenía forma esférica, pero solo Magallanes y Elcano lo demostraron a ciencia cierta al darle la vuelta al globo.

Es imprescindible que todos tomemos en cuenta el resultado del teorema de Godel, ya que en él implícitamente se están estableciendo “niveles de decisión”.

Esta sería la primera prueba cierta y científica de que los planos o niveles de un sistema se agotan, que en estos niveles, ya no se pueden encontrar soluciones satisfactorias, por lo que hay que acceder a otro nivel para solucionar estos problemas.

La necesaria búsqueda de “niveles” distintos de decisión es una prueba “intuitiva” de la existencia de estos niveles.

Todo esto, se puede relacionar con la mayoría de las ciencias, tanto exactas como sociales, ya que, no solo en matemáticas se nos presentan estos problemas, sino también en muchos aspectos de la vida, donde se deben tomar decisiones que superan el estado de la ciencia actual, o como en el caso de la medicina donde se producen, a veces, curaciones milagrosas, por una vía no ortodoxa.

Este es el tiempo en que la ciencia empieza a integrarse, y comienza a buscar, a investigar estos milagros, creo que nos encontraremos con nuevas formas de conocimiento.

Hermes

Hermes Trismegisto, según cuenta la mitología, fue un maestro egipcio que vivió en la antigüedad en el Egipto pre–faraónico, algunos lo ubican como contemporáneo de Abraham, era el mensajero de los Dioses, su correspondencia romana fue Mercurio, que con sus pies alados transmitía los mensajes de los dioses a los hombres.

El resumen de su sabiduría se encuentra en El Kibalión, en este pequeño libro nos expone siete leyes universales en las que se trata de explicar magnífica, y sintéticamente el funcionamiento de los sistemas del Universo.

En su IV ley, Hermes se refiere a los sistemas polares, y dice:

“Todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse”.

La idea de Hermes es que todas las paradojas se pueden conciliar, ya que son un aspecto más de la polaridad que existe en este Universo, y que la solución se obtiene ascendiendo un plano más arriba de aquel en que se están tratando estas paradojas.

Hermes define un sistema de leyes que actúan y se corresponden según los distintos planos, que hemos visto aparecen intuitivamente en el teorema de Godel. Cuando una ley de un plano conduce a una paradoja, entonces la solución está en el plano superior.

En definitiva, lo que quiero remarcar es que la solución de Godel fue enunciada por Hermes Trimegisto hace miles de años, y como muchas cosas, si alguien hubiera prestado atención a muchos escritos de la antigüedad, muchas cosas se hubieran resuelto antes, y muchas se podrían resolver todavía.

En términos caseros, a cualquier padre se le habrá planteado el siguiente problema: dos hijos discuten por algo que es razonable, de acuerdo al nivel de conciencia de cada niño, cada uno, en su nivel de conciencia tiene razón en lo que afirma. En todo caso la solución del problema estará dada por los padres con una decisión tomada en otro nivel de conciencia.

El caso típico es el de dos países que pelean por un territorio, en los que existen leyes internacionales que favorecen a los dos, y también existen razones históricas que favorecen a los dos.

Una de las salidas más comunes de estos conflictos es la guerra, en donde todos pierden, porque la solución se está buscando en el “mismo plano”, y por lo tanto, no hay solución por esta vía.

Esta es una disputa de nunca acabar, ya que en esta, como en muchas discusiones, existen razones válidas para ambas partes, y lo que se precisa es una “supra” decisión para resolverlo, tal como la decisión metamatemática de Godel.

Habrá que buscar dicha solución, hay que buscar dentro o fuera de los países un criterio mucho más amplio sobre la conveniencia de un arreglo que sea lo mejor para todos, aunque muchos no lo vean así, y crean que la violencia es el mejor camino para resolver los problemas.

Sistemas referenciale, subjetivos y absolutos

Es muy interesante definir los sistemas que toman parte en las decisiones de los seres humanos, estas decisiones vienen valoradas y procesadas por un conjunto de elementos, para luego emitir una respuesta al medio o a un sujeto.

Todo ser humano debe adquirir su conocimiento de alguna manera, para ello cuenta, como ya vimos anteriormente, con los sistemas de captación, (sentidos e intuición) y análisis de lo captado, (raciocinio y sentir).

Bien, los sistemas de referencia son muy importantes para definir el campo o marco en el cual el ser humano puede adquirir conocimientos.

Al contrario de los sistemas auto referenciales, los sistemas referenciales no se definen a sí mismos, como ya habíamos visto. Puede utilizarse uno de estos sistemas cuando un sistema auto–referencial queda, por decirlo de alguna manera, trabado y no se obtiene solución de él.

Los sistemas referenciales, como su nombre lo indica, están formados por el individuo, y su relación con un punto fijo referencial.

Dentro de los sistemas referenciales, existen dos tipos bien definidos, uno es el referencial puro, y el otro es el referencial subjetivo.

Los sistemas referenciales absolutos, son aquellos en los cuales el punto fijo referencial está formado por los sistemas de creencias en general, el estado más puro de estos sistemas absolutos es una religión en su forma totalmente pura, que dicta normas y comportamientos que no son sujeto de discusión, que están referenciados generalmente a un maestro o guía que las elaboró.

Los sistemas referenciales subjetivos están formados por el sujeto, y su reacción a todo el sistema de conocimientos y creencias, por lo que este determina un punto de referencia que no es absoluto, sino que es el que lo define.

Es un sistema en el cual el individuo mantiene y conoce su posición en base a la relación que mantiene con lo que podríamos denominar “un punto fijo subjetivo”.

Esto se debe, en parte, a que el individuo siempre toma del sistema de creencias puro las normas con las que su pensamiento está de acuerdo, desechando aquellas con las que no concuerda. Los sistemas subjetivos son de una u otra manera algo auto– referenciales, al ser creados por el mismo sujeto con quién mantiene la relación.

No existe una cosa más tranquilizante para un ser humano que tener puntos fijos absolutos donde poder referenciarse, ya que solucionan una gran parte de las decisiones de su vida, al resultar mucho más fácil saber claramente que es lo que su patrón de referencia dice acerca de cómo obrar en determinadas circunstancias, y porque sabría cuáles son sus objetivos en la vida, qué es lo que está bien y qué es lo que está mal, en base a la comparación con un libro sagrado, las costumbres familiares, o tradiciones culturales, que forman un punto de vista absoluto.

Es muy difícil para muchas personas utilizar completamente este criterio.

Los puntos de vista absolutos están presentes en las religiones, de manera tal, que estos puntos de vista absolutos, son los que los creyentes y la teología religiosa considera inalterables, eternos e inamovibles.

Entonces, es más fácil creer que conocemos nuestra posición sobre un aspecto de la vida, ya que conoceremos más o menos las diferencias que tenemos entre nuestro obrar, con el que teóricamente determina que debería ser nuestra religión para ese caso, por ejemplo, si defino un grado de perfección determinado como punto absoluto, entonces podré compararme con él. En este punto encaja la figura arquetípica del “líder”, como veremos luego.

Lo que nunca podré afirmar, salvo por una condición de “postulado o principio”, es si este punto realmente está donde yo digo o creo, y si tiene las características que yo digo o creo.

En el caso de las ciencias espirituales este postulado o principio se transforma en lo que llamamos “Fe”.

En el caso de la ciencia, una vez establecido lo que se conoce como modelo, que incluye ciertos parámetros referenciales y axiomas, la coherencia de los resultados predichos con la realidad será lo que haga que se confíe en ese modelo, y en esas referencias.

Por desgracia, el solo hecho de que exista un observador en cualquier sistema, y que de una u otra manera estemos estudiando fenómenos que son relaciones entre nosotros y el resto de un sistema, nos convierte en parte del sistema estudiado, ya que interactuamos con él, y no solo nuestra observación lo modifica, sino que forma parte del mismo sistema.

De esta manera, si lo miramos así, todos nuestros sistemas referenciales se vuelven en parte auto–referenciales, con todos los problemas y beneficios que ello acarrea. Esta es otra de las conclusiones que podemos sacar del teorema de Godel, ya que en pocas palabras somos una unidad, pertenecemos al igual que el resto de los seres y cosas del Universo al mismo y único sistema.

Siempre estaremos mirando dentro de la Unidad.

De todas maneras, el Universo está así constituido, y la diversidad de formas que habitan en él tienen así la posibilidad de evolucionar pasando de plano en plano, cada vez que un sistema auto–referencial se agota, siendo esto un estímulo para el desarrollo y evolución de los seres.

Mientras tanto, los seres humanos debemos preocuparnos por nuestros problemas, y nuestro entorno. Por lo que debemos adoptar algunos sistemas referenciales prácticos y otros deben seguir en evolución respetando principios.

La forma de hacerlo por “convención” significa asignarle un valor a un punto y considerarlo fijo, o bien, asignarle determinadas características que van a constituir un modelo de la realidad, las cuales son indiscutibles a priori, ya que en dicho modelo se toma como veraz y no está sujeto a discusión.

En base a estos puntos fijos elaboramos una teoría o modelo, que nos da resultados que podemos comparar con lo que sucede en la realidad.

Para la mayoría de las aplicaciones prácticas la teoría no predice perfectamente lo que sucede, pero esta aproximación ha sido suficiente para elaborar el estado de la técnica y la sociedad humana actual.

Amplitud de los sistemas referenciales

En la práctica existe otro problema relacionado con el estudio de estos sistemas, es la amplitud del sistema referencial y su precisión, podemos establecer relaciones entre los distintos componentes, punto fijo y observador, solo en lugares determinados, ya que no somos omnipresentes, y tampoco podemos hacerlo en el tiempo, ya que por lo menos físicamente no somos eternos. Analicémoslo.

Nosotros conocemos o podemos conocer lo que transcurre en el lapso en el que estamos estudiando un sistema, pero nuestro período de vida es muy corto comparado con lo que sucede en el Universo, donde los hechos se desarrollan en millones de años.

Necesariamente, y por presentar la naturaleza del Universo fenómenos de orden cíclico, que tienen un ritmo en el cual existen cadencias de fenómenos, debemos observar un muy largo período para saber a ciencia cierta que los fenómenos que estamos observando son el resultado de lo que pensamos, por ejemplo los problemas de recalentamiento de la Tierra, la capa de ozono y otras situaciones de este orden, deben ser estudiados por muchos años, ya que si no, se corre el riesgo de confundir un ritmo de la naturaleza con un efecto producido por una causa que estimamos probable.

Aun habiendo establecido ciertos ritmos naturales, todavía tenemos que seguir estudiando para saber si es que no estamos montados en otra variación aún más larga, como lo que se muestra en el siguiente diagrama.

En un gráfico como este se puede representar las variaciones de una variable con respecto a otra. Fue desarrollado por Descartes, de ahí que se llama eje cartesiano.


Representamos dos ejes, en el eje vertical se representa y mide la variable a medir, que puede ser cualquiera, en este caso temperatura del aire en un lugar determinado, en el horizontal se representa la otra variable, en este caso el tiempo. Mientras más lejos de la intersección de los ejes estemos, mayor será el valor de las variables. Por ejemplo para un tiempo de 40000 años la temperatura será de 28ºC.

La línea roja representa variación de onda larga, y sobre ella está montada la línea azul, ambas curvas nos dan la variación de la temperatura en función del tiempo.

La línea roja es una onda mucho más corta en el tiempo, en la cual las observaciones son visibles para nosotros, y tal vez, equivocadamente interpretemos que la variable a medir baja por ejemplo en el punto A, cuando en realidad solo es una variación estacional, y todavía el fenómeno general determinado por la curva azul sigue creciendo.


De la misma manera, que si una persona viviera en nuestro planeta solo los tres meses de primavera, podría pensar que el planeta se calentará.

Tampoco podemos asegurar que todas las relaciones que yo observo desde un punto de vista necesariamente serán válidas

para todos los lugares de observación. Por ejemplo si observamos el cubo X de la figura en forma perpendicular o a cierta distancia no podemos saber que la figura es un cubo, ni siquiera puedo saber si es una superficie cuadrada, o un volumen. Ya que tanto uno como el otro presentan igual apariencia. En el dibujo vemos que hay tres observadores A, B, y C que es el lector que mira la página desde arriba en forma perpendicular.

Todos ellos, seguramente, estarán convencidos de que lo que están viendo es un cuadrado, esto pasa porque no tenemos el conocimiento suficiente para definir algo con una sola observación.

Pero la verdad es que ninguno de ellos en forma separada puede aseverar que lo que está viendo es un cuadrado, un prisma, o un cubo, ya que la visión de los tres es parcial, y sin embargo cada uno de ellos verá una figura cuadrada.

Pero si comparten la información que tiene cada uno, la síntesis del análisis colectivo determinará en definitiva que lo que están viendo los tres es un cubo, y esta será la verdad.

Y esto, solo podemos aseverarlo, porque el cubo se define por tres medidas, en otro caso más complejo, no podríamos hacerlo.

De esto se deduce que los seres humanos con nuestro conjunto de captación, con nuestros sentidos o con nuestra intuición estamos solo observando un “trozo” de la realidad, pero que existe otra forma de evaluar el campo que nos rodea y es relacionarnos nosotros mismos con otro observador del “trozo” de realidad, es decir, escuchar lo que otra persona percibe o analiza de un mismo fenómeno en una posición que inevitablemente no puede ser la nuestra, con lo que conseguimos información extra del sistema.

¿Cuántos “Informantes” deberíamos tener para conocer un sistema?

Pues muchos, mientras más informantes, mejor será nuestro conocimiento del sistema, lo que significa que para conocer un sistema “lo mejor posible” nosotros debemos considerar todo el material que está a nuestro alcance, no podemos despreciar nada de lo que los demás nos puedan informar y tampoco debemos desechar nada de lo que los demás han analizado de datos que han obtenido. Qué decir si este cúmulo de datos o de análisis han sido obtenidos a lo largo de muchos años.

Entonces esta información es además multifocal con respecto a un lapso de tiempo, y qué decir si esta información proviene de distintos espacios (lugares), será aún más rica porque será multifocal con respecto al espacio. Volveremos sobre el particular más adelante en Atemporalidad y Multi–posición.

Verdades particulares y estadísticas

Estamos acostumbrados a creer que no pueden existir dos verdades de una misma cosa, y esto es totalmente posible.

Tal como vimos anteriormente, los puntos de vista subjetivos al observar un mismo objeto son completamente distintos para dos seres humanos, aunque se trate del mismo objeto, y ninguno de los observadores mienta. Incluso, en la mayoría de los casos las verdades de las personas no se contraponen entre sí, sino que tienen partes comunes, y partes distintas, no son totalmente contradictorias entre sí, sino que son complementarias de una verdad.

Por esto dijimos cuando explicamos el teorema de Godel que las contradicciones se resuelven en un nivel de más conocimiento.

En el gráfico del cubo que recién explicamos, vemos que todos los observadores, A, B y C tendrán la seguridad individualmente de lo que lo que están viendo, es un cuadrado.

Esta es una verdad particular. Usamos el término “verdad particular” para designar aquella que rige para el individuo, en términos humanos es la visión que tiene el individuo del sistema que lo rodea, es una verdad dinámica, que va cambiando y perfeccionándose con el tiempo.

A lo largo de la vida los individuos van transformando estas formas singulares de ver las cosas en leyes particulares, ya que obran en concordancia con las mismas, actúa en base a estas leyes que ha descubierto por medio de su experiencia en la vida.

Una verdad estadística vendría a ser la media de estas verdades particulares tomadas en un conjunto de muchos individuos, y determina en forma general el comportamiento de un grupo de personas o sociedad.

Estas verdades estadísticas también van cambiando con el curso del tiempo, y evolucionan con él.

Las verdades estadísticas con el tiempo pueden transformarse en leyes, ya que representan la forma general de pensamiento de lo que está bien y lo que está mal de una sociedad, son dinámicas, al igual que las verdades particulares, cambian con el tiempo.

De esta manera se conciben muchos de los comportamientos humanos de una sociedad. Sin embargo, el enunciado de una verdad estadística, no es del todo aplicable a un individuo, porque aunque una verdad o ley estadística rige el comportamiento de un grupo de individuos, no puede decirse que sea aplicable estrictamente a un individuo, pero sí a la mayoría de estos.

Se debe a que al no tener los individuos de una sociedad el mismo nivel evolutivo, hay personas que ya no se rigen por la verdad estadística que está en vigencia en este momento, sino por una propia, que determina que su comportamiento no sea el común de la sociedad.

Ejemplos típicos de este tipo de verdades son las clásicas leyes de la Economía, como la ley de la oferta y la demanda.

En esta ley, por imperio de la naturaleza humana, los bienes escasos son más codiciados que los bienes abundantes, aunque los mismos tengan igual utilidad, y como consecuencia los bienes codiciados son más caros.

Esto es así debido a criterios particulares de los habitantes de una sociedad que no ha evolucionado lo suficiente, por lo que su comportamiento global puede ser predicho con gran exactitud por estas leyes.

El tiempo da la posibilidad de evolución, estas leyes pueden cambiar si cambia o desaparece el motivo que les dio origen, o si la sociedad en su conjunto cambia sus valores o conceptos.

Podríamos decir entonces, que los comportamientos de una sociedad pueden ser establecidos por leyes, y que por medio de las mismas se pueden predecir hechos, o lo que es peor, diseñar planes en base a las mismas.

Hay científicos que han establecido con éxito leyes de comportamiento social, y aplicándolas a variables que rigen la economía de un pueblo o país, pueden predecir con suficiente tiempo tendencias de precios u otras variables económicas, así como gustos y otros comportamientos sociales de masa, o por ejemplo, que sectores de una ciudad tendrán más valor económico en el futuro.

Los poderosos líderes del mundo emplean esto como moneda corriente, utilizando estas leyes estadísticas para manipular pueblos enteros, para obtener resultados que pueden o no ser buenos para este pueblo.

Lo que nunca se va a obtener con este tipo de aplicación es mejorar la conciencia de las personas, ya que para aplicar estas leyes, los gobiernos deben tener la seguridad de que se van a cumplir por un tiempo más o menos largo, para lo cual, la conciencia y el comportamiento de los individuos no debe variar, por lo tanto, no deben cambian sus valores, ni sus conceptos, no deben evolucionar, con lo que la ley sigue rigiendo. No es que esto sea eterno, pero constituye un cepo que retrasa la evolución de las personas.

Es absolutamente imprescindible para el crecimiento y desarrollo humanos, la tolerancia entre verdades particulares, su análisis, y su integración, aceptando los puntos de vista de los demás como lo que realmente son, ya que estos puntos de vista son aquellos que jamás podremos tener, porque no estamos en esa posición, ni vivimos las vidas de otros, entonces debemos integrar más y defender menos nuestras posiciones.

Todos los sistemas totalitarios que pretenden que el hombre no se desarrolle se basan en la incomunicación, el adoctrinamiento, y en la falsa comunicación, de esta manera las leyes estadísticas siguen teniendo valor y pueden ser aplicadas, recuerden “divide y reinarás”.

El sentir

Este mecanismo de análisis, funciona ordenando los datos y clasificándolos de una manera que a nosotros nos resulta aún extraña.

Como ya dije, el sentir evalúa la realidad de manera que a veces los resultados no son los que coinciden con el análisis lógico racional puntual.

La principal diferencia entre el sentir y la lógica del raciocinio es que, mientras la lógica emite una solución por cada situación, a cada punto de una situación le corresponde una respuesta, el sentir como mecanismo de análisis, lo que hace, es integrar una serie muy larga de datos (es la explicación lógica), con lo que obtiene una curva o una “tendencia” que nos describe en forma más vaga, pero más amplia el problema.

Es como si por medio del sentir nosotros pudiéramos proyectarnos, suponer las posibles situaciones que en el momento del problema no se nos ocurren en forma lógica.

Otra forma de solución común del sentir son los símbolos.

Con los símbolos se obtiene una respuesta completa de un problema en forma analógica.

Tal el caso de Kekulé, (1829 – 1896) químico alemán que estudiaba las diferencias entre el hexano, y otro compuesto químico, el benceno, que a pesar de tener idéntica composición química, es decir que la cantidad de Carbono, e Hidrógeno eran iguales para los dos, tenía propiedades físicas muy diferentes.

De esta manera y con el problema en su mente siempre presente Kekulé soñó con niños que formaban una ronda cerrada, tomados cada uno con el otro por las manos.

Cuando despertó supo que había resuelto el problema que hacía tanto tiempo lo ocupaba, habían nacido para la ciencia los hidrocarburos cíclicos, que forman cadenas que no están abiertas, como los hasta entonces conocidos, sino que forman anillos cerrados, en forma de ronda, por lo que a pesar de contener la misma composición química, y el mismo peso molecular, son substancias distintas, con propiedades muy diferentes.

Los símbolos son sistemas portadores de una gran cantidad de información, a veces no se puede leer esta información, si el que intenta aprender no está sintonizado con el lenguaje simbólico, a veces el lenguaje de un símbolo es tan particular, que solo lo entienden pocas personas, los símbolos por otro lado pueden ser reducidos, o sea limitados en su capacidad para transmitir información y pasar a ser íconos, o señales que por medio de un dibujo apropiado transmiten una idea rápidamente y sin error, tales como los que usamos diariamente en nuestras computadoras o celulares.

Los polos como parte del todo

A menudo encontramos gente que se maneja mayormente con el hemisferio izquierdo, que defienden los puntos de vista lógicos, las matemáticas, y que piensan que no hay otra cosa fuera de esta forma de análisis, pero también están aquellos que se manejan casi exclusivamente con el hemisferio derecho, el que interpreta al sentir y sus decisiones pasan casi todas por este punto de vista, desechando la actitud racional de las personas que todo lo analizan.

Yo pienso que ambos hemisferios no son distintos en calidad, y que emplean los mismos sistemas de análisis.

Entonces, alguien se preguntará, a qué viene la división entre razón, y sentir?, pues bueno, es una forma más humana y más integrada de mencionar las cosas de manera de que nos resulte más fácil explicarlas.

El cerebro derecho con su capacidad para sentir, es un órgano que trabaja con funciones muy complejas y variadas, que en la mayoría de los casos no solo son muy complicadas sino que también están codificadas, de aquí que sus resultados sean muy generales, amplios, pero de escasa precisión, y su estructura está adaptada a este funcionamiento.

Por ello en este hemisferio se procesan las cosas muy complejas, sentimientos, música, arte, sensaciones, símbolos etc.

El cerebro izquierdo y su capacidad para analizar, vendría a ser una especie de hemisferio derecho con una enorme lupa, lo que hace que pueda mirar en el espacio micro–cósmico con una excelente definición, pero con un rango de amplitud muy limitado, con una gran precisión, pero con escasa capacidad para abarcar.

Por esto, en este hemisferio se desarrollan tareas vinculadas a lo lógico, a lo digital, a decidir entre una cosa y la otra, entre blanco o negro, a la construcción de modelos mediante el uso de las matemáticas, etc.

De este modo, los hemisferios presentan las capacidades distintas que están listadas más adelante en el cap. VII polaridad y sexo.

Es como un telescopio, y la visión humana normal, la que en nuestra analogía representa el hemisferio derecho, y el telescopio, propiamente dicho, es el izquierdo.

Jamás captaremos con el telescopio la belleza del universo en su conjunto, su magnitud, sus colores, y por lo tanto, tampoco existirá inspiración en el alma del observador inclinándose ante tanta belleza, y llenando su corazón de armonía y grandeza, pero tampoco sin él sabremos datos relativos a un cráter de Marte que buscamos y que nos interesa desde el punto de vista práctico, y por lo tanto no conoceremos el microcosmos de este Universo.

El que usa solo el hemisferio izquierdo pierde la perspectiva, es como estar mirando una pared a dos centímetros de distancia, no alcanzamos a ver la amplitud de la misma, pero sí vemos la rugosidad, su terminación, etc.

El que usa solo el hemisferio derecho ve solamente la globalidad de un sistema, pero jamás podrá observar los detalles.

Es como dice el dicho, el hemisferio izquierdo sería ver el árbol, y el derecho sería ver el bosque.

El oído es el órgano sensorial más desarrollado que posee el ser humano, con el mismo se pueden apreciar no solo, frecuencias que van del orden de los 20 Hertz hasta los 20000 Hz, es decir unas mil veces de diferencia, sino que también nuestro oído tiene la capacidad de escuchar sonidos muy débiles, hasta sonidos muy, muy fuertes, digamos que el volumen de un sonido se mide en Decibelio dB, que está expresado como un logaritmo, ya que se precisa reducir el número debido a las magnitudes excesivamente altas que darían los volúmenes si fueran lineales.

Para poder hacer estas operaciones en un rango tan grande de calidad (frecuencia) y cantidad (volumen), nuestro oído debe dividir al igual que el cerebro humano las tareas. Se sabe que la excitación sonora proveniente del aire, se transforma en movimiento en el tímpano, y se transmite a los huesos del oído, y finalmente llega al nervio auditivo, que conduce el impulso al cerebro.

Las células que transforman las vibraciones en impulsos eléctricos, que son los que entiende nuestro cerebro, están ciliadas. Desde su superficie nacen unas prolongaciones cilíndricas delgadas, dispuestas en forma perpendicular a la membrana celular.

Los movimientos en los cilios son transformados por las células en impulsos eléctricos, pero como no es físicamente posible que una sola célula transforme en impulsos nerviosos el total de la frecuencia del rango audible, por lo menos con la eficacia necesaria para que nosotros escuchemos bien, entonces se dividen en zonas de células, algunas se encargan de “escuchar las tonalidades muy agudas, otro grupo las agudas, otra las medias, otra las graves etc.

Lo mismo sucede con los volúmenes, no todas las células que están preparadas para escuchar sonidos, supongamos agudos, pueden “escuchar” sonidos de intensidad muy baja o muy alta, por lo que dentro de la zona de células que trabaja para escuchar los sonidos agudos existirán células que en esa banda se encargan de escuchar los sonidos muy débiles, otra los muy fuertes, pero la principal virtud de nuestro oído es la de afinar.

En electrónica de audio se conoce como ruido blanco a un conjunto de señales audibles que no poseen ningún patrón de comportamiento, no tienen una frecuencia fija y determinada, pero que son de una amplitud similar (volumen parecido), es el sonido que escuchamos cuando se corta la transmisión de un canal de TV, si tenemos una señal de audio que sea menor en amplitud que el ruido blanco, será imposible separar esta señal ni reconocerla, ya que al ser la señal del ruido blanco irregular no se puede suprimir.

Sin embargo, el oído del ser humano es a veces capaz de distinguir un tono de voz conocido aún en un lugar en donde están hablando muchas personas a la vez, lo que representa un buen ruido blanco.

Esto se debe a que el oído es capaz de interpretar las armónicas provenientes de una voz conocida, y reconocerla como tal, aún más, es capaz de designar un grupo de células acorde con la frecuencia y la intensidad de lo que se desea escuchar y afinar los cilios de las células, es decir que por medio de agentes químicos, los cilios se endurecen o ablandan con el objeto de tener mayor sensibilidad para afinar con la voz que se quiere escuchar.

Vemos muchas veces que la naturaleza ha empleado sistemas y tecnología similares para resolver diseños, por lo que la capacidad de nuestro oído de afinar también la tiene nuestro cerebro, que es capaz de sintonizarse con un determinado tema, problema o situación, como vimos con Kekulé los hemisferios se sintonizan o sincronizan en busca de la verdad, y quedan “afinados” con un problema, o con una preocupación, buscando solos la solución, aunque no nos demos cuenta y estemos haciendo cualquier otra actividad, la solución muchas veces aparece en cualquier momento, y con distintas formas de manifestación.

El problema actual, que muchos mencionan como falta de desarrollo del hemisferio derecho, en desmedro del izquierdo, se debe básicamente a la capacidad de la mente humana para sintonizarse, y usar su mejor órgano para la solución de un problema.

Entonces, el problema que tenemos, no es que debamos desarrollar el hemisferio derecho, el problema es que nos interesamos básicamente por cosas que no precisan su uso.

Esto se debe fundamentalmente en Occidente al desarrollo demasiado rápido de tecnología, y los intereses económicos que están detrás de esto, lo que hace que la mayoría de las personas dediquen la mayor parte de sus energías a la supervivencia, el placer físico y las sensaciones nuevas que brinda la nueva tecnología, en desmedro del conocimiento espiritual, el arte o la música.

No debemos interpretar que el desarrollo tecnológico sea malo, sino que debe ser equilibrado con el resto de los desarrollos de las demás partes del ser humano.

En Oriente en general, en India o China a mediados del siglo veinte el problema parecía tener una tendencia inversa, es decir escaso desarrollo tecnológico, y un buen uso del hemisferio derecho.

La fusión entre Oriente y Occidente que aparecía con buenas perspectivas en la década del 60, ya que podía equilibrar las cosas, ha rotado y pareciera estar al revés, Occidente va transmitiendo su forma de vida a Oriente.

En este sentido una parte privilegiada de la humanidad está tomando conciencia de que el desarrollo conjunto de ambos hemisferios es lo ideal, y están apareciendo métodos y ejercicios que conducen a ello, pero el mejor ejercicio está en la vida misma, y en la forma en que ésta se viva.

Debemos tener en cuenta, que como pasa cuando aprendemos una lengua, y no la hablamos, se va olvidando, de la misma manera, debemos ejercitar ambos hemisferios, pero atendiendo a que el hombre es una unidad, de tal forma que diversificando sus intereses, se consiga que, tanto la lógica como el sentir funcionen en forma natural, por necesidad de comprensión de nuestros intereses.

Los métodos de aprendizaje deductivos, son aquellos que mediante un modelo y con construcción lógica matemática obtienen una ley, e inductivos, los que a partir de la observación de los hechos, generalizan y obtienen una ley, deben ser aplicados conjuntamente.

El teorema de incompletez de Godel nos demuestra, cómo nuestros métodos deductivos tienen un límite, que debe franquearse con una nueva visión, o con una ley más general, más amplia, más extensa, y las leyes obtenidas por sistemas inductivos están sujetas a planos y rangos de aplicación, es decir, que cuando un sistema no puede ser resuelto en un plano, debe considerarse la posibilidad de que el conjunto de leyes que rigen ese sistema esté incompleto, por lo que debe hacer un análisis más general, y buscar en los entornos, en el plano superior del sistema, en la raíz del sistema, o en los costados del mismo, debemos aclarar que cuando nos referimos a superior no es que esté arriba, sino que abarca al inferior, es más completo, es como si dijéramos que el de abajo se rige por leyes, el de arriba lo hace por principios, o sea, hay muchas más soluciones en el plano superior que en el inferior.

Un buen ejemplo de labor conjunta de ambos hemisferios es el siguiente, a pesar de que solo se puede tomar como experiencia física.

Si emitimos sonidos por medio de un sintetizador de ondas de audio a unos auriculares puestos de tal manera que no haya interferencia exterior de sonido por el aire, de tal manera quehacemos que en el oído izquierdo escuchemos primero una tonalidad, luego dejemos de escuchar esta tonalidad, disminuyamos ese volumen a cero, y emitamos una tonalidad diferente en el oído derecho, y escuchemos esa tonalidad que es diferente en frecuencia a la del oído izquierdo.

A continuación escuchemos las dos tonalidades juntas, veremos como aparece, y nosotros escuchamos una tercera onda, que es parecida a la onda que produce un efecto de vibrato o de trémolo, aunque no es exacta la comparación, no lo podría definir yo con precisión, ya que pareciera que escuchas una variación de frecuencia,conjuntamente con una de volumen, y que resulta ser de la interacción de las dos ondas.

Esta suma algebraica, o interferencia de ondas, las que escuchamos en cada oído se produce en nuestro cerebro, y la solución que da nuestro cerebro en conjunto a este problema, que en este caso es una interferencia que aparece con los sonidos, y que les puedo asegurar no está saliendo por ninguno de los dos parlantes de los auriculares. Podemos comprobar esto levantando cada uno de los mismos, o bajando el volumen a cero de cada uno de los auriculares por separado, entonces el efecto desaparece.

Esto es un típico caso de solución integral. Y digo que solo puede tomarse como ejemplo de un efecto físico, porque el oído izquierdo conduce su señal al hemisferio derecho y viceversa, cuando estos están trabajando por separado el efecto no aparece, solo aparece cuando ambos hemisferios reciben la señal en forma conjunta.

La Analogía con las leyes ya conocidas, su aplicación, y su rango

Vemos que es muy común en los escritores de todo tipo, pero sobre todo en aquellos que pretenden indagar sobre la naturaleza del espíritu humano, hacer analogías con el mundo físico.

Esto tiene la gran virtud de que lo físico es visible, que lo conocemos más, y que para muchísimos casos la ciencia ha descubierto las leyes que rigen los fenómenos a los que hacemos alusión en la analogía, por lo tanto, nos encontramos con un sistema en el cual solo debemos “ubicar”, o“asignar”los papeles o roles que desempeñan los elementos de las analogías.

Esto ha sido utilizado por grandes maestros que han enseñado a través de este sistema, (parábolas o cuentos representativos) para impartir enseñanzas, y para comprender el funcionamiento de las cosas.

Si bien el método es claro y práctico, tiene sus limitaciones y no deben ser pasadas por alto, se asocian tanto al rango de la analogía, como al conocimiento incompleto de los sistemas.

Un ejemplo de esto, es lo que pasa en la idea de descripción de la historia del Universo. La teoría del Big Bang dice que el Universo habría tenido un principio en una partícula de tamaño muy pequeño y muy caliente. Esta idea nos encaja muy bien, alentada por lo que nosotros conocemos como nacimiento”, ya que nos gusta lo de “empezó”, y lo de “chiquito”.

Con el tiempo esto indujo, merced a que la única fuerza predominante en el Universo es la gravitatoria, a muchos científicos a pensar que el Universo tendría un final cuando la fuerza de gravedad detuviera la expansión y comenzara a contraerse, para volver a terminar en algo parecido a un agujero negro, que es una concentración de masa tal, que su densidad es orden de millones de veces la de la Tierra, y su gravedad por lo tanto, no deja salir ni siquiera la luz.

A este proceso de vuelta se lo llamó Big Crunch, idea fácil de concebir por nuestra familiaridad con la “muerte”

Esto fue interpretado por muchas personas como que todo en la Naturaleza “respira”, entonces tiene una fase de expansión, y otra de contracción, y adaptaron perfectamente las teorías del Big Bang y Big Crunch a su filosofía de vida, tomándolas como ciertas y verdaderas, ya que se parece a lo que vemos todos los días en nuestro entorno.

Si bien pareciera hasta el momento que hubo un Big Bang, las estrellas se siguen alejando entre sí y no se tiene aún en claro si es que será así por siempre, si el Universo tiene límites, o tal vez es infinito, y no se tiene idea si habrá un Big Crunch.

Por lo que tendemos a asociar eventos sobre los que conocemos muy poco, a eventos comunes en nuestra vida, ya que como estamos acostumbrados a estos últimos, los primeros nos resultan más familiares al asociarlos, pero debemos ser muy cuidadosos con estas analogías, ya que pueden conducirnos a errores.

Fases o camino del conocimiento

Vamos a describir rápidamente las fases que están presentes en el camino del conocimiento, ya que cualquier cosa que se desee aprender transitará por este camino.

Fase 1La atracción: Es la fase donde empieza cualquier camino de aprendizaje, esta fase llamada de atracción podría llamarse resonancia, curiosidad, afinidad, etc. En esta fase el individuo, se siente atraído por un tema particular, ya sea por curiosidad, porque lo necesita como paso previo, porque se sintoniza, y armoniza con él, etc. La cuestión, es que estos mecanismos provocan un deseo que es el que en definitiva lleva al individuo a la búsqueda de este conocimiento.

Fase 2El estudio: Es la fase donde el individuo invierte su tiempo y esfuerzo, iniciando la búsqueda de un saber particular, poniéndose a disposición de un maestro para que lo instruya, haciendo experiencias o ensayos propios o usando su tiempo en alguno de los sistemas ya estructurados que posee la sociedad, cursos, colegios, Universidades, etc.

Si el tema buscado es nuevo, habrá que descubrir e investigar. Las formas de llevar a cabo esta fase son muchas más que las descriptas aquí.

Lo importante es que aquí el individuo paga un precio, (esfuerzo) por la posibilidad de aprender, ya que en la vida nada es gratis.

Fase 3La aplicación: Es el momento en que está en condiciones de aplicar lo aprendido durante el período de la fase dos. Generalmente, en este período no hay que pagar precio, sino que al revés, se recibe el pago por los servicios de la aplicación del aprendizaje.

Fase 4Análisis de resultado: Esta es la última fase, el individuo habiendo cumplido las tres fases anteriores, hace un análisis de la aplicación de su conocimiento, verificando si este le fue de provecho a él y al entorno.

Fase 5El contraste: Una vez que hemos adquirido el conocimiento completo de un método, que lo dominamos y sabemos que funciona, no debemos encasillarnos en este conocimiento adquirido, sino que aunque nos resulte bueno y efectivo debemos contrastar.

Contrastar es intercambiar opiniones e ideas con otras personas, en particular con nuestros enemigos, o las que no piensan como nosotros,y estudiar otras formas de sabiduría sobre el mismo tema, para perfeccionarnos y llegar a un conocimiento más perfecto, y más eficiente sobre la cuestión estudiada, ya que como vimos en el ejemplo de los observadores que miran un prisma, nadie ve lo mismo sobre una cosa única, esto conduce a la integración de conocimientos.

Las fases del conocimiento básico terminan aquí, pero es muy loable dar un paso más y enseñar a los demás lo aprendido, con esto contrastamos lo aprendido y nos perfeccionamos como personas, transmitiendo nuestra experiencia a los demás. De esta manera también cerramos el círculo del aprendizaje, si esto no se hiciera, sería casi imposible aprender.

Si tomáramos como ejemplo un médico cirujano, con las dos primeras fases cumplidas, es decir, con real vocación, interés por el dolor humano, con un aprendizaje idóneo y a conciencia, entonces está en condiciones de aplicar su conocimiento. Tendrá un caso, un paciente al que tendrá que intervenir quirúrgicamente seguirá los pasos estudiados en libros y prácticas, y concluirá la operación.

Solo habrá completado el ciclo del aprendizaje cuando al otro día visite a su paciente y compruebe que está vivo, y que está aliviado de su dolencia, en fin, que se está recuperando.

Este conocimiento adquirido, ya sirve, ya da frutos, sin embargo, puede ser pulido, perfeccionado por contraste con otros médicos, y por la búsqueda de nuevos caminos para hacer la misma operación, el fuego se puede iniciar frotando dos palitos secos, sacándole chispas a dos piedras, con fósforos, o con un encendedor de gas. Evidentemente el resultado es el mismo, pero también es evidente que no se utilizan los mismos tiempos para lograrlo, ni se emplea la misma energía. Luego, si estos médicos conforman, como generalmente lo hacen, un equipo de aprendizaje con sus alumnos, se habrá cerrado el círculo.

La mayoría de nosotros nos enfrascamos en una postura, y la defendemos como si la postura adoptada fuera definitiva, como en un equipo de fútbol, del cual nosotros somos sus hinchas fanáticos, En realidad esto no debe ser así, hay que estar abiertos a todas las opiniones y posturas, por que como dije, provienen de otras personas, con otros puntos de vista, que pueden ser peores, o menos evolucionados que los nuestros, pero también pueden ser mejores.

Es así como se completa el ciclo del conocimiento humano. De nada nos sirve manifestar a los demás interés en determinados temas, si después no los estudiamos.

De nada nos sirve estudiar un tema por el que tengamos real interés si luego no lo aplicamos.

Y finalmente, de nada sirve haber aplicado las enseñanzas, si no hacemos un balance de ellas luego de la aplicación.

Luego, si no contrastamos nuestra sabiduría con otros, esta no evoluciona, ni se completa.

Y si finalmente la enseñamos, cerramos el circuito.

La mayoría de los seres humanos nos escudamos en una u otra fase, decimos que nos interesa, pero en realidad, no nos interesa.

Nos interesa un tema, pero no tenemos la disposición, el tiempo o la energía para aprenderlo.

Aprendemos algo, pero somos cobardes al aplicarlo, le tenemos miedo al mundo, o tenemos desidia, o no tenemos la suficiente fuerza de voluntad.

Aplicamos constantemente algo, pero no lo evaluamos, por lo que no sabemos si formamos parte de un sistema que contribuye o no a la evolución.

Sin este último paso el individuo podrá equivocarse durante años trabajando para una mala causa, y generando perjuicios a una sociedad, y provocando daño a su alma.

Y por último, somos tan reticentes al contraste de nuestras ideas, que tardamos siglos en evolucionar cuando lo podríamos hacerlo en conjunto mucho más rápido.

La enseñanza es el portal que nos abre el camino hacia otro plano o nivel, dejando nuestra sabiduría a nuestros discípulos, mientras que nosotros seguimos avanzando hacia un nuevo aprendizaje, un nuevo nivel de conciencia.

El que es reticente a enseñar lo aprendido, es aquel que no entendió como se“evoluciona”.

Para nosotros como veremos luego, la causación, o principio de causa y efecto es la parte que menos dominamos de este camino de aprendizaje, y la que nos puede conducir a errores durante años, ya que a veces los resultados de nuestro accionar se nos muestran mucho tiempo después de la ejecución de nuestros actos.

He puesto como ejemplo a un médico, pero en realidad todos nuestros actos y decisiones de todos los días conllevan un camino de aprendizaje, desde la decisión más pequeña, hasta las que competen al espíritu de las personas.

Esta vida es solo una escuela, donde están todos los elementos para aprender, probar lo aprendido, evaluarlo, y contrastarlo.

Conclusión Por qué aprender

Hemos visto resumiendo eneste capítulo un esbozo de cómo percibimos la realidad, cómo funciona la lógica, sus virtudes y defectos, cuál es la lógica en sistemas auto–referenciales, hemos dado una mirada al pensamiento de Godel y Hermes, hemos visto los sistemas referenciales, las verdades particulares, y las estadísticas, el sentir, las analogías, y el camino del conocimiento.

Pero.... todavía cabe la pregunta más importante.

¿Por qué aprender? (Cuando hablamos de aprendizaje, lo hacemos siempre desde el punto de vista del capítulo anterior Fases o camino del conocimiento)

¿Qué beneficio nos trae?

Esta pregunta tiene muchas respuestas, en muchos niveles, pero trataré de exponer la que considero más Universal.

Mencionar que la tecnología que poseemos hoy es mejor que la de nuestros ancestros es una obviedad, para graficarlo diré que si alguien nos pidiera hoy que llenáramos el tanque de agua de nuestras casas con baldes traídos desde el río más próximo, como lo hacían antes, pensaríamos que nos está sometiendo a una penitencia.

Si lo hiciéramos, seguramente terminaríamos doloridosal final del día, nos quedaría tiempo solo para ducharnos, terminar el agua que trajimos y hacer lo mismo al día siguiente, de esta manera no nos quedaría tiempo para ninguna otra actividad posible.

En otras épocas se utilizaban esclavos para estas y otras tareas.

En gran medida la tecnología ha puesto fin a la “necesidad” de la esclavitud, (por lo menos la física).

Sin embargo, este conocimiento no ha puesto fin a la “esclavitud” propiamente dicha, desde el punto de vista filosófico

Si elimináramos la tecnología y volviéramos 200 años para atrás volveríamos a los sistemas de poder, a la esclavitud y las guerras de antaño, porque no se ha aprendido todavía a respetar el derecho ajeno, compartir los recursos, etc.

La prueba de lo que digo es que en donde no hay tecnología que sea más económica que la mano de obra “humana barata”, se utilizan “pseudo–esclavos” para producir, este es por ejemplo el caso de la extracción de diamantes en África.

Toda la tecnología disponible se ha desarrollado en base a estudios, pruebas y mucho esfuerzo, es valiosa, ya que aplicada correctamente, en forma juiciosa, y con moderación, abre puertas y posibilidades,pero en general en nuestras sociedades se prioriza el estudio de ciencias con contenido de enseñanza orientada hacia el dominio de los materiales en el mundo y su forma de combinarlos, tales como las ingenierías, el manejo sano del cuerpo, como la medicina, las restricciones sociales, o sea el estudio de las leyes humanas, como la abogacía, y el estudio de la combinación de sonidos, colores y formas para los artistas, pero muy poco estudiamos sobre comportamiento humano, la estructura del ser humano, la convivencia, etc.

Para estar en paz y armonía con nosotros mismos y con los demás debemos conocer muchas cosas más y no solo el manejo de lo material, lo corpóreo, o técnicas de arte.

El conocer, implica el desarrollo por parte de las personas de habilidades de análisis para pensar y sentir, a la vez que perfeccionamos y afinamos nuestros sentidos, para percibir más finamente la realidad que nos rodea, es así que comprendemos mejor a las personas si “sabemos” qué les pasa, disminuimos el dolor ajeno si somos sensibles y compartimos algo de pan y luego la caña de pescar, si enseñamos lo que sabemos.

Si aprendemos y ejecutamos cualquier arte seremos más perceptivos en esta área.

Si nos completamos buscando el aprendizaje, al igual que en el arte en otras áreas del conocimiento, iremos ampliando nuestro horizonte y seremos más universales, más comprensivos, actuaremos mejor, e iremos uniendo de a poco las piezas del rompecabezas, que con los años nos dará sabiduría.

No puede ser conocimiento parcial o dado por un solo foco de información, ya que ello nos parcializa, debe contemplar el pasado, presente y futuro, debe ser multifocal en el tiempo, debe estar adquirido con todos los sentidos que tenemos y analizado de todas las formas, tiene que ser dinámico, sin prejuicios, susceptible de perfeccionar, hay que aprender a escuchar.

Hay que separarse de los demás y a la vez integrarse.

Hay que votar en cada elección, pero no hay que hacerlo siempre igual porque simpatice con un partido político, ya que si así lo hacemos somos mono–focales, somos simples hinchas de un equipo de fútbol.

Pero sin duda la razón más importante de todas es que el aprendizaje bien concebido lleva naturalmente a las personas a descubrir los principios, que luego veremos, y a aplicarlos obteniendo sus resultados.

Los principios son el espíritu generador de toda ley o norma de conducta, ya sea material o humana, son la sabiduría intrínseca, que en definitiva, determina el comportamiento de un ser consciente, ya que habiendo “aprendido” el principio de las cosas, la persona no deseará obrar de otra manera que no sea la que está de acuerdo al principio.

Esta manera de obrar, de acuerdo a los principios, convertiría a la Tierra en un paraíso, o por lo menos en un lugar mucho mejor que el que tenemos, y este es el motivo de aprender.

No seamos ilusos, aún acercándonos al conocimiento de los principios, nuestra sociedad va a seguir teniendo problemas, pero serían infinitamente menores a los que hoy se plantean.

Los principios están por encima de las leyes, y si bien no podemos hoy conocer las verdades últimas de la creación, debemos hacer un esfuerzo para conocer los principios rectores más elevados que podamos.

Conociendo “solo” las leyes o las normas no obtendremos grandes beneficios, ya que en el caso de una sociedad estas leyes y normas en general se aplican a letra fría, castigando o multando a quien las transgrede, y haciendo que el transgresor aprenda que es mejor para él no transgredirlas, porque se le impondrá una pena, y no porque es lo mejor para él y su entorno, pero este es un sistema de control para animales, y así quedará la sociedad si no se pasa al aprendizaje de principios.

Es la sensación que tengo al ir al zoológico y ver a las panteras tras las rejas, ¿serán rejas o serán leyes?

Porque si el transgresor supiera que no hay autoridad que lo controle, violará sistemáticamente la ley, ya que no existirá castigo, y eso, es lo que él sabe.

Nuestra educación nos enseña leyes y normas, y no se puedeconociendo una norma, actuar como si se conociera el principio del que ha procedido.

El sistema debería funcionar así


En base a los principios se generan los criterios que van a formar las leyes, que aplicadas a lo particular se simplifican o se reducen a normas.

Principios son aquellas ideas que tienen una aplicación universal, son bases de nuestro sistema de vida, están en todos los sistemas, las leyes son partes de los principios aplicados a una franja o sistema particular, deberían conservar el espíritu del principio.

La normas son reglas, como las de tránsito, que tienden a ordenar sistemas, que de otra manera serían caóticos, en este caso, debería cumplirse que aplicando estas normas el tránsito sea más seguro y ágil, a pesar de que el verde no es un color más bueno que el rojo en los semáforos, ni la derecha mejor que la izquierda.

Tampoco se puede garantizar con la emisión de una ley o una regla jurídica, que esta cumpla con el espíritu o principio con el que teóricamente fue inspirada, a menos que los administradores de las leyes o jueces sean sabios, cosa que hoy no se garantiza, ya que ninguna Universidad crea sabios, sino técnicos.

Entre el árbol y el bosque

Подняться наверх