Читать книгу Un Perro en Defensa de la Frontera - Max Marshall - Страница 8

Después de completar su entrenamiento riguroso, el Teniente Grayson y Scotty, su fiel compañero canino, recibió un importante encargo. Ahora se encarga de servir en la frontera entre Texas y México. Su misión era mantener la paz y el orden en la región, para garantizar la seguridad de las personas que viven en ambos lados.

Cuando el sol se elevó sobre el vasto paisaje del desierto, el Teniente Grayson y Scotty llegado a su nuevo campamento base. El aire estaba lleno de emoción y de sentido del deber. Fueron recibidos por sus compañeros, que estaban tan ansiosos de trabajar juntos para proteger la frontera.

El teniente Grayson y Scotty rápidamente se instaló en sus funciones. Patrullaban la frontera de día y de noche, manteniendo un ojo atento a cualquier signo de problemas. Su trabajo no era sólo para prevenir actividades ilegales, sino también a brindar ayuda a quienes la necesitan.

Una tarde de sol, mientras en la patrulla, el Teniente Grayson y Scotty llegó a través de un grupo de excursionistas perdidos. Habían viajado lejos de la designada rutas de senderismo y estaban desorientados. El teniente Grayson, con Scotty, por su lado, se acercó a los excursionistas con una sonrisa amable.

– ¡Hola! Están todos bien? Parece que has perdido tu camino, el Teniente Grayson dijo, extendiendo una mano.

Los excursionistas se veía aliviada al verlos.

– Sí, tenemos separados de nuestro grupo, y no podía encontrar el camino de regreso. Estamos muy agradecidos de que nos haya encontrado, uno de ellos respondió.

El teniente de Grayson, aseguró ellos,

– No te preocupes, vamos a llegar a salvo de nuevo a donde usted necesita estar. Scotty aquí es un experto en encontrar la pérdida de rutas.

Con Scotty liderando el camino, el grupo se embarcó en una cuidadosa viaje de regreso a las rutas de senderismo. Scotty hábilmente localizar los olores familiares, guiándolos a través de lo accidentado del terreno. El teniente Grayson caminado junto a los excursionistas, garantizando su seguridad y proporcionarles agua y bocadillos.

Después de un par de horas, llegaron a las rutas de senderismo. Los excursionistas fueron de alegría al reencontrarse con su grupo, agradeciendo el Teniente Grayson y Scotty por su ayuda.

– Nos has salvado! No podemos agradecerle lo suficiente, uno de los excursionistas exclamó con gratitud.

– Todo es parte de nuestro deber, el Teniente Grayson respondió humildemente.

– Recuerde, es importante seguir los senderos designados y tomar las precauciones necesarias para mantenerse a salvo.

Con sonrisas en sus rostros, los excursionistas despedida del Teniente Grayson y Scotty y continuó su aventura bajo la atenta mirada de los guardaparques.

A lo largo de su tiempo en la frontera del deber, el Teniente Grayson y Scotty encontrado muchas situaciones como esta. A veces, iban a ayudar a los viajeros perdidos, mientras que otras veces, iban a detener a aquellos que tratan de cruzar la frontera ilegalmente. Su presencia trajo un sentido de seguridad a la región, tranquilizar tanto a las comunidades locales y los soldados que trabajan junto a ellos.

Como los días se convirtieron en semanas y las semanas en meses, el Teniente Grayson y Scotty formado un lazo irrompible con sus compañeros. Se convirtió en un muy unida equipo, siempre listos para enfrentar cualquier reto que se presentara en su camino.