Читать книгу Salto Temporal Apocalíptico: Chica persiguiendo a su Hermano - Max Marshall - Страница 9

Karina y Patrick, Patrick instintos de una patada en. Con una determinación feroz, él saltó hacia adelante, posicionándose entre su hermana y el malévolo de la entidad.

– Vas a tener que conseguir a través de mí primero! – él dijo, su voz llena de coraje.

Karina observaron con asombro como su hermano se puso de pie para el espíritu del mal, su valentía, que brilla como un faro de esperanza en la oscuridad. Con un nuevo sentido de la determinación, ella se puso de pie a su lado, listo para enfrentar los retos que se avecinan.

El espíritu malo se sacudió con sorpresa a Patricio desafío audaz, su trenzado características contorsionado con rabia. Pero antes de que pudiera reaccionar, Patrick se pusieron en acción, lanzándose hacia el espíritu de la máquina del tiempo, que latía de forma alarmante en la esquina de la habitación.

Con un rápido movimiento, Patrick se apoderó de la máquina del tiempo, sus manos temblando con la adrenalina como él forcejeó con su intrincado de los controles. Él sabía que la destrucción de la máquina era su mejor oportunidad de detener el mal espíritu del reinado de terror antes de que pudiera empezar realmente.

Karina miraba a la espera de Patrick furiosamente jugado con el dispositivo, su frente arrugada en la concentración. Con cada giro y vuelta de los mandos, la máquina se detenía y whirred, su siniestro zumbido llenando la habitación.

Pero así como Patrick estaba en el borde de la desactivación de la máquina, un aumento repentino de la energía oscura estalló desde el espíritu, el envío de él tambaleándose hacia atrás con un grito de dolor.

– Patrick! – Karina exclamó, corriendo a su hermano lado. Ella podía sentir los zarcillos de miedo arrastrándose hasta su columna vertebral, que amenaza con abrumar a ella. Pero ella se negó a ceder a la desesperación, sabiendo que su hermano necesitaba ahora más que nunca.

Con un determinado brillo en sus ojos, Karina ayudó a Patrick a sus pies, su corazón golpeando con renovada determinación. Juntos, se enfrentaban con el espíritu del mal en la cabeza -, listo para enfrentarse a los retos que se avecinan.