Читать книгу El Pollo Aprende a Volar - Max Marshall - Страница 6

En el corazón de los Agricultores del proyecto animado de la granja, ubicada dentro de un acogedor gallinero, un acontecimiento trascendental estaba a punto de desarrollarse. Fue una brillante y soleada mañana, cuando una de las gallinas, Henrietta, comenzó a mostrar signos de emoción y expectativa.

Como Agricultor Bill hizo sus rondas, la comprobación de su amado a los animales, se dio cuenta de Henrietta ubicado en una esquina de el gallinero, sus plumas esponjadas con orgullo. Y luego, con un suave cacarear y un suave roce de las plumas, el milagro de la vida se desarrolló ante sus ojos.

De debajo de Henrietta cálido abrazo surgido una pequeña y esponjosa manojo de plumas – un recién nacido de pollo, parpadeando curiosamente en el mundo con brillantes, curiosos ojos. Agricultor proyecto de Ley del corazón se hinchó de alegría cuando él se dio la bienvenida a la más reciente adición a su granja de la familia.

«Bienvenido, pequeño,» susurró, acunando a la preciosa chica en sus manos gastadas. «Usted será conocido como Jonathan, un nombre que corresponde a un pollo de tal espíritu y determinación».

Y de hecho, el joven Jonathan resultó ser una chica diferente a cualquier otro. Desde el momento en que eclosionaron, que muestra una notable inteligencia y una insaciable curiosidad sobre el mundo que le rodea. Mientras sus compañeros de neonatos se contentaron con el picoteo en alimentación y dormitando en el calor de el gallinero, Jonathan estaba ya con impaciencia la exploración de su entorno, con ganas de aprender y descubrir.

Como los días se convirtieron en semanas, Jonathan infinito de la energía y el entusiasmo aplaudido por todos los que le conocieron. Agricultor proyecto de Ley a menudo se encuentra a sí mismo riendo a la vista de la precoz de pollo, como él siguió con entusiasmo en sus pasos, chirriando con entusiasmo a cada nuevo descubrimiento.

Pero en medio de las risas y la alegría que Jonathan trajo a la granja, también hay un sentido de la maravilla y de la anticipación. Para él estaba claro para todos los que le conocieron que este pequeño polluelo estaba destinado a la grandeza – destinado a elevarse a las alturas más allá de lo imaginable.