Читать книгу Ideas que vuelan - Omar Sanvicente - Страница 6
Padre
ОглавлениеSiempre te llevo presente, y ahora que he crecido recuerdo tu presencia intensa, tus regaños, tus consejos (que siempre quisiste hiciera míos), fuiste, injustamente lo sé, el mejor objetivo de mis juicios infantiles, los más crudos que he emitido.
Dicen que detrás de un gran hombre hay una gran mujer, y en ocasiones cuando te sentías empujado de más, y mirabas frente a frente a quien lo hacía, tu firme mirada se derretía en mi presencia y no me dabas el dolor de ver peleas, solo tu figura se inclinaba hacia mí, y me abrazabas.
Cuando ya corrías en la pista de la vida, me dabas las herramientas para alcanzarte, sabiendo que día con día tu carrera se haría más lenta, me enseñaste que, cueste lo que cueste, yo debía seguir con tal carrera.
Siempre me enseñaste a decir “por favor” y “gracias” a los demás, y no sé por qué a ti no te lo decía lo suficiente; y ahora, en cualquier lado que te encuentres, quiero que siempre escuches: Por favor discúlpame si alguna vez te lastimé, y gracias por todo lo que me enseñaste querido padre.