Читать книгу El sendero de la meditación - Osho - Страница 5

Prefacio

Оглавление

Cuando no haces nada —físicamente, mentalmente, en ningún nivel—, cuando toda actividad ha cesado y tú simplemente estás, sólo eres, entonces, estás meditando. No puedes hacerlo, no puedes practicarlo, sólo tienes que entenderlo.

Siempre que encuentres tiempo para simplemente ser, dejarás de hacer. Pensar es hacer; concentrarse es hacer; contemplar también es hacer. Hasta que no estés haciendo nada por un solo momento y te encuentres justo en tu centro, completamente relajado, entonces, estarás meditando. Y una vez que hayas enco trado la manera de hacerlo, puedes permanecer en este estado tanto tiempo como quieras; al final, puedes permanecer en este estado las veinticuatro horas del día.

Una vez que has tomado conciencia de cómo tu ser puede permanecer tranquilo, entonces, lentamente, puedes comenzar a hacer cosas, vigilando el que nada perturbe tu ser. Ésa es la segunda parte de la meditación. Primero hay que aprender a simplemente ser y, luego, aprenderás a hacer pequeñas cosas: limpiar el piso o bañarte, pero siempre centrado en ti mismo. Entonces, puedes hacer cosas más complicadas.

Por ejemplo, yo estoy hablando, pero mi meditación no se ha sido perturbada. Puedo continuar hablando, pero en mi centro no hay siquiera un murmullo; sólo existe el silencio, el completo silencio.

Por lo tanto, la meditación no es contraria a la acción. No es que se tenga que escapar de la vida. Simplemente nos enseña una nueva manera de vivir. Tú te conviertes en en el centro de un huracán.

Tu vida continúa; sólo que ahora lo hace de una manera más intensa: con mayor alegría, con mayor claridad, con mayor visión, con mayor creatividad; incluso, te mantienes distante. Ahora, sólo eres el observador de la colina, simplemente viendo todo lo que sucede a tu alrededor.

No eres quien actúa, eres el que observa.

Ése es todo el secreto de la meditación, el que tú te conviertas en el observador. El hacer continúa en su propio nivel, eso no representa un problema: cortar madera, traer agua del pozo. Puedes hacer todas las pequeñas y grandes cosas; sólo una no es permitida: no debes perder tu centro.

Esa conciencia, esa vigilancia, debe permanecer absolutamente clara y tranquila.

Meditar es un sencillo fenómeno.

OSHO

Tomado de Misery to Enlightment

El sendero de la meditación

Подняться наверх