Читать книгу Pañuelos y sonrisas - Amore Viaggiatore - Страница 11

Volver siempre es más duro que irse

Invierno

Llega al aeropuerto y nadie la recibe, carga las maletas sola y arriba a su nuevo hogar. Oculta su vientre tras ropa holgada, y la época invernal la ayuda.

La habitación es pequeña y tiene cosas de la dueña. El baño es un toilette, cuya entrada a la ducha solo le servirá por un tiempo. Y entrando marcha atrás. Aprenderá a moverse con más lentitud.

Alma logra hablar con Lex, no es sencillo, humillación, dolor, angustia, confusión, malos entendidos, o eso cree Alma. Con el tiempo entenderá lo que pasó. Y dejará de culparse o hacerse cargo de cosas que no fueron como el otro intentó que crea. De todos modos le pide disculpas si lo trató algo distante, o si no le prestó toda la atención que él esperaba. Tal vez estaba distraída pensando en el bebé y en su nuevo rol de madre.

Recupera sus pertenencias de a poco. Luego de implorarle a Lex que se las devuelva. Se asocia a la biblioteca municipal, para retomar sus lecturas. Intercala alguna novela con libros de maternidad. Tiene entrevistas laborales. Sale a caminar por la costa. Busca un nuevo obstetra.

Comienza a ver a Lex para almorzar, cenar o pasear por las tardes. Sabe que se necesita tiempo para asuntos delicados.