Читать книгу Guerrero espiritual - Antonio Bezjak - Страница 8

Prólogo

Desde los tiempos en que se usaron las catapultas, hachas, flechas, espadas y lanzas en los más sangrientos combates cuerpo a cuerpo, la humanidad ha venido perfeccionando las estrategias de combate, las armas y ha aumentado su poder bélico hasta los límites más insospechados.

Las cifras históricas de las muertes son conocidas, pero no se resaltan en los libros especializados. Las razones de por qué debieron morir tantos seres humanos se diluyen entre los datos estadísticos. Antes bien, se recuerdan a un número determinado de héroes, políticos y estrategas militares que más tarde se usarán como referentes para aleonar a los futuros combatientes. También se resaltan los logros finales de las guerras, como las conquistas territoriales o políticas, pero el valor de la vida no se menciona.

Lo más terrible de nuestra época es que la amenaza de guerra está siempre latente, desde los países mas pequeños hasta las llamadas grandes potencias. Los tratados de estrategia dicen: «si quieres mantener la paz debes estar preparado para la guerra», y parece ser un dicho muy sabio, pero debemos recordar que solo los sabios en el poder pueden mantener la paz, ellos saben bien que deben estar preparados para la supervivencia, en todos los aspectos de la vida. Pero no debemos olvidar que muchas de las causas que gatillaron batallas que pronto se transformaron en guerras fueron maquinadas por personas que de sabios no tenían nada.

Partamos analizando las causas, y nos daremos cuenta de que no era un sabio el que tenía el poder de tomar las decisiones.

¿La mejor arma contra el odio es el amor?

¿Y qué sucede cuando el odio se ha desatado? Este no permitirá jamás que entre el amor, así lo demuestran una y otra vez los resultados de las guerras, o ¿acaso los vencedores entregaron amor a los vencidos? ¿Acaso respetaron, a los ancianos, mujeres y niños que fueron involucrados en un conflicto injusto?, ¿fueron respetados?

Cuando reina el odio en ambos bandos ya no es posible que entre el Amor.

Todo lo que han hecho los grandes filósofos y sabios por la humanidad son actos de amor, el mismo Cristo jamás acepto la guerra y sin embargo hubo guerras santas, ¿acaso todos los actos de Él no fueron de Amor? ¿y el más grande acto de Buda acaso no fue de Amor?