Читать книгу Historia del Breviario Romano - Casimiro Sanchez Aliseda - Страница 5
ОглавлениеCapítulo II
Período de difusión (siglos viii-xii) Desde Gregorio Magno a Gregorio VII
Difusión de la liturgia romana en Inglaterra, Alemania e Imperio franco
La primera expansión del Oficio romano, aparte de una expansión por el sur de Italia, en Benevento, fue en Inglaterra. En 596, san Gregorio Magno envió allí al abad benedictino san Agustín con cuarenta monjes para evangelizar aquella isla, proveyéndoles de todo lo necesario para el culto divino y, naturalmente, de numerosos manuscritos, entre ellos el antifonario por él ordenado.
Los nuevos misioneros organizaron toda la liturgia conforme al uso romano. Entre los compañeros de san Agustín había muy buenos maestros en la «cantilena» romana y fueron enseñando a los convertidos las melodías de la Misa y del Oficio. No fue tampoco raro en épocas inmediatamente posteriores que monjes ingleses fueran a Roma a instruirse mejor en las prácticas litúrgicas de la Ciudad Eterna. Tal el maestro de san Beda, Benedicto Bishop, descendiente de familia noble, que marchó cinco veces a Roma, discendi simul et adorandi gratia, y trajo libros para enseñar a sus monjes ordinem cantandi, psallendi atque in ecclesia ministrandi juxta morem romanae institutionis.25
25 Ven Beda: Histor. eccles., IV, c. 2.
Tan próspero desarrollo litúrgico fue sancionado en 747 por el Concilio de Cloveshoe (Glasgow), que ordenó que las fiestas se celebrasen juxta martyrologium ejusdem Romanae Ecdesiae, y que en el oficio divino se guardasen septem canonicae orationum diei ac noctis horae diligenti cura cum psalmodia et cantilena sibimet convenienti secundum quod Romanae Ecclesiae consuetudo permittit.