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La última frontera de la libertad: Sentido Común
Prólogo de Yolanda Cañizares
ОглавлениеCorren tiempos de incertidumbre, en los que se hace difícil encontrar parámetros de seguridad que nos permitan confiar en las decisiones que otros toman por nosotros, afectándonos a todos, dado que estas configuran el entorno en cual transcurre nuestra vida.
La historia está plagada de momentos que, revisados en perspectiva, nos han hecho sentirnos poco orgullosos con las consecuencias de sus resultados, incluso avergonzados por el elevado coste que tuvieron para la humanidad. ¿Cómo sucedió? ¿Era la única salida? ¿Podríamos haber hecho algo distinto?
Si nos paramos a pensar, ¿quién no está imaginando hoy cómo se contará la historia del momento actual que vivimos? ¿Y quién se siente libre de responsabilidad sobre cómo lo estamos abordando? Gestión tecnológica del ser humano o gestión humana de la tecnología, ¿compartes el respeto que me genera la enorme diferencia entre ambas expresiones?
¡No podemos mirar a otro lado ante esta realidad! Es tiempo de despertar, de afrontar sin enfrentar, de tomar parte en el devenir de los hechos, de aportar nuestro granito de arena para que la historia pueda hablar de cómo respondimos ante una confluencia de situaciones que ponen en jaque la convivencia, la libertad, la seguridad y el diseño de un mundo hecho para las personas. Tenemos en nuestras manos la responsabilidad de construir los resultados de este momento histórico y es hora de mojarse. Dado el alcance que tiene nuestra participación, hacerlo con sentido común es más que recomendable.
La obra que presentamos, Sociedad en jaque… sentido común al rescate, es una publicación que nace con la intención de ser una herramienta, una luz que nos pueda orientar en uno de los ámbitos donde nuestra decisión tiene calado, que es la de elegir a nuestros representantes políticos. Desde el fondo, y llegando a la forma, este decálogo nos propone reflexionar sobre nuestra participación en el sistema y nos ofrece claves interesantes para saber si nuestra aportación es la que queremos.
Pero más allá de proponer criterios en la elección de nuestros gobernantes, los autores del libro –y del minilibro en formato digital ¿Por qué gobiernan los que gobiernan?- nos ofrecen un manual en forma de decálogo para movilizar nuestra capacidad de respuesta ante los hechos que acontecen:
- Bajarnos de la velocidad, para no consumir sin más, y profundizar en las propuestas e informaciones que nos llegan, evaluándolas con criterio propio antes de asumirlas como si fuésemos manada guiada.
- Generar conversaciones de calidad en el entorno, en lugar de alimentar la rueda de comunicación intencionada con el objetivo de generar miedo, crispación, polaridad y confusión.
- Mantener posiciones de coherencia e integridad, más allá de ir con las máscaras que creemos que nos hacen quedar bien con el entorno.
- Plantearnos qué somos, yendo más allá de meros elementos pasivos y acomodados de una sociedad que otros lucharon por nosotros y estamos a punto de perder.
- Mirarnos los unos a los otros como compañeros de viaje, desde nuestras necesidades comunes y no desde nuestras diferencias aprendidas, y así compartir vida en un dar y recibir, que es el único factor que garantiza la sostenibilidad de un sistema.
- Cuidarnos, por dentro, por fuera, entre nosotros, siendo capaces de movilizar ilusión, alegría, energía vital, curiosidad, amor, humor… todo aquello que facilite un sentido de la vida de suma, de comunidad, de esperanza, descolgándonos de propuestas de dependencia paternalista, donde cada miembro de la sociedad solo puede ejercer el papel que se le permite.
Maravilloso regalo para sanar un año de desconcierto, de impotencia, de dolor, de miedo y tristeza, porque nos devuelve la esperanza y pone en nuestras manos el poder responder a la pregunta: ¿Quién quiero ser en la situación en que vivimos? ¿Cuál quiero que sea mi aportación de valor?
No lo leas rápido, ni desde tu cabeza, conecta con las reflexiones desde tu corazón y permite que te hable tu sentido común.
El futuro también depende de ti.