Читать книгу La revolución de Netflix en el cine y la televisión - Isaac León Frías - Страница 6
ОглавлениеIntroducción
DEL BOLETO DE ENTRADA AL CLICK
¿Quién hubiese imaginado hace treinta, cuarenta o cincuenta años que dándole un click (o clic) a una página web o a un link, accederíamos fácilmente a la visión de un largometraje o de una serie en la pantalla de una laptop? Incluso esos términos procedentes de la lengua inglesa (click, web, link, laptop) no se conocían en otros dominios lingüísticos y ni siquiera en aquellos que hablaban en inglés, salvo los tres primeros en su primer significado etimológico y no aplicado al universo digital. Laptop se empieza a usar una vez que se crean las computadoras portátiles, y no antes.
De lo que trata este libro es de los caminos que han conducido a la aparición de las nuevas plataformas de emisión de contenidos audiovisuales, con Netflix como la empresa que da inicio de manera ostensible a la era del streaming, y los otros canales que siguen sus pasos y se suman a la creciente oferta dispensada.
Lo que ahora se ha convertido en la rutina cotidiana para cualquier interesado en ver películas o series es el punto de llegada (temporal y variable) de un proceso que se inició en 1895, cuando un grupo de asistentes pagó un franco de la época por el boleto de entrada para asistir a un novedoso espectáculo con imágenes en movimiento proyectadas en un lienzo blanco en un salón parisino.
Desde esa fecha han circulado torrencialmente las imágenes a través de pantallas de diferente tamaño y más adelante de distinto soporte tecnológico hasta llegar a la actualidad en que, revolución digital de por medio, la variedad define el estado de cosas que se experimenta. La evolución de las pantallas audiovisuales es el primer tema que desarrollamos en este libro.
No todo se limita a la cuestión de pantallas, y aquí viene el segundo tema. El contenido audiovisual registrado en esas pantallas ha puesto igualmente lo suyo en un proceso que, en sus 125 años de existencia, ha dado lugar a una rica historia en la que, para los efectos que interesan a nuestro trabajo, se han creado muchísimas películas de largometraje y series para el cine y la televisión. No es lo único desde luego porque la televisión, y especialmente gracias a la trasmisión en directo, opera en otros terrenos como los programas de estudio, las trasmisiones informativas o deportivas, entre otros. Pero lo que aquí nos interesa es la programación de largometrajes y series de ficción, sin excluir otras modalidades y formatos de carácter narrativo como pueden ser los cortos o largos documentales, por ejemplo.
Y nos interesa ese renglón de la producción porque es el que Netflix y los canales de streaming han heredado de manera ostensible. Donde se juegan las posibilidades de esos canales es en la dura competencia con el cine por la exhibición de largometrajes, y con la televisión en el terreno de las series. Así están ahora las cosas en un nuevo capítulo de la historia de los medios audiovisuales, que recién está en sus inicios.
Lo que vamos a ver aquí, después de hacer un breve recorrido por la evolución de las pantallas y de la producción de películas y series, es la aparición de Netflix y los canales de trasmisión directa en el marco de un proceso de expansión digital que, aparte de lo que significa como base y fundamento del streaming, ya había transformado antes tanto el soporte fotoquímico de la fabricación y exhibición de películas, como el soporte electromagnético del registro y emisión de programas televisivos. Es decir, la expansión digital ha modificado, de modo casi invisible para el usuario, una parte importante de la infraestructura tecnológica del cine y de la televisión. Y Netflix y sus congéneres vienen a poner en riesgo la misma sobrevivencia de esos dos medios que hasta hace poco constituían los dos frentes aparentemente inamovibles de la comunicación audiovisual.
De eso trata este libro, que no pretende otra cosa que dar cuenta de la manera más clara posible de uno de los temas que están en la agenda de los más llamativos entre los de actualidad. Conviene precisar que la atención está puesta de manera preferencial en la producción audiovisual de Estados Unidos, porque es allí donde operan las empresas de cine y televisión que dominan la distribución internacional, y es allí donde se gesta la mayor parte de las innovaciones digitales y donde aparecen los primeros canales del streaming.
Culmina el libro con un amplio anexo dedicado a la película Roma, de Alfonso Cuarón, que es el primer proyecto de coproducción que Netflix ha entablado en México y, por extensión, en América Latina. Un proyecto que se selló con reconocimientos de la Mostra Internazionale d’Arte Cinematografica de Venecia y de la Academy of Motion Pictures Arts and Sciences de Hollywood, entre otros, y que aparece como el punto de partida de un proceso que aún no ha tenido continuidad, pero seguramente la tendrá.
Como se verá, y aunque las líneas principales de investigación que he venido publicando en libros están en la historia del cine latinoamericano y en el cine que se ha visto en el Perú a través de los años, no me son ajenos en absoluto los temas que corresponden a la actualidad audiovisual y las perspectivas que se abren. En este caso puntual, la elaboración de una tesis en la Maestría de Periodismo y Comunicación Multimedia de la Universidad San Martín de Porres me ha estimulado a convertir en libro una parte de la investigación realizada que, aunque sigue otros derroteros concediéndole amplio espacio al caso de la película Roma, incorpora también procesos históricos que conducen a la situación que se experimenta en estos tiempos.
Quiero agradecer la atenta lectura que Giancarlo Cappello le dispensó al libro y a sus comentarios, así como a Ricardo Bedoya que, como siempre, ha sido una fuente constante de información y sugerencias de lecturas.