Читать книгу Análisis de estados financieros - Jorge Orlando Pérez - Страница 10
ОглавлениеI.1. Introducción
El principal objetivo del análisis de estados financieros consiste en establecer el diagnóstico y las perspectivas sobre la situación financiera —a corto y largo plazo— y económica de un ente, basado en información brindada por dichos estados.
Por lo tanto, buscaremos conocer cuál es la capacidad de pago de la empresa —situación financiera de corto y largo plazo— y la aptitud de obtener resultados y rentabilidad sobre su inversión —situación económica—.
Si se realiza una analogía con la medicina, en general, el profesional de esta disciplina para poder tratar al paciente, utiliza ciertas herramientas (radiografías, electrocardiogramas, ecografías, etc.) las cuales le permiten efectuar un diagnóstico —el estado actual y las causas del mismo—, y en la medida de lo posible un pronóstico — inferir su evolución futura— para actuar en consecuencia. En nuestro caso “el paciente” es una organización que, por interés de determinados usuarios, necesita conocer acerca de su estado y cuáles son sus posibilidades futuras, en alguno o todos los aspectos mencionados, financiero o económico.
La técnica de análisis de estados financieros empezó a ser desarrollada en los Estados Unidos de Norteamérica en la década de 1890 a 1900, cuando los banqueros de ese país comenzaron a utilizar tales estados para analizar la concesión de créditos.
De aquel comienzo a nuestros días, esta técnica ha evolucionado. Pasó de trabajar para un diagnóstico desde fuera de la empresa, con la única información proporcionada por los estados financieros, hasta la actualidad, en que a dichos estados si bien siguen siendo la materia prima principal del estudio, se les adiciona otra información relevante y procedimientos de análisis mucho más elaborados que antes, empleando datos prospectivos para anticipar situaciones.
Bernstein (1993:3) afirma que según sea el objetivo perseguido, el análisis de estados financieros:
“puede utilizarse como herramienta de selección, para elegir inversiones o candidatos a una fusión. Se puede utilizar como herramienta de previsión de situaciones y resultados financieros futuros. Se puede utilizar como proceso de diagnóstico de áreas con problemas de gestión, de producción o de otro tipo. Puede servir como herramienta en la evaluación de la gestión”.
I.2. Proceso contable
Antes de entrar al desarrollo específico del tema que nos ocupa y aplicar distintos procedimientos, hay que tener en cuenta algunos aspectos esenciales del proceso contable, a efectos de saber dónde estamos parados.
El sistema de información contable forma parte del sistema de información general de la empresa, por lo tanto el mismo no constituye todo el sistema de información, pero sí la parte más esencial. A través de él se puede observar en gran medida el resultado de las distintas acciones ejecutadas.
En el análisis de estados financieros para uso interno, el mismo es un insumo para la administración, pero a su vez la interpretación de dicha información se enriquece cuando la misma se apoya en herramientas como finanzas, marketing, estrategia y el control de gestión.
Podemos graficar a la primera parte del proceso contable de la siguiente manera:
La contabilidad captura todos los hechos económicos traducidos a pesos, los registra en su lenguaje y periódicamente presenta su informe de manera resumida, es decir, fundamentalmente a través de estados financieros.
De esta manera, se genera la utilización de los mismos para la toma de decisiones y la aplicación de la técnica de análisis pertinente a dicha información.
I.3. Limitaciones de la información contable
Si los estados financieros y la contabilidad constituyen la materia prima del analista, es imprescindible conocer, además de lo que la información contable puede dar, lo que no brinda.
Para ello, deberemos tener en cuenta fundamentalmente lo siguiente:
a) La contabilidad no es una disciplina exacta, la misma está sujeta a convenciones establecidas por la profesión contable, la legislación y al criterio profesional de quien prepara la información.
Vaya por caso de lo último, las distintas alternativas de amortización de los activos para el uso o la estimación del porcentaje de productos que serán reclamados (para el cálculo de la provisión para garantías).
b) Las normas contables o de información financiera, que son tomadas en cuenta en los estados financieros de publicación, están orientadas fundamentalmente a satisfacer al usuario externo. Es necesario conocer la normativa, a efectos de realizar una lectura adecuada y, en su caso añadir información.
c) Hay muchas cuestiones importantes para la marcha de las empresas, que no se manifiestan en los estados financieros, como la capacidad de los administradores, el compromiso de su personal y otras atinentes al mercado y la marcha de la economía.
Los números muestran una situación determinada, pero ¿qué ocurrirá si se están acumulando tensiones en el personal que pueden desembocar en una caída de la productividad, o si el mercado en el cual se inserta la empresa hubiera entrado en declinación?
I.4. Lectura de los estados financieros ante cambios en la unidad de medida
I.4.1. Introducción
Para la presentación de los estados financieros, en la mayoría de los países se utiliza como moneda de presentación, a la moneda funcional —con la que realiza la mayoría de sus operaciones— o la de curso legal.
Cuando se producen cambios importantes en el valor de la moneda de presentación, los estados deberían ser reexpresados, con la finalidad de: a) exponer los rubros en moneda de poder adquisitivo homogénea, y b) reflejar el resultado como consecuencia de los cambios en el poder adquisitivo de la moneda. Más allá, que sea o no obligatoria la reexpresión, hay que tener en cuenta que el analista debería realizarla —aunque sea con procedimientos simplificados— cuando la distorsión es importante.
No pretendemos introducirnos en el procedimiento de reexpresión, el mismo es tratado en la normativa internacional en la NIC 29 y en Argentina por la RT Nº 6. Partimos del supuesto que el lector ya conoce el mecanismo, simplemente remarcaremos aquí algunas cuestiones que resultan importantes no pasarlas por alto, a la hora de comprender a los estados reexpresados.
I.4.2. Índice de precios
El índice que debería tomarse para corregir los efectos del envilecimiento monetario, actualmente en Argentina es el de precios internos mayoristas (IPIM), elaborado por el INDEC (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos). Debiendo tenerse en cuenta lo siguiente:
No es un corrector perfecto, simplemente es el mejor que se tiene disponible todos los meses.
El mismo, no intenta mostrar un cambio en los precios específicos, sino que trata de exponer la tasa de inflación general.
El índice, se refiere al nivel de precios a lo largo del mes en que fue efectuado el relevamiento, por lo tanto no es el del último día del mes.
I.4.3. Valores reexpresados
Los valores reexpresados no son valores corrientes, simplemente manifiestan el costo histórico en moneda de poder adquisitivo actual. Si un bien se incorporó a $ 100 y desde ese momento a la fecha de reexpresión, la variación del índice de precios, resultó del 40 %, el costo histórico del bien es $ 140 medido en moneda de poder adquisitivo actual. El costo de reposición hoy, no necesariamente coincidirá con los $ 140.
I.4.4. Significado del resultado por exposición a los cambios en el poder adquisitivo de la moneda (recpam)
El resultado por exposición a los cambios en el poder adquisitivo de la moneda, se va a originar por un lado debido a la pérdida en la tenencia de activos monetarios. Ello será así, siempre y cuando dichos activos no contengan la suficiente cobertura inflacionaria.
Por otra parte, se producirá una ganancia por la tenencia de pasivos monetarios, también en caso que éstos no presenten la adecuada cobertura.
El procedimiento de reexpresión, por el llamado método indirecto actúa corrigiendo los rubros no monetarios, lo cual suele producir confusión en el recién iniciado en este tema, ya que no son éstos los que originan el resultado inflacionario. Trataremos de explicar mediante algunos modelos, como interactúan, por un lado la reexpresión de los rubros no monetarios, y por otro, el resultado que provocan los monetarios.
Caso 1
Supongamos, que se comienzan las actividades con inventarios por $ 1.000, los cuales son incorporados financiándolos con una deuda, sin intereses ni actualización. No se realiza ninguna operación en el Período y la inflación en dicho lapso de tiempo es del 50 %. Con lo cual, al inicio la situación patrimonial será:
Efectuando el procedimiento de reexpresión, tendremos al final:
Estado de resultados
Recpam - Ganancia 500
Como podemos observar al final. Si bien, el asiento que tuvimos que realizar fue un débito a inventarios por 500, contra un crédito a recpam del mismo importe. Se comprueba lo siguiente: los inventarios fueron inicialmente adquiridos por un importe —a moneda de hoy— de $ 1.500, mientras que la deuda se mantuvo en valores nominales.
Lo anterior, muestra claramente, que la firma se benefició con esta situación, ya que si la deuda hubiera generado una actualización equivalente a la pérdida de poder adquisitivo, hoy sería de $ 1.500, sin embargo sólo se deben $ 1.000, lo que provoca una ganancia para la empresa por este hecho. El esfuerzo para pagar la deuda al cierre, será menor que en el momento inicial.
Caso 2
Si el activo no monetario inicial hubiera sido aportado con capital propio, se efectuará la reexpresión, sin que este hecho origine un resultado inflacionario, ya que no existen activos ni pasivos monetarios. Finalizando por lo tanto:
Caso 3
Si en cambio, el activo inicial se tratara de efectivo, con los demás supuestos anteriores:
Al final, tendremos:
Estado de resultados
Recpam- Pérdida (500)
En este caso, al haber mantenido el mismo dinero en caja, seguimos teniendo el valor nominal de $ 1.000. Pero el valor intrínseco es menor al final, respecto al comienzo, al haber sido afectado por la inflación, provocando una pérdida por esta causa de $ 500.
El mismo efecto se hubiera causado, si en lugar de efectivo, se tratara de créditos sin ningún tipo de actualización e intereses.
Caso 4
Si el efectivo aportado, se hubiera financiado con una deuda que no tenga ajuste ni intereses, no existiría recpam, ya que la pérdida de los activos monetarios se compensaría con la ganancia de los pasivos monetarios.
Caso 5
Habiendo comprendido lo anterior, podemos agregarle una pequeña complicación al modelo, supongamos la misma situación inicial que el caso 3:
En un mes determinado, se adquieren mercaderías por la totalidad del efectivo disponible. Desde el momento inicial a la fecha de cierre la inflación fue del 50 %, mientras que desde la fecha de compra de los inventarios ha sido del 30 %. Estos porcentajes podrían surgir de los siguientes índices de precios:
Entonces, tendemos al final:
Estado de resultados
Recpam – Pérdida ( 196)
En este caso, observamos que en el activo los inventarios tienen un costo histórico medido a moneda de cierre de $ 1.304, mientras que el aporte inicial de los propietarios a la misma moneda es de $ 1.500 (capital y ajuste de capital).
El significado de la pérdida, viene dado por el tiempo que el saldo de efectivo estuvo expuesto a la inflación, generando un resultado negativo por $ 196. El cual se puede calcular de la siguiente manera:
Pérdida por inflación por el tiempo de exposición:
Caso 6
Supongamos ahora, que en el caso anterior, un mes antes del cierre se venden las mercaderías a crédito por $ 1.600, no cobrándose al cierre. Siendo la inflación desde el momento de la venta al final del 20 %. Estos porcentajes podrían surgir de los siguientes índices de precios:
Inicial | 100 |
Momento de la compra | 115 |
Momento de la venta | 125 |
Final | 150 |
Entonces, tendremos:
Estado de resultados
El significado del recpam, puede explicarse de la siguiente manera:
Como puede observarse, la inmovilización de efectivo en la primera parte fue impactada por una desvalorización a moneda de cierre de $ 196. Mientras, que los créditos en la última parte lo fueron en $ 320, lo cual arroja una pérdida final como consecuencia del efecto de la inflación sobre estos rubros monetarios de $ 516.
Caso 7
Ahora, imaginemos que a la venta a crédito se le cargaron $ 300 de intereses.
Estado de resultados
El significado del recpam, puede explicarse de la siguiente manera:
En este caso, la pérdida inflacionaria es menor que la anterior, ya que el resultado que experimentarían los créditos, fue absorbido por los intereses nominales, que alcanzaron a cubrir gran parte de la inflación prevista.
Caso 8
Si en cambio, los intereses nominales hubieran sido $ 400, tendríamos:
Estado de resultados
En este caso, el recpam surge de la siguiente manera:
Aquí, solamente el saldo del efectivo —por el tiempo que estuvo expuesto— originó resultado inflacionario. Las cuentas por cobrar, al haberse pactado intereses nominales que cubrían la inflación, no fueron alcanzados por ésta, generando además intereses reales por $80, en la medida que superaron la inflación del Período.
Si, en el estado de situación financiera, hubieran existido deudas, el efecto sería el mismo que para los créditos, pero de signo contrario.
I.4.5. Resultados financieros en una sola línea, incluyendo el recpam
Cuando se presenta en una sola línea el resultado financiero (incluyendo el recpam), se generan problemas al momento de interpretar la información contable, por lo siguiente:
a) no podemos conocer los intereses reales, es decir netos del efecto inflacionario,
b) no discrimina los resultados generados por el activo y por el pasivo, lo cual impide por un lado analizar el rendimiento en la utilización del activo y, no permite conocer la eficiencia en el uso de capitales de terceros.
En tal caso, habrá que depurar el estado de resultados presentado (siempre y cuando contemos con la información necesaria), eliminado la incidencia de componentes financieros implícitos y segregando los resultados financieros (que incluyen el recpam).
Para la determinación por separado del recpam generado por el activo y el pasivo, debe realizarse a través de un estado de variaciones en el capital monetario.
Veamos con un sencillo ejemplo esta última cuestión:
Período 0: la empresa comienza sus actividades la empresa con la
siguiente ecuación patrimonial: Efectivo $ 1.000, Deudas: $ 500,
Capital: $ 500.
Período 1: se compran mercaderías en efectivo por $ 1.000.
Período 2: se vende la totalidad de las mercaderías a 30 días de plazo por $ 1.200. Como la empresa habitualmente realiza sus ventas de contado, en este caso le carga intereses por $ 10.
Período 3: se cobra la totalidad de los créditos.
Período 4: cierra el ejercicio y se devengan los intereses del préstamo por $ 20.
Los índices de precios a considerar son los siguientes:
Período | Índice |
0 | 100 |
1 | 102 |
2 | 105 |
3 | 108 |
4 | 110 |
Variaciones respecto de activos monetarios:
Los activos monetarios habrían provocado una pérdida de $ 68
Variaciones respecto de los pasivos monetarios:
En este caso los pasivos arrojaron una ganancia de $ 30. Con lo cual, el resultado inflacionario neto (recpam) es una pérdida de $ 38.
I.4.6. Inflación acumulada en estados no reexpresados
Si los estados no hubieran sido reexpresados, porque la inflación en cada uno de los ejercicios no hubiera sido significativa. Es posible, que a lo largo de varios Períodos ese pequeño desfase acumulado, sí proporcione distorsiones importantes.
Por ejemplo, si en cada ejercicio la variación en el nivel de precios fue del 4 %, a lo largo de cinco ejercicios, será de:
1,045 - 1 = 0,2166 ; 21,66 %
Luego, la variación acumulada es del 21,66 %, la cual pasa a ser importante. Entonces, antes de analizar, sería importante reexpresar los estados correspondientes a cada uno de los Períodos.
I.4.7. Comparación de estados reexpresados
Cuando se van a realizar comparaciones entre cifras de distintos Períodos, corresponde llevar todos los valores —tanto monetarios como no monetarios— a moneda de un solo Período para que resulte comparable.
Por ejemplo, si vamos a tomar el promedio del rubro créditos entre dos Períodos:
C1: 100.000
C2: 120.000
Si el aumento en el nivel de precios, desde el Período C1 al Período C2 fue del 10 %, debemos llevar el crédito del Período 1 a valores del Período 2 para que la relación resulte homogénea, así se trate de un rubro monetario. Es decir:
I.4.8. Estado de flujo de efectivo reexpresado
Cuando se realiza el estado de flujo de efectivo deben tenerse en cuenta básicamente las siguientes cuestiones:
Que, el saldo inicial de efectivo y equivalentes, corresponde al importe reexpresado a moneda de cierre.
Deberá exponerse el recpam provocado por la pérdida de poder adquisitivo de los saldos de efectivo.
Las inversiones de muy corto plazo que son consideradas como equivalentes de efectivo, generarán resultados inflacionarios, en la medida que la variación del índice de precios supere las coberturas inflacionarias contenidas (ej.: intereses nominales).
Todos los conceptos del estado estarán reexpresados a moneda de cierre. Así, cuando observamos cobranzas, pagos, etc., éstas no muestran los valores nominales de tales operaciones, sino importes a moneda de cierre.
I.5. Problemas de valuación y exposición
Antes de aplicar el instrumental respectivo para el análisis, habrá que detenerse en las cuestiones de valuación y exposición contenidas en los estados financieros, ya que si pasamos por alto las mismas, corremos el riesgo de llegar a conclusiones equivocadas. Algunas de ellas son las que mencionamos a continuación y otras, las iremos tratando en cada caso particular.
Para las propiedades planta y equipos las normas contables suelen otorgan flexibilidad respecto a su valuación al costo histórico o un importe revaluado. Evidentemente no será lo mismo realizar el análisis por uno u otro método. A pesar que no todos los autores abordan este tema, veamos algunas opiniones. Bernstein (1993: 667), al referirse al cálculo de la rentabilidad señala:
“los cálculos de rendimiento de los activos se basan habitualmente en los valores de libros y no en los valores justos o de mercado, que son, en la mayor parte de los casos, más significativos y relevantes desde el punto de vista analítico.”
Por otra parte, Fowler Newton (2011:228) deja el tema librado a la posición que tome el analista, brindando las siguientes opciones:
“a) si el analista no viese con simpatía el incremento de la medición contable de los bienes de uso (o parte de ellos) sobre la base de revaluaciones, podría excluir el superávit de revaluación del patrimonio y deducir ese mismo importe de los bienes de uso;
b) si el analista considerase más representativas a las cifras surgidas de la revaluación (menos depreciaciones y desvalorizaciones posteriores) podría mantener la cifra del patrimonio neto pero reducir el resultado del Período por los importes cargados a la cuenta del ORIA.”
En general, la información que más interesa es sobre el valor revaluado, pero no siempre se tiene acceso a dicha información, por lo que hay que tener cuidado a la hora de realizar interpretaciones de no caer en generalizaciones equivocadas y sobre todo, cuando se realizan comparaciones entre empresas.
Las políticas de depreciaciones también es una cuestión importante a tener en cuenta, respecto a la razonabilidad económica de las mismas.
El método de valuación de los inventarios condiciona los resultados y el importe del activo, por lo tanto no debe ser pasado por alto.
Habrá que preguntarse si han sido contabilizadas todas las provisiones que correspondían y si han sido debidamente valorizadas.
I.6. Fuentes de información
Vamos a hacer aquí un inventario de todas las fuentes de información a las que debe recurrir el analista.
a) Estados financieros: se debe trabajar con los estados históricos, también con los proyectados, y no solamente con aquellos que se refieren al fin de ejercicio.
b) Otros informes contables de uso interno: es necesario ahondar en otros informes que no son de publicación, como los que muestran la naturaleza y clasificación de los costos.
c) Contabilidad: a veces hay que recurrir al detalle de la información, más allá del resumen que surge de los estados; por ej.: cuando sea indispensable conocer la composición de los deudores.
d) Datos extracontables: si bien el analista es un especialista en contabilidad y sobre esta disciplina va a centrar su análisis, no puede ignorar información útil que está en el resto del sistema de información —y no el contable—. Por ejemplo, conocer el dato de las unidades vendidas, brindará la información adecuada para saber si la variación se debió a modificaciones en los precios o a las cantidades vendidas.
e) Información prospectiva: además de los estados proyectados que se mencionan en a), deben considerarse los presupuestos parciales como flujo de fondos proyectado, presupuesto de ventas y otros.
f) Información del contexto: la empresa forma parte de un sistema abierto, y considerar el entorno nos ampliará las explicación sobre las causas de una situación determinada y las implicancias que el mismo tendrá en el desarrollo económico-financiero futuro.
I.7. Tipos de análisis
Tradicionalmente se efectúa una clasificación según sea el acceso a la información que tenga el analista. Se dice que si accede a toda la información se trata de un análisis interno y si está en poder solamente de los estados financieros, se trataría de un análisis externo.
En realidad, lo que importa es el acceso a la información. En la gestión se puede contar con toda la información necesaria, pero también hay usuarios que pueden encontrarse en posición de solicitar todo lo que necesitan para una adecuada interpretación.
Lo que se distingue es, si en algunos casos la disposición de la información puede llegar a ser distinta en profundidad o confiabilidad, de manera independiente a que se esté dentro o fuera de la empresa.
Debe considerarse con claridad el objetivo del lector del informe, el cual no puede quedarse sólo con el resultado de algunos indicadores.
I.8. Destinatarios del análisis de estados financieros
El producto del análisis de los informes contables normalmente va dirigido a alguno de los siguientes usuarios:
a) Los gerentes y directivos: El análisis de estados financieros resulta útil para el control de gestión.
Conocer la evolución económico-financiera de la empresa, su estado actual y perspectivas futuras resulta vital para monitorear la gestión.
El control de gestión se basa en el sentido anglosajón del término control que implica, como señala Blanco Illescas (1992) el concepto da la “idea de guiado y acción correctora inmediata”, por esa causa carece de sentido esperar los estados financieros anuales. Se hace necesario contar con estados periódicos por lapsos menores a los de un ejercicio económico —generalmente no más allá del mes— y además, información proyectada.
Es importante conocer qué implicancias tiene el planeamiento de la empresa en su estructura económica y financiera. Sólo así podremos evaluar la gestión de quienes conducen la misma.
Otro aspecto sobresaliente es el enfoque sistémico que tiene la gestión empresarial. Con esto queremos significar que no se pueden hacer diagnósticos financieros y económicos en un “laboratorio”. Es necesario distinguir las implicancias y la interrelación existentes entre las decisiones que conllevan a una determinada situación.
Por otra parte ese sistema, es un sistema abierto, y está influenciado en forma significativa por su entorno.
b) Los otorgantes de crédito: tanto de tipo financiero como comercial. A estos destinatarios les interesa conocer las posibilidades que tendrá la empresa de reintegrarles sus préstamos.
Ésta fue la primera utilidad que se le dio a la técnica de análisis de estados financieros. Tal vez este comienzo fue el que determinó, que en su mayoría, sea considerada como una herramienta de utilización externa a la empresa y con muchas limitaciones. De ese modo se desaprovecha todo el potencial de la técnica debidamente utilizada.
Hoy en día las entidades financieras que realizan un análisis serio en la calificación crediticia, lo efectúan con una visión más amplia: solicitan información proyectada y la compatibilizan con información del contexto.
c) Auditores: la utilización de algunas herramientas de análisis de estados financieros puede dar pistas acerca de dónde dirigir el trabajo de auditoría. Por ejemplo si la antigüedad de créditos se extiende más allá de lo normal, supongamos que la empresa concede 30 días para el pago a sus clientes y se verifica que la antigüedad promedio oscila en los 45 días, en este caso el auditor podrá orientar su trabajo de auditoría en función a ello. ¿Cuál es la razón de esa demora de 15 días?, ¿los cobradores estarán dilatando la entrega de los valores?
d) Inversores: a quienes van a invertir en una empresa, les interesa conocer la situación actual y perspectivas de la misma. El valor de una empresa está determinado por la capacidad de generar utilidades en el futuro. Parte de la información necesaria para ese fin, se obtiene de los estados financieros.
e) Calificadoras de riesgo: los informes que brindan las agencias calificadoras hacen foco en los distintos niveles de riesgo que puede tener la entidad, además de la información macroeconómica y de mercado utilizan información que surge del análisis de estados financieros.
f) Otros interesados: tales como sindicatos, organismos gubernamentales, centros de investigación, periodismo económico, la sociedad en general.
I.9. Proceso del análisis de estados financieros
Nos referíamos en el punto I.2. a la última parte del proceso contable que consiste en la utilización de la información producida por los estados financieros.
Podemos desagregar ese tramo del proceso contable en los siguientes subprocesos:
En otras palabras, la tarea del analista consiste en transformar datos contables en información útil para la toma de decisiones.
El análisis de cada uno de los subprocesos indica:
a) Antes de comenzar su tarea el analista debe tener perfectamente claro aquello que pretende informar a quien tomará una decisión determinada sobre la gestión. Por ejemplo establecer la capacidad de pago de la empresa frente al otorgamiento de un crédito, su situación financiera y/o económica con fines de control de gestión, o la rentabilidad de un área de negocios determinada.
Debe diferenciar claramente el síntoma de las causas. Por ejemplo si una empresa tiene problemas financieros, no necesariamente la causa del problema debe ser de esa índole. Una de las posibilidades podría deberse a una cuestión de ingresos insuficientes. Por lo tanto el origen del problema parte de lo económico y se manifiesta en su aspecto financiero a través del faltante de fondos. Si no podemos clarificar la causa del problema, la solución que se adopte posiblemente no resuelva la situación.
b) Lectura de los estados financieros: le proporcionará una perspectiva global y rápida de la situación y a la vez le servirá para orientar el trabajo, adecuar la información y seleccionar la utilización de las herramientas adecuadas.
Debe tenerse en cuenta la importancia de la información en notas y también habría que extenderse —en la medida que sea posible— en el resto de información que no está expresada en los estados financieros.
Damos por descontado, que el analista debe poseer una sólida formación contable, ya que es la única manera de abordar con solvencia el problema: conociendo en su integridad el proceso contable.
Si no fuera así, ¿cómo podrá realizar su trabajo en forma correcta, si desconoce por ejemplo qué tratamiento se da al revalúo de la propiedad, planta y equipo?, o ¿por qué se ha contabilizado determinado tipo de contingencias? Por otra parte hay situaciones en las que se presenta la información con evidentes errores de exposición o valuación y el analista debe saber la manera de salvarlas.
c) Lectura del informe del auditor: en el caso que se trate de estados financieros auditados, el auditor tiene obligación de emitir su opinión acerca de si los mismos presentan razonablemente la situación patrimonial, económica y financiera de la firma. Por consiguiente puede expedirse de modo favorable, adverso, con salvedades sobre algunos aspectos o abstenerse de opinar.
Leer dicho informe y saber cómo opinó quien ha examinado los estados financieros, será un elemento de gran importancia para conocer la calidad de la información sobre la cual vamos a trabajar.
d) Adecuación de la información: en función a la lectura de los estados financieros, procederemos, en caso de ser necesario, a efectuar algunos ajustes extracontables, a fin de que la información sirva para el objetivo fijado.
Ejemplificación: si queremos analizar la capacidad de pago de una empresa y observamos que, según nuestro criterio, no han sido provisionados debidamente los créditos, corresponderá realizar un ajuste en nuestra hoja de trabajo.
e) Aplicación del instrumental: este subproceso no debe realizarse a “ojos cerrados”, como si fuera una receta, igual para todos los casos, sino que, de acuerdo al objetivo determinado y a las características de la información disponible, deben seleccionarse los procedimientos a realizar.
f) Interpretación: Saber relacionar adecuadamente los valores obtenidos del análisis resulta fundamental. Por lo cual el analista, además de la formación contable adecuada, debe poseer una buena formación en los negocios.
Hay una diferencia entre análisis e interpretación, ya que el primero consiste en la aplicación del instrumental, cuyos resultados, podríamos decir, son simples datos, hasta tanto no se efectúe la correspondiente interpretación. Esta última consiste en explicar con acierto el análisis de estados financieros efectuado, dando por entendido que ello conlleva a la interpretación.
g) Una vez interpretada la información, acorde al objetivo planteado, se debe decodificar o “traducir” la misma en el lenguaje del usuario.
Si no tenemos claro el objetivo del trabajo y la forma en que lo necesita la persona que tiene que tomar una decisión en función al informe del analista, el mismo será sólo una recopilación de fórmulas y lenguaje técnico sin sentido.
I.10. Instrumental de análisis
De acuerdo al objetivo determinado y a la profundización necesaria se aplicará el instrumental correspondiente.
I.10.1. Comparación de datos absolutos
Si bien, para la realización de la tarea de análisis se trabaja en términos relativos —porcentajes, cocientes— en una destacada proporción, no debe perderse de vista la comparación de valores absolutos.
Por ejemplo, si comparamos las cifras relativas podemos observar que las inversiones crecieron de un Período a otro en un 150 %, lo cual da la impresión de un incremento muy significativo. Pero si nos detenemos en los valores absolutos, veremos tal vez, que en la etapa anterior dicho rubro era un importe de $ 1.000 y en la siguiente $ 2.500.
Queda comprobado entonces, que en valores absolutos la cuestión es insignificante, aunque, a priori, la variación relativa nos parece indicar un asunto importante.
I.10.2. Análisis de variaciones
Al comparar variaciones de un Período respecto a otro, no podemos sólo mencionar las mismas. Por el contrario, se debe buscar la causa de dicha variación. Ejemplo: si las ventas disminuyeron en un Período respecto a otro, ¿cuál fue la causa de dicha variación?: ¿una caída en el precio, en las cantidades colocadas, o ambas variables a la vez en distintas proporciones?
I.10.3. Ratios
I.10.3.1. Concepto
Los ratios, también llamados índices, relaciones, razones o cocientes, establecen una relación entre dos valores. Por ejemplo, si tenemos una cantidad de 300 y otra de 100, el ratio es 3, el cual también podría representarse a través de un porcentaje, en este caso 300 %.
Cabe aclarar respecto a los ratios, que no está normalizada la forma de elaborarlos, ni siquiera la denominación.
No vamos a detenernos demasiado en la crítica a distintos índices, sin embargo, en este libro haremos hincapié en aquellos que creemos, cumplen con el objetivo propuesto en cada caso y los llamaremos por el nombre más generalizado individualmente. Ello no significa una “receta” que deba aplicarse en todos los casos o una limitación para elaborar otras relaciones que en alguna circunstancia merezcan ser realizadas.
Es importante destacar, que en general, los ratios constituyen indicios sobre una situación determinada. Salvo cuando se trate de valores extremos, difícilmente se pueda definir una situación sólo con la utilización de esta herramienta.
La popularidad alcanzada por varias relaciones y su utilización por personas que no manejan la técnica adecuadamente, ha generado la sobrevaloración de algunos índices. En la gran mayoría de los casos resulta necesaria la aplicación de otras herramientas de análisis para interpretar una situación determinada.
I.10.3.2. Limitaciones de los ratios
No sólo debe tenerse en cuenta lo que las relaciones muestran, sino también —tan importante como lo anterior— lo que no muestran.
Para dar un ejemplo que no tiene que ver con una cuestión empresaria, pero a los efectos que resulte comprensible, supongamos que queremos evaluar cómo es la formación contable de un estudiante de la carrera de Contador Público, podríamos ir a su biblioteca y elaborar el siguiente ratio:
Cantidad de libros de la disciplina contable / Total de libros en la biblioteca
En este caso, la relación obtenida no se fijará en cuestiones como las siguientes:
1- ¿ha leído todos los libros el estudiante?,
2- ¿cuál es su grado de comprensión?,
3- ¿los textos que tiene son de importancia en cuanto a contenido y autores?
4- Si queremos compararlo con otro estudiante, ¿la cantidad de libros ajenos a la disciplina contable es la misma? Porque en ese caso, el que lee sólo temas contables va a arrojar un cociente 1 y quien lee la misma cantidad de temas contables y además otros, indicará un valor menor, sin que ello signifique una formación inferior en el tema.
5- ¿Realiza lecturas en otros libros que no sean de su biblioteca?
Podríamos seguir enumerando limitaciones contenidas en la relación efectuada, sin que ello signifique que el ratio elaborado no sea importante.
Debemos tener presente, que como expresamos anteriormente, los ratios son indicios de una situación determinada, en este caso nos dan una “pista” acerca de la formación contable del estudiante, la cual debe ser complementada con otra información, como la que apuntamos. De esta manera nos acercaríamos al objetivo perseguido.
I.10.3.3. Variables stocks y variables flujos
Una cuestión que está presente en los ratios son los conceptos de stocks y flujos de entrada y salida.
Si imaginamos una bañera con agua hasta la mitad, la canilla abierta y sin tapón, la cantidad de agua que ingresa es un flujo de entrada, la cantidad que sale por el desagüe, un flujo de salida. Un flujo tiene una dimensión temporal, es una cantidad por un Período de tiempo.
El volumen de agua, en el instante que hacemos la medición es el stock. Los stocks no tienen una dimensión temporal, son una cantidad a un momento determinado.
Podríamos asimilar los flujos a una película, pues comprenden una sucesión de hechos, en cambio los stocks equivaldrían a una fotografía.
El estado de situación financiera nos muestra las existencias de los distintos rubros en un momento determinado. Por el contrario, los estados de resultados, de evolución del patrimonio y de flujo de efectivo, responden al concepto de flujo.
Los inventarios que se exponen en el estado patrimonial son la existencia de los mismos; la cifra de compras en un Período de tiempo constituye un flujo de entrada, y el costo de ventas, el flujo de salida.
Al elaborar los ratios es importante saber si consideraremos stocks, flujos de entrada o de salida.
Cuando comparamos stocks con flujos, conviene atender existencias promedios, no la final solamente, para que la misma sea representativa respecto a lo que pasó en el Período de consideración del flujo.
Para referirnos a la antigüedad del inventario en una empresa comercial supongamos que no tiene existencia inicial. Efectuó compras durante el ejercicio por $ 100.000 y al final le queda una existencia de $ 50.000.
La relación que habitualmente se utiliza, y a la que nosotros vamos a referirnos en este libro es la siguiente:
Significado de los símbolos:
epi: existencia promedio del inventario
cv: costo de ventas
Hemos utilizado el flujo de salida —costo de ventas—; el resultado nos indica que la existencia promedio (si la venta se reitera en los niveles anteriores) puede abastecer una demanda de 183 días.
Si en cambio, tomáramos el flujo de entrada (cp: compras), la relación obtenida será:
Lo que significa: si las compras se hubieran realizado regularmente, la periodicidad de las mismas para mantener la existencia promedio sería cada 91 días.
Al ser más relevante la información referida hacia el futuro, es la que normalmente tiene mayor utilidad.
En otros casos, para determinar la antigüedad de los créditos por ventas, a priori, pareciera necesario comparar las cobranzas —flujo de salida— con los saldos de deudores por ventas —existencias—. Sin embargo, la comparación se realiza con las ventas —flujo de entrada—, porque no siempre está disponible el dato de la cobranza y por considerarse que en general no debería haber una distorsión importante usando uno u otro.
I.10.4. Comparación entre ratios
La comparación entre los ratios obtenidos, en la misma empresa para distintos Períodos o inter-empresas, siempre y cuando resulten comparables, nos da una visión mejorada del índice.
Por ejemplo, respecto al caso anterior de la antigüedad de los inventarios, al compararlo con otros Períodos de la empresa, podremos comprobar la superación o no de la velocidad de circulación del stock. Por otra parte, si contamos con información de otra empresa de la misma actividad y similares características a la que estamos analizando, evaluaremos la eficiencia relativa respecto a la misma, con lo cual quizás detectemos fortalezas y debilidades.
I.10.5. Análisis horizontal
El análisis horizontal consiste en transformar a valores relativos una serie de números de distintos Períodos, para evaluar la tendencia. Por ejemplo, supongamos los siguientes importes de activos corrientes para distintos Períodos y que interese conocer la evolución de los mismos:
Período 1 | Período 2 | Período 3 | |
Valores absolutos | 353.000 | 402.500 | 286.400 |
Análisis horizontal | 100 % | 114 % | 81 % |
Generalmente, resulta útil, como en este caso asignarle valor 100 % al Período base y en función al mismo determinar los correspondientes al resto de los Períodos.
En esta ocasión se verifica que el pasivo creció en el segundo Período un 14 % y en el tercero descendió un 19 % respecto al primero.
I.10.6. Análisis vertical
El análisis vertical también consiste en transformar a valores relativos pero no se trata, como en el caso anterior, de una serie de distintos Períodos, sino de importes correspondientes a una misma etapa, tomando una de ellos como valor base.
Por ejemplo, se quiere determinar la incidencia relativa de los distintos rubros del estado de resultados, en función al total de ventas.
Según los importes de la primera columna, obtendremos los siguientes valores porcentuales para la segunda columna:
$ | % | |
Ventas | 2.856.900 | 100,0 |
Costo de ventas | (2.285.600) | (80,0) |
Ganancia bruta | 571.300 | 20,0 |
Otros ingresos | 33.741 | 1,2 |
Costos de distribución | ( 158.342) | ( 5,5) |
Gastos de administración | ( 258 .423) | ( 9,0) |
Costos financieros | ( 22.457) | ( 0,8) |
Ganancia antes de impuestos | 165.819 | 5,8 |
Impuesto a las ganancias | ( 58.037) | ( 2,0) |
Ganancia del período | 107.782 | 3,8 |
De la misma manera, se puede efectuar dicho análisis vertical para componentes del estado patrimonial, en los que se necesite conocer su incidencia relativa.
I.10.7. Análisis de correlación y regresión
Cuando se trata de series prolongadas de tiempo, a veces resulta interesante advertir el grado de fuerza de la asociación entre dos variables —una dependiente y otra independiente—.
Supongamos que se quiere comprobar si existe correlación entre el gasto en publicidad y la cifra de ventas, y tenemos los siguientes valores:
Período | Ventas (Y=variable dependiente) | Publicidad (X=variable independiente) |
1 | 100.000 | 20.000 |
2 | 120.000 | 21.000 |
3 | 130.000 | 23.000 |
4 | 145.000 | 25.000 |
5 | 158.000 | 28.000 |
6 | 167.000 | 33.000 |
7 | 179.000 | 36.000 |
8 | 186.000 | 38.000 |
9 | 195.200 | 42.000 |
10 | 202.500 | 43.500 |
En este caso, vemos que el coeficiente de determinación r² arroja un valor de 0,949171. Se puede interpretar como que prácticamente el 95 % de la variación de ventas, entre un Período y otro, es provocada por la variación del gasto en publicidad.
Aquí hay una relación lineal muy fuerte entre las dos variables. Debe tomarse en cuenta un Período de tiempo lo suficientemente prolongado y asegurarse que no existan otras variables no contempladas que estén influenciando en el modelo.
Determinada la correlación existente, surge la ecuación de la recta correspondiente.
En la situación anterior, la constante —ordenada al origen— arroja un valor de 40,62703 y el coeficiente angular —pendiente de la recta— es 3,801065. Por lo tanto, la función lineal nos quedará determinada por:
Y = 3,801065 X + 40,62703
X: (variable independiente) Publicidad
Y: (variable dependiente) Ventas.
Los cálculos anteriores se pueden determinar por computadora, en planilla de cálculo que contenga análisis de regresión.
Dado que existe una importante correlación entre las variables y establecida la función lineal, podemos proyectar los valores de ventas (variable dependiente) en función a lo gastado en publicidad (variable independiente).
Por ejemplo: para un importe de publicidad de $ 55.000, la cifra de ventas será la siguiente:
(3,801065 x 55.000) + 40,62703 = 209.099
Esto último es sólo una inferencia estadística; si bien es importante su empleo, hay que considerar que no siempre el futuro guarda relación con el pasado.
De resultar válida la deducción, permitiría al analista realizar consideraciones sobre la eficiencia del gasto publicitario y a su vez analizar políticas futuras en la materia.
Hay otras herramientas estadísticas como la regresión múltiple, que a veces pueden utilizarse.
No está dentro de los alcances de este libro el análisis profundo de dicha herramienta, el lector interesado puede recurrir entre otros autores a Berenson y Levine (1991).
I.11. Niveles de análisis
El analista llevará a cabo su investigación tan profundamente como sea posible. Para ello creemos oportuno reproducir los cuatro niveles de análisis que en su momento describió Myer (1965). Son los siguientes:
a - Nivel de las relaciones estructurales.
b - Nivel de los índices de tendencia.
c - Nivel de análisis de las variables.
d - Nivel de análisis de contexto. Es denominado en la traducción como nivel económico, pero creemos que resulta más esclarecedor y a su vez no da lugar a confusiones con una de las situaciones analizadas —la económica—, llamarlo análisis de contexto.
Veamos cada uno de los niveles fijados.
a - Nivel de las relaciones estructurales
Aquí se refiere a la aplicación de uno de los instrumentos descriptos: los ratios, que, como ya dijimos muestran un indicio de un determinado aspecto, sobre causas.
Ej.: una de las relaciones que analizaremos en el capítulo III, conocida como razón de endeudamiento, que se determina a través del siguiente cociente: Pasivo/Patrimonio
Suponiendo, que obtenemos los siguientes valores:
La misma establece por cada peso de recursos aportados por los propietarios, cuánto han aportado los acreedores. En este caso los cocientes arrojados son 0,25, 0,29 y 0,38 respectivamente.
Ahora bien, esto manifiesta que los acreedores tienen, en el Período 3, una mayor participación en la financiación de los recursos totales que en los dos anteriores. Pero no informa demasiado, salvo cuando se trata de valores extremos, muy elevados o muy bajos, tendríamos que recurrir al segundo nivel de análisis y verificar cómo han evolucionado estos dos componentes.
b - Nivel de las tendencias
En este caso se aplicará la técnica de análisis horizontal:
Período 1 | Período 2 | Período 3 | |
Pasivo | 100% | 117% | 167% |
Patrimonio | 100% | 101% | 108% |
Podemos comprobar que la evolución operada en las relaciones estructurales, se debió a que el pasivo creció en mayor proporción al incremento operado en el patrimonio. Un aumento del 67 % del pasivo del tercer ejercicio respecto al primero, mientras que el patrimonio sólo creció un 8 %.
Sin embargo, deberíamos preguntarnos por qué causa ambos componentes experimentaron esa variación, para lo cual acudiríamos al tercer nivel.
c - Análisis de las variables
Investigaremos las causas que provocaron esa variación en el pasivo: ¿se tomaron pasivos para adquisición de maquinarias?, ¿para financiar activo de trabajo?, ¿los mismos se incrementaron por un manejo financiero inadecuado?
Además, en esa variación del pasivo, ¿qué mutaciones se produjeron?, ¿cambió la composición de préstamos bancarios y pasivos comerciales?, ¿las proporciones de pasivo corriente y no corriente se mantuvieron?
Una vez identificadas las causas, habrá que establecer otras cuestiones, cómo la exigibilidad de dichos pasivos, las garantías, el costo, etc.
Respecto al patrimonio, cuál fue la causa de los aumentos: ¿por utilidades?, ¿por aportes de capital?, ¿por revaluaciones?
Todavía estamos realizando un trabajo que podríamos llamar de “laboratorio”, tenemos que introducirnos en el análisis del contexto, para insertar la empresa en el ambiente.
d - Análisis de contexto
Continuando con el análisis, habría que considerar, por ejemplo si los costos del pasivo son compatibles con las tasas del mercado y con la rentabilidad de la empresa. Si en las condiciones particulares en que se encuentra la empresa, fortalezas y debilidades que presenta, situaciones del mercado y economía en general, es viable el endeudamiento y qué tipo de deuda presenta. ¿Puede incrementar su endeudamiento?, ¿es conveniente reducirlo? Por otra parte, en un contexto recesivo el marco será distinto que en uno expansivo.
I.12. Síntesis
Analizar estados financieros e información contable, consiste en desglosar los datos de manera que los mismos adquieran significado y en consecuencia, poder interpretarlos, a efectos de facilitar la toma de decisiones. Dicha información es de naturaleza económico-financiera.
Resulta importante tener claro el funcionamiento del proceso contable para entender el producto de la contabilidad, que son los estados financieros, sobre los cuales se realiza la tarea de análisis.
Los cambios en los niveles de precios son una cuestión a tener en cuenta, ya sea que estemos trabajando sobre información reexpresada o no. Esto es así, debido a que por un lado, afecta a la medición de bienes incorporados y los aportes realizados en distintos momentos. Por otra parte, los ingresos y costos se generan en Períodos en donde el valor de la moneda es distinto. También debe realizarse una correcta lectura del resultado como consecuencia de los cambios en el poder adquisitivo de la moneda.
Las fuentes de información son: a) los estados financieros, históricos y proyectados, b) otros informes contables, c) información aislada provista en algunos casos por la contabilidad, d) datos extracontables e) información prospectiva proveniente de los distintos presupuestos parciales y f) información del contexto.
Una clasificación que suele hacerse del análisis de estados financieros es la separación en análisis interno y externo, pero creemos más adecuado diferenciar la tarea de análisis en función a la cantidad y calidad de información disponible.
El producto final del trabajo de análisis e interpretación es para la toma de decisiones de distintos usuarios, tales como gerentes y directivos, otorgantes de créditos, auditores, inversores, calificadoras de riesgo. Además de otros interesados que eventualmente pueden requerir esta información, tales como sindicatos, periodismo especializado, etc.
La última parte del proceso contable —el análisis de la información— puede desglosarse en los siguientes subprocesos: a) determinación del objetivo, b) lectura de los estados financieros u otros informes contables, c) lectura del informe del auditor, d) adecuación de la información, e) aplicación de la herramientas, f) interpretación y g) “traducción” para quien va dirigido.
El instrumental de análisis se utiliza de acuerdo a las necesidades de información y ellos son: a) comparación de datos absolutos, b) análisis de variaciones, c) ratios, d) comparación entre ratios, e) análisis horizontal, f) análisis vertical, g) análisis de regresión y correlación.
Los niveles de análisis son los distintos grados de profundidad a los que es necesario llegar, para poder efectuar un buen trabajo. Ellos son: a) nivel de las relaciones estructurales, b) nivel de los índices de tendencia, c) nivel de análisis de las variables y d) nivel de análisis del contexto.