Читать книгу Jam Session del Búho - - Страница 7

Curiosidad acerca de los músicos y sus instrumentos, Camila observaba desde la distancia como jugaban sus últimas notas y, finalmente, se quedó dormido bajo la agradable sombra de los árboles de roble. El suave susurro de las hojas y el suave zumbido de los insectos llenó el aire como el bosque se instaló en una tranquila tarde de pijamas.

Como Camila observó el sueño de los músicos, una idea comenzó a formarse en su travieso mente. Ella siempre había tenido curiosidad acerca de los diferentes sonidos y melodías que podrían crearse con varios instrumentos, y ahora, con los músicos trance en sueños, vio una oportunidad para satisfacer su curiosidad.

Con un travieso brillo en sus ojos, Camila silencio extendió sus alas y se deslizó hacia abajo desde su percha, aterrizando suavemente en el suelo del bosque. Se mueve sigilosamente hacia la dormida músicos, ella no pudo resistir una juguetona sonrisa cuando ella se acercó a los instrumentos establecidos antes de ellos.

En primer lugar, ella fui de puntillas a la ardilla de la pequeña violín, sus cuerdas brillantes en el sol moteada. Escogiendo cuidadosamente con sus delicadas garras, Camila tentativamente captada en las cuerdas, provocando un suave sonido melódico que envió un escalofrío de emoción por sus plumas.

A continuación, ella saltó sobre el conejo de la flauta, su esbelta forma de llamar a su curiosidad. Presionando contra su pico, Camila sopló suavemente en el instrumento, produciendo un dulce, trilling nota que parecía danzar por el aire como una alegre sprite.

Pasar al mapache del tambor, Camila aprovechado por un alegre ritmo con sus garras, los beats haciendo eco a través del bosque en un lúdico de cadencia. Y finalmente, llegó el pájaro del carillón, el envío de delicado tintineo de las armonías en cascada a través de la compensación como una cascada de sonido.

Mientras ella exploraba cada instrumento, Camila corazón se hinchó con delicia a las nuevas y maravillosas melodías ella fue capaz de crear. El bosque parecía venir de vida con la música, los árboles se mecen en el tiempo de su improvisada sinfonía, y los animales despiertan de su letargo para escuchar en el temor.

Perdido en la alegría de su experimentación musical, Camila no se percataron de los músicos comienzan a remover de su sueño, sus ojos parpadeando abiertos en sorpresa en el encantador sonidos que llenaban el claro. Al ver a la lechuza con una mezcla de diversión y asombro, Camila se dio cuenta de que su travieso plan había llevado a un inesperado y mágico momento de creatividad compartida.