Читать книгу Podés imaginarlo, podés hacerlo - Leonardo Martín Götte - Страница 10

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LOS PENSAMIENTOS Y NUESTRO PROYECTO

El tiempo corre al igual que los pensamientos, y a cada pensamiento hay que tomarle mucha importancia, porque puede decirnos algo que necesitamos para nuestro proyecto.

Puede que resulte confuso, pero muchas veces tenemos pensamientos que no sabemos de dónde vienen, no sabemos que los originan, pero ellos están ahí, queriendo decir algo a nuestro ser consiente, resulta que muchas veces no prestamos verdadera atención a lo que nuestro inconsciente nos comenta y puede que ahí esté la respuesta a lo que deseamos en realidad.

En nuestras vidas cotidianas, recibimos muchísima información del entorno que no podemos esquivar, cada información recibida es absorbida por nuestro cerebro y es almacenada en algún lugar de la mente, allí quedan guardadas para luego ser mostrados, como mensaje al ser consiente, sin éste saber dónde se originó.

Cada información recibida, cada momento vivido, cada historia escuchada es una enseñanza para nuestra mente, cada situación que atravesamos, cada vez que prendemos el televisor y observamos lo que sucede, queda guardado en nuestra mente.

Es importante seleccionar, qué es lo que queremos recibir en nuestra “esponja” llamada cerebro, tratemos de seleccionar que es lo que queremos absorber, para que luego pueda ser utilizado de una manera productiva. Aunque puede que en la variedad de información recibida esté alojado eso que necesitamos para solucionar o la salida a nuestros obstáculos.

Sería absurdo intentar controlar la cantidad de ideas y pensamientos que tenemos a diario, pero podemos saber si nos será de ayuda solo con prestar atención a cómo nos sentimos. Es imprescindible intentar sentirnos bien, esa frecuencia armoniosa que nos conecta con el camino que queremos seguir.

Resulta difícil mantenerse en esa frecuencia de positividad debido a que nuestro entorno, muchas veces no nos acompaña, pero ese es un trabajo que debemos llevar a cabo para no desviarnos de nuestras metas.

Debemos enfocarnos en tener pensamientos positivos y dirigirlos hacia lo que deseamos hacer, resulta que si pensamos de manera positiva, a pesar de nuestro entorno, podemos lograr alcanzar nuestros objetivos de una manera más fácil o acorde a lo que hemos proyectado en un principio.

Podés imaginarlo, podés hacerlo

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