Читать книгу Yo, una flor en el desierto - María Soledad Cervantes - Страница 23
LA CHICA DE LOS GIRASOLES
ОглавлениеElla colectaba versos con girasoles
al sonido del canto de los caracoles.
Caminaba descalza entre las hojas,
estos eran testigos de sus congojas.
A veces tenía días tristes
y preguntaba al cielo ¿por qué te fuiste?
Con ternura las flores la abrazaban
y alrededor de ella con amor danzaban.
Cada día adornaba su pelo con un girasol;
maquillaba su rostro con reflejos del sol,
esperando siempre el día que el regresaría
para abrazarla y volver a besarla.
Esta chica vive en su propio resplandor;
jamás se queja y da gracias al creador.
Espera ese vals entre los sembradíos,
de ese que prometió nunca decirle adiós.
La chica de los girasoles,
colecta versos con caracoles.