Читать книгу Perversiones de andar por casa - Marina Aguilar Salinas - Страница 8
Sobre el régimen disciplinario en el siglo XXI. Recogida de datos para una nueva fenomenología de la prisión
ОглавлениеAnsiedades acumuladas en la primera, segunda y tercera planta. En el subsuelo. En la alcoba materializada en los zapatos de tacón ligeramente elevados, no mucho, sobre el suelo de conglomerado del aula.
Su respuesta servil ante el comentario del alumno aventajado que con más frecuencia la interrumpe —todos lo hacen, sin ninguna educación— cuando ella está explicando un contenido aburrido cualquiera. Contribuye así a perpetuar los cánones de género que tienen las madres con sus hijos, las amantes con sus amados, las limpiadoras con el conjunto de los ciudadanos en general.
Otra alumna interrumpe a la profesora de los charoles, constituyendo una excepción a nuestra repentina regla falocrática. Luego, de repente, la servidumbre encuentra una grieta en el trabajo de otra de las alumnas. La enseñante, antes esclava, se lanza sobre la debilidad de aquella como los cuervos. Para realizar esa metamorfosis, la cazada ha tenido que transformarse en cazadora, mucho antes de que nadie, ni siquiera ella misma, se diera cuenta.
En la carne viva de todos ellos reposa la nada del murmullo intelectual. Se constituye (también sus cuerpos) de un vocabulario vacío. Vocabulario manido de buitres, de animales buscadores de carroña. Esa nada escupida en la academia —término demasiado abstracto que se materializa en la prisión— y los gargajos van circulando entre alumnos y docentes encorsetados en nombre de la excelencia. De una verdad olvidada. La acumulación de flemas se calma momentáneamente en ella (la docente) al transformarse su cara oculta tras la mascarilla en pico de rapaz.
Interacción con intelectuales mal pagados. Estímulos de salón. Vacuidades: el vocabulario académico se constituye de vacuidades. La clase de hoy va sobre cómo escribir un abstract. Corregimos ejercicios que consistían en la elaboración de una bibliografía en los diferentes estilos (MLA, Chicago, Harvard). ¡Verdaderamente apasionante! Nos hincha el espíritu de novedad y fascinación. Lo intoxica de una fe en el destino humano, un destino que presume de ser colectivo, certero, real.
Este texto pretende demostrar que el lenguaje que quiere demostrar algo es un persecutor de la nada. Por tanto, este texto es un persecutor de la nada. Justo como los escupitajos universitarios. ¿Qué motivaciones tendrá la docente para levantarse cada mañana?
Un lenguaje corporal natural y seguro de sí mismo es imprescindible a la hora de hablar en público. «You should smile like a ballerina, even if it hurts», nos dice sonriendo tras su pico de córvido. Hay que enmascarar hasta las ansiedades más profundas.