Читать книгу Depósito de sufrimiento - Miguel Quintana - Страница 16
ОглавлениеMARIPOSA NEGRA
Un día las mariposas se volvieron negras,
el amor se volvió algo en lo que no creer,
sangraba de dolor,
no por amor,
sangraba de dolor
Se apagaba esa sonrisa mía
que en algún momento sonrió
y escondido veía como moría,
veía como yo me moría
Un día las mariposas negras volaban en el cielo
El cielo se cubría de nubes
y causaban un dolor tan gigantesco aquí por dentro,
moría de dolor,
no por amor,
moría de dolor
No sabía ocultarlo
Prefería quedarme encerrado o quieto
Me sonreía,
pero en el fondo rezaba mis angustias,
lo sabía
Mi alma está macilenta,
no tiene escape ni rumbo
Mi cabeza perturbada y llena de Ideas:
Sucias
Mugrientas
Suicidas
Un día las mariposas negras vestían todo mi ser
Mantos en trajes oscuros
Mis penas vivían opulentas,
tragando un sentimiento filoso,
vagabundo y moribundo
Hoy vomité miles de mariposas
Eran cientos de demonios
atravesándome la garganta,
¿Por qué me producen un gran desamor?
¿Por qué se me desvanece el corazón?
... Será que quisieran que perdiera la razón?
¿Y si yo decidiera por mí ...
Mariposas putrefactas en el agua,
tan frágiles y negras,
tan lábiles y negras,
tan débiles y muertas;
Ahogadas en el agua
Un día las mariposas negras dejaron de volar
A veces las veo volar cuando duermo
Intentan hacer lo suyo,
y aunque duela,
voy gastándome.