Читать книгу Vía crucis con los santos - Pablo Cervera Barranco - Страница 13

Оглавление

San Agustín

V/ Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.

R/ Porque con tu Santa Cruz has redimido al mundo.

Palabra de Dios

Mt 27,27-31; Jn 19,17

Entonces los soldados del procurador llevaron consigo a Jesús al pretorio y reunieron alrededor de él a toda la cohorte. Le desnudaron y le echaron encima un manto de púrpura; y, trenzando una corona de espinas, se la pusieron sobre su cabeza, y en su mano derecha una caña; y doblando la rodilla delante de él, le hacían burla diciendo: «¡Salve, Rey de los judíos!»; y después de escupirle, cogieron la caña y le golpeaban en la cabeza. Cuando se hubieron burlado de él, le quitaron el manto, le pusieron sus ropas y le llevaron a crucificarle.

Reflexión

En la cruz están representadas las dimensiones del amor de Cristo, que sobrepasa todo conocimiento, como dice el apóstol: la amplitud, la longitud, la altura y la profundidad. La cruz es amplia en el travesaño sobre el que se extienden las manos del Crucificado: es el signo de las obras buenas, en la anchura del amor gratuito. La Cruz es larga en el travesaño que desciende hasta en tierra: allí se fijan la espalda y los pies como signo de la perseverancia en la extensión del tiempo, hasta el final. La cruz es alta en el ápice que se levanta sobre el travesaño como signo de la finalidad superior a la que están ordenadas todas las obras: todo lo que se realiza en anchura y en longitud, es decir, con amor y perseverancia, se hace por la altura de los dones divinos. La cruz es profunda en la parte de la viga que se hunde en la tierra: les está oculta y no se puede ver, pero de ahí surge su parte visible y gloriosa, precisamente como cada bien nuestro proviene de la profundidad de la gracia de Dios que escapa a nuestra comprensión y a nuestro juicio.

Esta es la cruz de Cristo, este es el signo de Cristo que todos conocen, el signo que se pone en la frente de los creyentes, sobre el agua del bautismo con la cual renacen, sobre el aceite del crisma con el que son consagrados, sobre el sacrificio con el cual son alimentados. En la celebración de los sacramentos todo bien nos viene a través de la cruz de Cristo.

Oración

Oh Dios, principio y fin de todas las cosas, que reúnes a toda la humanidad en el templo vivo de tu Hijo; haz que mediante las vicisitudes, felices y tristes, de este mundo, mantengamos fija la esperanza de tu reino, seguros de que en nuestra paciencia tendremos la vida. Por Cristo, nuestro Señor.

R/ Amén.

Padrenuestro, Avemaría y Gloria.

R/ Pequé, Señor, pequé. Ten piedad y misericordia de mí.

Vía crucis con los santos

Подняться наверх