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PARTE I. ESENCIA: ¿CUÁL ES EL NÚCLEO DE LA MENTE DE UN ESENCIALISTA?

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Conquista estos supuestos para convertirte en un Esencialista:

1. Debo hacerlo

2. Todos son importantes

3. Puedo incluir todo esto en mi agenda…

Reemplace las suposiciones anteriores por verdades fundamentales:

1. Elijo hacerlo

2. Solo unos pocos de estos realmente importan, así que debo seleccionar cuidadosamente…

3. Puedo hacer algo pero no todas las cosas, y hay compensaciones

Estas tres verdades te liberarán y te permitirán ir a por lo que realmente te importa.

CAPÍTULO 2. ELIGE: EL PODER INVISIBLE DE LA ELECCIÓN

¿Qué harás si solo puedes hacer una cosa en tu vida? Greg Mckeown se hizo esta pregunta un día, y se sorprendió al descubrir que estar en la escuela de leyes no era eso. Se ha dedicado a la abogacía porque alguien le dijo que lo hiciera, y pensó que era una buena idea, ya que podía asumir varios trabajos relacionados con la abogacía. Estudió todo el día y leyó toda la noche, pero se dio cuenta de que no estaba teniendo éxito en nada de lo que hacía. Después de darse cuenta de que no estaba contento con el camino que había elegido, dejó la abogacía después de unas semanas.

Un amigo en América lo invitó a su boda, así que dejó Inglaterra y se fue allí. Él atribuye esta decisión a la creación del libro. Su amigo dijo que si decidía venir, y esta declaración le impactó. Se dio cuenta de que tenía una opción, pero abandonó su capacidad de elegir. Intelectualmente, sabía que podía decidir no ir a la escuela de leyes, pero emocionalmente, sentía que sólo tenía que tomar la ley. Al rechazar la opción de no ir allí, se vio forzado a hacer algo que no era realmente significativo para él por defecto.

Por el lado positivo, esta experiencia cambió su perspectiva sobre las opciones. En ese entonces, él veía las opciones como cosas y no como acciones. No son posesiones, sino actividades. Más importante aún, se dio cuenta de que las personas pueden no tener control sobre las opciones que se les presentan, pero siempre están a cargo de cómo seleccionan entre ellas.

El Esencialista sabe la importancia de su poder de elección. Él/ella entiende que las personas pueden elegir porque tienen libre albedrío, pero a veces simplemente olvidan que lo tienen. Sabe que cuando se renuncia al derecho de elegir, otras personas dictarán las elecciones de la persona.

La gente puede olvidar su habilidad de escoger debido a la impotencia aprendida. Un experimento realizado por Steve Maier y Martin Seligman demostró este concepto. Consiguieron algunos perros y los pusieron en tres grupos; el primer grupo recibió choques eléctricos pero se les dio una palanca para detener los choques. El segundo grupo recibió una palanca que no funcionó. El tercero no recibió ningún choque.

Después, los perros fueron colocados en una caja enorme que tenía un divisor bajo en su centro. Un lado estaba electrificado mientras que el otro no. Resultó que los perros que no fueron electrocutados o tenían una palanca para detener los choques aprendieron a saltar al lado seguro de la caja, pero curiosamente, los perros que fueron electrocutados y no tenían manera de detener los choques no trataron de alejarse de los choques. Ellos pensaron que no podían hacer nada acerca de su situación así que no trataron de salvarse.

De la misma manera, las personas que pensaban que no tenían otra opción a menudo no buscan otras opciones. Pueden dejar de tratar de tener éxito, o pueden presionarse demasiado para trabajar demasiado. Es importante recordar que todos tenemos libre albedrío para que no aprendamos a estar indefensos. Este conocimiento es crucial para convertirse en un Esencialista.

CAPÍTULO 3. DISCERNIR: LA POCA IMPORTANCIA DE PRÁCTICAMENTE TODO

Trabajar más duro para obtener más resultados puede parecer lo correcto, pero a menudo hay un punto en el que el aumento de los esfuerzos no nos llevará a ninguna parte y puede incluso causar nuestra caída.

Greg Mckeown recuerda que cuando era joven, repartía periódicos para ganar una libra un día en una hora. Pensó que a ese ritmo, le llevaría mucho tiempo comprar la Micromáquina que quería, así que en vez de eso lavaba coches. Lavaba 3 coches al día y cobraba 2 libras por cada uno, y esto también le llevaba una hora. Por lo tanto, ya no ganaba 1 libra por hora, sino 6. Esto le enseñó una valiosa lección de que algunos tipos de esfuerzo producen mayores recompensas que otros.

Cuando estaba en la universidad, trabajaba en una empresa de entrenamiento y ganaba 9 dólares por hora. Esta vez, no evaluó los trabajos en términos de la relación entre el tiempo que le tomaba trabajar y las recompensas que obtenía, sino que consideró las relaciones entre el tiempo y los resultados que lograba. Esto lo llevó a preguntarse qué resultado tendría más valor en su trabajo —en este caso, se enfocó en persuadir a los clientes de que se quedaran en la compañía—. Muy pronto, nadie canceló y él ganó mucho más.

Trabajar duro es, en efecto, valioso, pero los esfuerzos no siempre conducen a mejores resultados. Hacer menos, pero mejor es la clave. El Principio de Pareto dice que el 20% de los esfuerzos crean el 80% de los resultados. Joseph Moses Juran, el autor del Manual de Control de Calidad, probó este principio en Japón. Enseñó a los japoneses a canalizar su energía en la mejora de las pocas características cruciales de sus productos, y esto condujo gradualmente a la inmensa mejora de los artículos de fabricación japonesa. Warren Buffet atribuye el 90% de su riqueza a solo 10 inversiones. Filtra las oportunidades de inversión, dice "no" a la mayoría de ellas, pero invierte mucho en las pocas que superan sus estándares.

Un No-Esencialista cree erróneamente que casi todas las cosas son esenciales, mientras que un Esencialista sabe que casi todo es no-esencial. Deja de lado la noción de que cualquier tipo de esfuerzo conducirá a un buen resultado.

Tómese su tiempo para explorar todas sus opciones. Este tiempo extra vale la pena porque algunos asuntos son tan importantes que devuelven el esfuerzo puesto en encontrarlos varias veces. Incluso las oportunidades que parecen ser buenas serán mucho menos valiosas que las verdaderamente grandes. Como esencialista, debes discernir más para poder hacer más.

CAPÍTULO 4. TRADE-OFF: ¿QUÉ PROBLEMA QUIERO?

Southwest Airlines se propuso ofrecer tarifas bajas viajando solo de un punto a otro y no ofreciendo comidas ni servicio de clase alta. Al principio, muchos se quejaron de la forma en que hacían negocios, pero con el paso del tiempo, cada vez más se apreciaron los bajos precios y la compañía generó muchas ganancias. Continental Airlines trató de imitarlos a través de Continental Lite, pero como no pueden dejar de lado sus estrategias originales, gastaron sus recursos demasiado poco hasta que la calidad de sus servicios se deterioró. Perdieron millones de dólares y se convirtieron en el blanco de miles de quejas.

Continental Airlines aprendió la dura lección de ignorar las compensaciones de esta manera. Aparte de las organizaciones, también ocurre entre los individuos. Por ejemplo, aquellos que saben que ir a una reunión que está a punto de comenzar en 10 minutos les tomará exactamente 10 minutos, pero aún así hacen cosas innecesarias como revisar su correo electrónico. También hay algunos que dicen que pueden ir a una fiesta de cumpleaños a una hora determinada pero que previamente habían comprado entradas que se muestran a la misma hora de la fiesta.

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