Читать книгу El culto a Juárez - Rebeca Villalobos Álvarez - Страница 7
Agradecimientos
ОглавлениеLa primera y no siempre revelada historia de un libro es la de su trayectoria, desde los borradores iniciales hasta su publicación. Ésta, debo reconocer, ha sido larga y a ratos tortuosa. Por ello, ahora que por fin miro por el retrovisor el camino andado y hago un recuento de los tropiezos, se hace más hondo mi agradecimiento con todos los involucrados en su confección.
Para que un trabajo especializado cobre vida y sentido se requiere una labor continua de crítica e interlocución que en este caso inició con mis maestros, Álvaro Matute (†), Gloria Villegas y Vicente Quirarte, a quienes debo la revisión de las versiones más tempranas del texto. A esa labor se sumaron después Renato González Mello y Carmen Vázquez Mantecón, cuya mirada crítica y meticulosa fue indispensable para corregir erratas y robustecer argumentos. En una etapa posterior, fue igualmente significativa la generosa recepción de la que fue objeto El culto a Juárez en el Seminario de Investigación sobre Historia y Memoria Nacionales de la Universidad Nacional Autónoma de México, coordinado por Virginia Guedea, en el que participan investigadores, alumnos y profesores de distintas procedencias. Otro lector de este texto, inesperado pero muy bienvenido, y a quien de hecho conocí debido a ello, fue Rafael Rojas. Es difícil para mí encontrar palabras que hagan justicia a su empeño por impulsar la publicación y promover la muy necesaria discusión en torno a estos temas.
Los nuevos lectores de esta obra encontrarán en ella ideas que se transmiten con palabras pero también con imágenes. Esto obedece a que el culto a Juárez es tangible en discursos, obras históricas y literarias, panfletos políticos, efemérides y poesías pero también en monumentos, óleos, fotografías, películas y postales. Debido a que yo no contaba con una experiencia previa en el trabajo con estas fuentes, la tarea resultó compleja y desafiante. Las muchas lecturas teóricas e históricas que fui incorporando allanaron un tanto el camino, pero la colaboración generosa y el apoyo de aquellos que trabajan continuamente con imágenes ha sido crucial. En este sentido, agradezco la interlocución con especialistas como Patricia Massé Zendejas y muy especialmente el generoso e incan-sable apoyo de Cecilia Gutiérrez Arriola en la localización y la organización del material visual, labor a la que se sumó, en fechas más recientes, Ana Patricia Granados Soto. También me encuentro en deuda con Salvador Rueda Smithers y Carlos Mújica Suárez, por la ayuda que nos brindaron para acceder a los materiales que albergan el Museo Nacional de Historia del Castillo de Chapultepec y el Recinto de Homenaje a don Benito Juárez. Asimismo, debo reconocer el arduo trabajo de Violeta Pérez Ruiz, colaboradora de la editorial Grano de Sal, en la localización y las gestiones necesarias para incorporar todo el material visual.
Finalmente, mi más profunda gratitud para la UNAM, mi casa, que por medio de distintas personas e instancias hizo posible la publicación. En primer lugar, gracias a Leonardo Lomelí Vanegas, cuyas gestiones mantuvieron vivo el proyecto, incluso en los momentos más complicados, hasta hacerlo realidad. Gracias también a Virginia Guedea, por su infatigable apoyo, por abrirme las puertas del seminario que coordina y por mate-rializar, con la ayuda de Érika Sánchez Cabello, el proceso de crítica académica tan necesario para una obra de este tipo. Agradezco asimismo a mi querida Facultad de Filosofía y Letras el haber adoptado el proyecto en su etapa final, en particular a Federico Saracho, por su buena disposición para llevar el barco a buen puerto. Por último, no puedo dejar de mencionar lo significativo que es para mí publicar este libro en una editorial como Grano de Sal. La mirada fina, el interés genuino y el cuidadoso empeño de Tomás Granados Salinas con los libros permiten la divulgación de obras académicas para un universo más amplio de lectores. Contar con ese respaldo es un privilegio con los que pocos autores académicos podemos contar y por el que siempre estaré agradecida.