Читать книгу Representación gráfica de espacios y territorios - Ruth Zárate - Страница 6

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Presentación

La elección de una perspectiva de participación comunitaria como iniciativa de desarrollo local y rural en el marco de un proyecto social es una herramienta para facilitarles a las comunidades elementos de análisis de su propia realidad. A partir de esta perspectiva, es posible crear sentido de pertenencia y conformar iniciativas desde las bases comunitarias, que proveen mecanismos para la búsqueda de cambios sociales.

Desde esta óptica, el presente libro da cuenta de la creación de un proceso de participación comunitaria orientada al desarrollo local. La propuesta surgió a partir de la articulación de procesos de investigación y de extensión; es decir, cumple con uno de los objetivos misionales de la Universidad, contemplados en el Proyecto Educativo Institucional (PEI); esta alianza se ejecutó en el área de influencia (AI)1 del Campo Escuela Colorado (CEC)2 de la Universidad Industrial de Santander (UIS). El ejercicio es una experiencia exitosa que conjuga el trabajo en equipo y el compromiso comunitario fundamentados en la Responsabilidad Social Universitaria (RSU).

Para contribuir a la formación de una sociedad más igualitaria y justa, el individuo debe reconocer a otros sujetos con una conciencia de alteridad, es decir, pensar, sentir y vivir como esos otros, de modo que mediante la sensibilidad humana se brinden soluciones efectivas a problemas y conflictos presentados en los territorios. Pero, ¿cómo pueden escenificarse las dinámicas espaciales en un territorio sin conocerlo ni representarlo?

La cartografía social como metodología juega el papel fundamental de reflejar contextos espacio-temporales al facilitar el encuentro de distintos lenguajes, representaciones y deseos colectivos. En su implementación, el territorio es sometido a la observación con el fin de indicar, comprender y explicar representaciones e imaginarios comunes del entorno bajo la construcción de mapas producto del intercambio de saberes desde distintas miradas.

Esta metodología se desprende de un proceso participativo de investigación cualitativa3, que consolida la recolección de información desde la perspectiva del actor. La cartografía social permite crear conocimiento colectivo mediante procesos de comunicación entre personas de ambos sexos, varios rangos de edad y diversas culturas, para crear una visión temporal y espacial de las relaciones tejidas en comunidad. De esta manera, se presenta la posibilidad de actuar sobre su entorno, con miras a la generación de insumos para una adecuada atención e intervención de poblaciones afectadas por la estructura socio-histórica (Piza, 2009).

Como se mencionó anteriormente, esta metodología estimula el diálogo fluido entre sujetos sociales, a fin de experimentar el intercambio de pensamientos y percepciones, por medio de talleres de participación en los que se proyectan referentes simbólicos. De tal manera, se rescata y se crean la memoria y los imaginarios colectivos del territorio. En otras palabras, desde la cartografía se proyecta la realidad de manera libre, por medio de consentimientos plasmados en un mapa espacial participativo, en el cual se hacen evidentes las relaciones diversas en un espacio social que parte de los mapas mentales de los actores. De ahí se desarrolla una metodología de automapeo territorial en el marco de diferentes expresiones y representaciones espaciales de las comunidades.

El libro cuenta con tres capítulos. Los dos primeros son estrictamente teóricos y académicos; mientras que el tercero es de carácter práctico y participativo. En el primer capítulo, “Entre lo tradicional y lo nuevo: los mapas y el cambio de paradigmas”, se expone una teoría del conocimiento que muestra la evolución histórica y filosófica de áreas como la cartografía y la geografía y que permite comprender componentes espaciales como los mapas y los territorios. Resulta fundamental conocer parte de la evolución de categorías analíticas relacionadas con el entendimiento de la representación gráfica del espacio, su contexto histórico y los paradigmas originados en distintas épocas. El saber histórico del avance de los mapas devela los intereses detrás de las técnicas y conceptos de las cartografías. En el segundo capítulo, “Teoría crítica, cartografía social y territorio”, se muestra el aporte de pensadores de la escuela de Fráncfort en el conocimiento del mundo social para lograr investigarlo. Así mismo, se explican aspectos fundamentales que definen la cartografía social como una herramienta de participación, la cual genera un cambio político en los discursos e imágenes elaborados tradicionalmente con las comunidades. También se busca clarificar conceptos como territorio, territorialidades y desarrollo local y rural, a fin de enlazar enfoque, metodología y teoría con la praxis del trabajo participativo.

Las metodologías participativas responden a un problema vigente: las comunidades no logran identificarse con representaciones gráficas de sus entornos. Por lo tanto, si se investiga para transformar la historia, también es necesario cambiar las imágenes de la misma escenificada a través de los mapas. En ese sentido, la cartografía social es un medio de cambio de las concepciones de los espacios y territorios donde las personas con sus símbolos, lenguajes y discursos levantan de manera identitaria nuevos mapas. Así mismo, este proceso se cimentó epistemológicamente a partir de los postulados de la teoría crítica, y tomó como referencia intereses noéticos, cognoscitivos y políticos, lo que respalda cualquier práctica investigativa. Por esta razón, se inicia con una propuesta articuladora de conocimiento e interés desde la concepción de tres tipos de ciencias: empírico-analítica, histórico-hermenéutica y crítico-social. Según el profesor Carlos Vasco (1994), con el propósito de asumir una postura epistemológica, desde la escuela de Fráncfort se parte de una discusión del positivismo en consideración a los estilos de investigación en las ciencias sociales. Así, el origen de este pluralismo, derivado de las distintas disciplinas que se abordan en el mundo sobre el hombre y la sociedad, depende de la orientación y la intencionalidad que adopte el investigador en la producción del conocimiento. Es aquí donde surgen las bases teórico-conceptuales, desde la descripción, compresión y explicación, que fundamentan la reflexión sobre fenómenos sociales y humanos, así como la metodología necesaria para el diseño del proyecto de investigación.

El tercer capítulo, “Cartografía social en la praxis: corregimiento de Yarima y veredas Los Colorados, La Ye y Rancho Chile”, demuestra la realidad que vive la población del AI del CEC. Se procuró realizar una breve explicación histórica de la conformación de algunos poblados y espacios habitados en zonas del Magdalena medio santandereano, en la que se destaca la importancia que tiene Barrancabermeja como enclave de explotación petrolera. Así mismo, algunos componentes históricos de dinámicas sociales de San Vicente de Chucurí (corregimiento de Yarima y la vereda Los Colorados) y El Carmen de Chucurí (las veredas Rancho Chile y La Ye). En estos lugares se presentaron periodos de colonización de baldíos desde finales del siglo XIX, así como migraciones y desplazamientos forzados en diferentes periodos del siglo XX, como en los años de la llamada Violencia y del actual conflicto armado interno. Resulta fundamental comprender la llegada de la empresa Tropical Oil Company a Santander, que transformó la dinámica social de la región. La extracción de hidrocarburos en la zona por parte de esta empresa es el preludio del trabajo realizado por la Empresa Colombiana de Petróleos, Ecopetrol.

Los anteriores procesos enlazan la historia pasada con la actual de los pobladores de la zona. Los mapas levantados con la comunidad demuestran las condiciones de las poblaciones del corregimiento de Yarima, de las veredas Los Colorados, Rancho Chile y La Ye. Por ejemplo, se observaron deficiencias comunes en acueducto, alcantarillado, servicio de energía, gas, así como la falta de cobertura de señal de internet y celular. Las vías de estos lugares se encuentran en inadecuado estado lo que dificulta el acceso. La salud, la educación y la vivienda son precarias, no están a la altura de una realidad histórica contemporánea y muestran espacios de años de atraso. Es un escenario que contrasta con la capacidad económica con la que cuenta la vereda los Colorados en la extracción de recursos energéticos de la zona. La población carece de actividades lúdicas y la organización comunitaria parte de redes políticas consolidadas años atrás. Este conocimiento se logró gracias a la interacción con la población, que a su vez funciona como una herramienta política para exponer la realidad, tal como la viven y la sienten los pobladores a través de los mapas sociales.

En conclusión, el presente libro de cartografía social pone de manifiesto una metodología inserta en la investigación cualitativa desde la Investigación Acción Participativa (IAP), fundamentada en la concepción del territorio como elemento de identidad y desarrollo social. De igual forma, en los postulados de la escuela de Fráncfort se cimienta la crítica del presente libro y se desenvuelve un proceso de participación comunitaria orientada desde el automapeo territorial de las comunidades del AI del CEC. La construcción teórico-práctica del texto complementa la visión académica con la visión comunitaria expresada en un conocimiento dialógico y holístico en la búsqueda de un derrotero para una real transformación social.

El libro surge en el marco del proyecto “Promoción y exigibilidad de los derechos humanos de los pobladores del área de influencia de Campo Escuela Colorado; una respuesta de responsabilidad social desde la UIS”, elaborado por la línea de Responsabilidad e Innovación Social del grupo de investigación Innotec y adscrito con código 8238 a la Vicerrectoría de Investigación y Extensión de la Universidad Industrial de Santander (UIS).

1 El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, junto con la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA), define el área de influencia como aquella en la que se manifiestan los impactos ambientales ocasionados por el desarrollo del proyecto, obra o actividad, sobre los medios abiótico, biótico y socioeconómico, en componentes tales como aire, agua y suelo. La manifestación de dichos impactos debe ser objetiva y medible. Esta área puede incluir, entre otros, las cuencas atmosféricas o hidrográficas (superficiales o subterráneas), los ecosistemas y las unidades territoriales (corregimientos, municipios, departamentos, etc.) o los territorios de las comunidades étnicas.

2 La Universidad Industrial Santander celebra un convenio interadministrativo con la Empresa Colombiana del Petróleo (Ecopetrol), que toma el nombre de Campo Escuela Colorado, el cual se constituye en la primera experiencia nacional en materia de interacción academia-industria del sector hidrocarburos con fines científicos y tecnológicos. Esta alianza se celebró el 25 de enero de 2006. El Campo se encuentra ubicado en las veredas Los Colorados, Rancho Chile y La Ye, en el corregimiento de Yarima, en los municipios de San Vicente de Chucurí y El Carmen de Chucurí del departamento de Santander, Colombia.

3 La cartografía social hizo parte de una fase del proyecto: “Promoción y exigibilidad de derechos humanos de los pobladores del área de Influencia de influencia de Campo Escuela Colorado (CEC): una respuesta de responsabilidad social desde la Universidad Industrial de Santander”.

Representación gráfica de espacios y territorios

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