Читать книгу REFORMA POLÍTICA SISTEMA PARLAMENTARIO PRIMER MINISTRO - Walter Huggias - Страница 4
Prólogo
ОглавлениеHay momentos donde concurren extremos no pensados, que motivan escribir, coordinar y buscar desarrollar temas donde se vinculan su calidad técnica; la importancia y la oportunidad.
Ahora postulo el sistema parlamentario necesario y aplicable en Argentina.
Hay situaciones límites, la pandemia por la “COVID 19”, lo es, nos propone a casi todos, instancias nunca imaginadas, para nuestras vidas, solo vistas en films y/o miniseries, la realidad superando a la imaginación de los escritores, libretistas o dramaturgos.
En algún momento comenzamos a predecir las dificultades, con más o menos dosis de acierto, todo ciudadano, con un mínimo nivel de información, podia predecir el futuro complejo, ya a mediados de marzo de 2020 y proyectado a 2021.
Para mí, fue clave en particular, aquel día de almuerzo con mi hijo Thomas; el motivo mi cumpleaños, justo 19 de marzo de 2020, mi hija Sofía estaba invitada, su responsabilidad como docente universitaria, en aquellos primeros dias de preparación para dar clases, la motivó a quedarse en la web con los integrantes de la cátedra, lógicamente probando para ofrecer el mejor resultado y me pareció genial, especialmente porque sin decirlo, intuía, que esa realidad emergente, sería muy larga y compleja.
El destino de las cosas, quiere que este 23 de febrero de 2021 al terminar este texto y aprobar el vínculo con la editorial seleccionada, coincide con un encuentro con mi hija, por temas profesionales me reuní con un colega en La Plata, lo veníamos postergando desde comienzo de la actividad abogadil, luego de la feria judicial de enero y aproveché para visitarla en su departamento de la ciudad.
Decidí incorporar a lo ya definido, el relato de la una situación sorprendente vinculada a la pandemia de orden local y con impacto político.
Mucho hablamos con mi hijo, aquel día de marzo, preocupado por sus clases de informática, considerando que tenía la meta de buscar promocionar su primer título universitario. Compartí, que ya había visto camino a La Plata, preparativos en el acceso, no eran habituales, poca gente ya en las calles, muy buen lugar, gran almuerzo, es curioso, evaluamos que se viniera conmigo, por el fin de semana, que se insinuaba intenso de información, pero era jueves y El pensaba que tendría alguna actividad grupal el viernes, en esos primeros movimientos de las cursadas, que tanto valora. Luego vendría el aislamiento social.
Nos atendieron espléndidamente en el restaurant, ya con todos los cuidados, esa esquina de 74;10;48 y aledaños, tiene una oferta gastronómica, excelente en varios locales, había solo tres mesas ocupadas, reflejo de la preocupación emergente, luego despedida y cuando volvía, casi las 16 hs., entendí que era muy complicado el escenario porvenir.
Sumaba aquel largo y lento regreso, volví a velocidad muy racionada, como cuidándome de algo, como sabiendo que nada debía pasar camino a casa, que si algo sucedía, no sería por errores mios, previendo, sin dudas, la dificultad.
En ese camino habitual, además, pensé muchas cosas, de repente me apareció una imagen, al pasar por Berazategui, el recuerdo de los duros días de 2001 y 2002, allí nos reuníamos un grupo de profesionales.
Por supuesto, no sabía que pasaría, aunque algo imaginaba, como admirador de Albert Camus, me conmovió “La Peste”; esa tensión social, esas contradicciones. Así comenzaba, desde distintos abordajes, la danza de posibilidades y proyecciones.
Superada la autovía, viendo casi todo cerrado en las calles barriales, recordé cuanto había escrito y trabajado en aquellos tiempos críticos, hasta ahora, solo publiqué trabajos en forma parcial y/o vía ponencias técnicas, algún capítulo en libros de varios autores, pero al final, nunca darle forma de libro.
Tenía y tengo, objetivos técnicos jurídicos en el proceso político y constitucional, que quiero cumplir.
Al escuchar el mensaje del Presidente de la Nación, recién llegando a Remedios de Escalada, visualicé la severidad de la “cuarentena”, que además ya era algo conocido y/o escuchado, como política sanitaria, por supuesto que en otros siglos o en otros continentes lejanos. Reaccioné así, me dije: estamos ante otra crisis, a lo económico y social se suma la pandemia. Lamentablemente no me equivoqué.
Me obligué, voy a buscar todo aquello escrito, que quedó muy bien archivado, desde tanto tiempo.
Así es, este trabajo literario y de estudio, comenzó hace años, al menos en parte de su fundamentación.
Había realizado estudios políticos sobre la reforma constitucional de 1994, los que me conocen, saben de mis diferencias, con el modelo político; económico y social que quedo en la ”Carta Magna”, a partir de la rigidez del sistema de funcionamiento de los poderes y sostener la imposibilidad de reformas parciales, con el sistema de enmiendas.
Nunca entendí en su totalidad, el espíritu de aquella reforma constitucional, en nuestro país, en vías de desarrollo y evolución, sin la posibilidad de enmiendas, sin comparaciones externas, no las necesito, solo por los requerimientos propios.
He expresado sobre la necesidad de reformas, sin la urgencia actual, valorando algunos institutos; nuevos derechos y organismos democráticos incorporados.
A qué tuvieron miedo? tantas precauciones, vuelvo una y otra vez a esta pregunta.
La solución es institucional; al pasar los días consolidé la idea. Especialmente cuando me llego la imagen de amplitud política y partidaria para asumir la administración de la pandemia en Argentina. Necesitamos dinámica y elasticidad, volvió aquella imagen del Parlamentarismo, del Primer Ministro.
Desde cada opción, en ponencias, siempre que pude y ameritaba, manifesté que necesitamos un sistema moderno y exigente para el poder de turno, también en charlas, debates o reuniones académicas.
Todo comenzó a fluir en ese día 19, mientras demoraba en abrir un sobre con documentos (nunca lo hice con tanta prolijidad, la mente se prepara para el autocontrol, para la paciencia del aislamiento -concedí-), tarde-noche que lógicamente se trasladó al día 20 del 03, como tantos otros ciudadanos de Argentina, la necesidad de información y la expectativa, me llevó a dormir muy tarde, ya casi de madrugada.
Confieso que ante la complejidad e incertidumbre, pude disfrutar de mi cumpleaños, ya tenía mis regalos además de un gran almuerzo con mi hijo, haber incorporado una expectativa adicional, donde aprovechar lo que vendría. Casi todos sabíamos que sería mucho más que 40 días, era ineludible y razonable. Tengo un obsequio agregado, de los mejores porque llega a nuestro pensamiento, apareció un objetivo, pensé es el momento, allá voy, los días sucesivos y los eventos políticos e institucionales ocurridos que describiré, mas las comparaciones con un pasado, muy presente, hicieron el resto.
Muchas gracias, infinitas gracias, por ocuparse de estos temas, abordados con estas palabras.