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Capítulo 1
ОглавлениеBillones años luz que separa de la Tierra, una galaxia despedazada y las heridas abiertas que desangran por causa de una fuerza maligna conquistando planetas, el fervor de la humareda y la crujiente masa de fuego azota cada civilización en manos de reyes crueles sin compasión.–
Aña, esos paladines del mal dominando durante dinastías ocultando su verdadera identidad con sus máscaras marcando el nivel de estatus .–
Hombres rebeldes por una sola causa, el sueño de la dominación total del universo demandado por su único líder desde el planeta Añiz, Mangangá.–
Escrupuloso, corpulento y su altura gigantesca salido a causa de un error de laboratorio con el fin de reemplazar la democracia.–
Raza Aña, ante la mala influencia en que han sido sometido por este ser único dejando el libre azar de combatir entre ellos con la fuerza de sus puños para obtener un rango superior. La ley del más fuerte algo habitual llevan en su gen donde la competencia es la brutalidad.–
Una unión que luego se ha desunido ante la caída de un planeta, la más importante de la galaxia. Trincherianos y Cuerveanos viven exiliados cada uno independiente del otro y ambos juntan las fuerzas para reconquistar lo que han perdido.–
Dos manuscrito que hoy llevan consigo como un contrato sagrado cuando se cumpliese el regreso a casa las condiciones de convivencia se respetase.
Desde las remotas del planeta arrasado sin piedad, un cuartel general a mando en las tomas de decisiones del destino de este planeta muerto.
—¿Hay novedades de los Trincherianos y Cuerveanos?–
—Por el momento no hay ninguna noticia de los dos grupos y el radar todavía no encuentra nada, además recorrí todas las áreas con resultado negativo–
—Esto no me gusta nada, algo esta pasando y esta demasiado tranquilo– dice 601.–
—¿Qué sugiere Señor?– pregunta 602.–
—Sigan buscando hasta encontrar alguna información y quiero noticias rápido, estos grupos independentistas algo estarán tramando–
—Fuera de acá 602, quiero respuestas– dice 601 con voz ronca que lo caracteriza.–
El 602 transpiraba y asustado sale de la oficina.
El Gran General, así lo llaman los subordinados, enfadado sabiendo que algo no estaba bien y tenía el presentimiento que en cualquier momento algo iba a pasar. Grita con todo su ser –Malditos inútiles tengo que hacer todo yo–, golpeando fuertemente los puños contra la mesa.–
Mientras tanto en el otro lado del cuartel, en una habitación con las mejores tecnologías llega el 602 cabreado y se dirige a sus inferiores.
—Van hacer doble turno, el Gran General esta de muy mal humor sabiendo de que no están haciendo bien sus trabajo y esta muy preocupado que todavía no hay novedades de los independentistas y es todo muy raro que nada aparece sobre ellos–
Todos empezaron a chequear las computadoras minuciosamente por si tenia alguna falla, otros chequeando una y otra vez el radar, otros corriendo haciendo llamadas a otras bases para corroborar datos
—628, Hágame un favor, lleve estos libros al hombre encarcelado. Dice que el conocimiento es sinónimo de poder jajajaja (soltó un gran carcajada). Pobre esclavo de poca monta creyendo que algún día gobernará este planeta. De pasar por la sala tortura quedo mal de la cabeza–
—Quizás tenga razón que sea el hombre de que hablan los escrito que secuestraron hace varios siglos atrás–
—Mmm no creo que lo sea–
—¿Cómo puede ser si esta atrapado y no tiene ninguna chance de salir con vida?. En nuestra historia nadie pudo salir, no hay registros–
—Esos escritos fueron escrito por charlatanes–
Mientras 602 piensa, de repente golpean la puerta y abre lentamente.
—Sr 602–
—Adelante Jefe de Guerra–
—Para informar que estamos organizando varias formaciones de soldados en distintos puntos del planeta ante un eventual ataque de los independentistas–
—Retírese–
Al retirarse el Jefe de Guerra, se dirige a su oficina y en uno de sus bolsillos tenia una llave especial. Lo saca y lo mira fijamente y se queda pensativo.–
Luego se retira y recorre el cuartel hasta llegar a una entrada. Atraviesa la entrada y sigue caminando unos pasillos en forma de laberinto. Llega al fin del pasillo y se encuentra con una pared, haciendo unos movimientos en la misma y aparece la cerradura oculta. Utiliza la llave especial (solo existe una copia para el Gran General 601 y a través de una operación con complicidad de otros soldados, tiene es su poder una duplicada) y entra en un sala con objetos invaluables e increíblemente poco soñados para los Aña.
Atónito mira el gran tamaño de la habitación en que se encuentra.–
Con esos ojos cetrinos con una mirada malévola registrando cada unos de los estantes y pensando donde se encontraba ese libro que me llevaría a una cueva oculta.–
Después de un rato largo se decide a caminar, camina derecho luego dobla por la derecha y sigue su caminar hasta llegar un especie de baúl de un material que nunca vio.–
Como no tenía la llave para el baúl saca cuidadosamente de su dedo indice la uña falsa y tiene en su dedo su “llave maestra”, como dice siempre, y mira sus dos costados para asegurarse que no hay nadie y lo abre.–
—Esta muy bien oculto esto– dice.–
Dentro del baúl esta inundado de bolas de telgopor y mete la mano revolviendo hasta sentir con un objeto sólido.
—Esto debe ser lo que estoy buscando– y lo saca.–
En un momento de euforia acota – Reinos de los reinos todopoderoso, dios y amo Rey Berkusen –
—¡Si, lo he logrado!, no lo puedo creer que tenga el libro en mi poder– dice.–
—Ahora si podré investigar la famosa cueva que muy pocos sabemos de este rumo –
Cierra el baúl lentamente y deja todo como esta para no levantar sospechas.–
Al abrir la puerta de salida de la habitación se asegura que no haya nadie dando vueltas.–
Sale afuera y se dirige a su habitación para estar tranquilo y cuando sea el momento oportuno salir en la búsqueda de la gruta oculta e investigar si realmente es cierto.–
Pasadas las horas suena su despertador y se despierta, en madrugada se dispone a caminar sabiendo que hoy es su día libre.
Abre su placard y busca entre sus vestimenta la túnica marro nada.–
Sale de la habitación preocupado y asustado para no ser visto hacia allí.
—Con este libro me llevará hacia la gruta, es ahora o nunca–
Noche fría, oscura y solo se escuchaban gritos de aves autóctonos como gritos de cuervos pero más ruidoso.
Pasaron varias horas desde comenzó, caminos de ripio rodeado de mucha vegetación, animales peligrosos.–
—Creo que no estoy yendo por el lugar indicado– comentó
Observó una y otra vez las páginas del libro.
—En teoría tiene que estar por algún lado– dice casi en voz baja.–
—Mmmm ¿Dónde estará?, ¿Por dónde tengo que ir?–, se pregunta.–
—Juro que tiene que ser por acá y entre esa maraña de vegetación que se encuentra hacia al noroeste–
Convencido por su intuición camina hacia el noroeste metiéndose entre ese enredado vegetación y aparece un camino empantanado oculto.
Al finalizar, él camina y choca con una montaña de piedras y llegó a ver justo una entrada de casualidad un poco tapado por otras piedras.
—Debe ser por aquí, cosa que no figura en estas instrucciones–
Trepa y trepa con dificultad, el viento lo balancea de un lado para el otro. El clima se lo hace muy difícil poder llegar y de tanto esfuerzo llega.–
—¿Dónde me estaré metiendo?–
—¡He llegado, por fin!–
—Ya que estoy, entro y voy a echar un vistazo –
Cuando hace unos kilómetros se le ocurre sacar nuevamente el libro para ver si había más información y se encontró con la sorpresa que no tenía más datos al respecto.
Vuelve a guardárselo y en unos minutos posteriormente el libro por inexplicable razón de a poco se empieza encender por dentro y luego a expandirse.
—Siento mucho calor por dentro–
Desesperadamente abre la túnica y tira al piso el libro.–
Se queda mirándolo como poco a poco el libro se va consumiendo.
—¡Maldito Gran General!– grita con toda su furia
Sin poder hacer nada al respecto comienza su marcha y como si fuera poco empieza a escucharse voces, ecos, voces alejados y más ecos.
En momentos de incertidumbre el segundo del Gran General empieza a palparse por todos lados si lleva armas o algún objeto para defender de posible ataque, la voz en tanto le daba la sensación que se estaba acercando hacia él y una luz en las paredes a lo lejos se podía observar.
Pasan los minutos y el hombre en segundos le consumía el terror, los nervios con la impotencia de no saber donde se estaba metiendo y la luz por las paredes se acercaba más y más, las voces se hacia cada vez más fuertes y junto al eco no podía distinguir si eran 1, 2, 4 o miles de personas que se estaban acercando hacia él. Para colmo una manada de aves se le cruzaron.–
La intermitencia de la luz cada vez se hacia más claro, se agrandaba, cubría cada vez más la pared y las voces se acumulaban más y más de voces mientras tanto el Aña sufriendo con los ruidos y la luz que lo estaba cegando cada vez más y de repente............ las voces desaparecieron y las luz dejo de ser una ceguera para el.
Abre los ojos muy lento y se encuentra con una rara especie que viven en las paredes.–
Son solo tres de forma redondeada y con 2 plumas cada uno mitad blanco y rojo como si fueran pinturas rupestres.
—Te estábamos esperando Rikin Becker–