Читать книгу Las dudas existenciales - Alberto Guerendiain - Страница 6
ОглавлениеCAPÍTULO 1
Dudas-Incógnitas
Siempre ha existido, desde que el hombre es hombre, quienes dedican parte de su vida a pensar sobre las dudas existenciales, todo el tiempo que pueden, son filósofos, pensadores, estudiosos, místicos o religiosos, y una gran mayoría de los seres humanos solo piensan en ello muy de vez en cuando.
Hay una tercera categoría de seres humanos, que son los que han vivido muchos años y están entrando al ocaso de sus vidas y no pueden entender el porqué de su próxima desaparición física, piensan muy a menudo en las grandes dudas y enigmas de la vida. Los primeros generalmente filósofos de entrecasa, filósofos profesionales, seres muy instruidos y otros muy poco, pero con tiempo para sentarse a ver el amanecer o el atardecer, la luna, las estrellas, nuestro sol, pasan gran parte de su tiempo interesados en el porqué.
Los segundos son seres que viven al día, preocupados u ocupados en los temas económicos o de familia, interesados por crecer y progresar en sus ocupaciones o especialidades, pero no se preocupan por lo que no entienden ni pueden entender, ni les interesa perder el tiempo en buscar respuestas, aunque por supuesto los temas existenciales a veces los hacen meditar al respecto.
Los terceros, gente mayor, generalmente, con menos necesidades materiales y mucho tiempo para pensar en los años que les quedan y en el porqué de las cosas. El no entender el porqué de una vida de estudios, progreso y en que todo lo aprendido y guardado un día próximo dejará de existir, los obliga a meditar y pensar en las incógnitas existenciales. Esta gente aunque nunca se haya preocupado por ello, a esta edad quiere y necesita entender.
Las dudas e incógnitas Universales y existenciales son infinitas y solo para resumir enumeramos algunas de ellas.
Todos nosotros podríamos agregar muchas en las que hemos pensado y meditado y hasta hemos planteado alguna teoría, incomprobable, pero probable. Toda teoría que resuelva o intente resolver alguna de las dudas existenciales, podría ser cierta.
¿Por qué y para qué estamos?
¿De quién descendemos?
¿La teoría de la evolución de las especies está comprobada?
¿Cuál es la historia de la Tierra?
¿Cuál es nuestra historia en la tierra?
¿Pudo haber seres de otros planetas que nos crearan?
¿Cuán grande es el Universo?
¿Hay vida en otros planetas?
¿Cristo, Mahoma, Buda, y tantos otros, quienes fueron?
¿Existe vida después de la muerte?
¿Qué es el espíritu, qué es el alma?
¿Qué es el Big Bang?
¿Hasta cuándo se expandirá el Universo?
¿Puede haber posibilidades de que el Universo, se colapse?
¿Puede haber otros Universos posibles?
¿El tiempo varía con la velocidad?
¿Se puede viajar más rápido que la velocidad de la luz?
¿Cuantos mundos habitados habrá en nuestro Universo?
¿Qué tipo de seres habitarán esos mundos?
¿Si Dios nos creó, también creo a seres en otros planetas?
¿Por lo tanto habrá otros profetas como Jesús o Cristo en dichos planetas?
¿Qué son los agujeros negros?
¿Se podrá viajar dentro de ellos a velocidades superiores a la de la luz?
Y como estas muchas incógnitas más, inclusive, algunas que creemos que están resueltas, con nuestras leyes Físicas Químicas o Matemáticas que disponemos actualmente, podrían ser modificadas en el futuro, otras que están en etapa de investigación y otras que solo pueden ser respondidas en base a la fe religiosa, en las creencias o en la capacidad que tengamos para desarrollar una idea, no como resultado de investigaciones o demostración científica, sino en lo convincente que se pueda ser al comentarla o publicarla.
Existe hoy, por ejemplo, la teoría de las cuerdas, absolutamente indemostrable, por lo menos hasta hoy y de la que hablaremos en capítulos posteriores, en donde más del 60 % de los Físicos e investigadores creen en ella. La teoría estuvo muy bien planteada y explica lo que la Física clásica no puede explicar y quizás dentro de 10, 20 0 30 años se demuestre o sea un fracaso total y por lo tanto los miles de científicos que están trabajando en ella habrán perdido una generación investigando.
Encontramos infinidad de respuestas a nuestras incógnitas, pero cuán ciertas son esas respuestas. Nadie puede estar seguro, pues hasta nuestras leyes básicas pueden ser modificadas y en lo que respecta a creencias, religiones, alma, espíritu, vida después de la muerte y tantas otras, solo conjeturas, libros sagrados que no sabemos cuántas veces se modificaron por seres humanos en base a sus conveniencias o creencias particulares o política.
Las respuestas científicas, irán cambiando a medida que se desarrollen nuevas fórmulas y teorías que irán modificando nuestras realidades.
Solo daré un ejemplo muy conocido. Todos hemos leído a Newton (1642-1727), que basado en estudios de Galileo Galilei y Rene Descartes desarrollo su teoría de la ley de gravitación universal:
F= m(1) x m(2)/r2
Esta fórmula describe la interacción gravitatoria entre cuerpos dotados de masa.
La fuerza con que 2 masas se atraen es proporcional al producto de sus masas dividida por la distancia en que se encuentran al cuadrado.
A partir de cierta cantidad de masa esta ley pierde su validez (en caso de objetos súper masivos), la relatividad de Einstein de 1905 modificó la ley de Newton, por lo tanto muchas de las fórmulas Físicas o Químicas con las que demostramos con absoluta seguridad ciertos acontecimientos, podrían ser modificados en un futuro cercano.
Estas teorías Físicas, Matemáticas, Químicas, de Biología molecular, pueden intentarse demostrar y se producen avances diariamente en ellas. Hay cientos y miles de Científicos trabajando en ellas.
Las otras dudas, las verdaderas dudas, sobre nuestra existencia y la del Universo y por qué y para qué estamos hoy y aquí, cual es nuestro objetivo, si es que tenemos uno, son las que nos hacen meditar y pensar. En la historia de la humanidad existieron y existen gran cantidad de filósofos y pensadores tratando de encontrar las soluciones a dichas dudas.
Nuestra capacidad intelectual, nuestro desarrollo cerebral, es decir nuestro intelecto actual, no nos permite encontrar dichas soluciones, no logramos entender cómo nació el Universo, en donde apareció ese punto infinitesimal de Energía infinita que explotó y produjo el Big Bang, si antes de esa explosión no existía nada, ni lugar ni tiempo.
A medida que avancemos en el libro, intentaré ir explicando algunos de estos puntos, de acuerdo a mi pobre y muy poco desarrollado cerebro.
Pero no te preocupes, quizás en unos pocos miles de años todas estas inquietudes y dudas estarán resueltas, y seguramente nosotros estaremos de vuelta aquí para entender.
Por lo tanto, meditemos y pensemos constantemente sobre estos temas, lograremos avances mínimos, pero avances al fin. Algún día en ese futuro de algunos miles de años, entenderemos y según explico en este libro, estaremos allí, para verlo y entenderlo.