Читать книгу El pequeño doctor - Alfred Vogel - Страница 18
Catarros
ОглавлениеPuede ser que padezcas a menudo resfriados y catarros. Quizá dispongas en tu jardín de un abeto, un alerce, un pino o cualquier otra conífera. En estos árboles siempre encontrarás brotes germinados, desarrollándose o aún cerrados, preparándose para el año próximo. Recoge algunos de estos brotes y mastícalos lenta y detenidamente durante el día, tomando de vez en cuando un nuevo brote. Verás como el catarro desaparece a los pocos días. No te olvides de este sencillo remedio cuando te encuentres de paseo o esquiando. Por la noche, convendría que te colocaras un paño mojado en aceite alrededor del cuello y lo cubrieras con un paño de lana para mantener el calor. Verás como pronto desaparece la irritación que te hace toser.