Читать книгу Vicio - Carlos Sánchez Ortiz - Страница 9

Оглавление

Pero, ¿qué es una adicción?

“El término ‘adicción’, según la ley romana, significa la sumisión o capitulación a un dueño o amo. De hecho, se apelaba a la misma como la justificación de la esclavitud. Quizá sea esta una de las acepciones que, por poco conocida, no deja de ser relevante, ya que incide en uno de los aspectos principales de los procesos adictivos, que es la dependencia de un ‘amo’.

El amo puede ser el alcohol, los opiáceos o el juego y se precisa de él para conseguir un estado de bienestar (físico o mental), aunque lo normal y adaptativo sería poder alcanzarlo sin necesidad de tan oneroso señor.

La dependencia se completa cuando el objetivo no es conseguir placer sino superar el malestar que se produce por la privación de ese hábito.

En definitiva (y este es un aspecto singular que nos gustaría resaltar en primer lugar) las adicciones representan una de las formas más absurdas de atentar contra la libertad personal. Con independencia de las posibles causas que originan o facilitan la adicción, finalmente uno es dependiente de sus propias acciones”. 4

Tenemos un amo y, tal como lo menciona el libro Adicción al juego de azar de Mariano Chóliz, somos esclavos dependientes de una repetición instalada en nuestras cabezas, a la que hay que volver conscientes luego de un enorme esfuerzo por salir de ahí.

Vicio no es una verdad absoluta pero sí se basa en un principio de realidad a partir de testimonios reales y con sustento investigativo para contar lo que significa vivir en el vicio.

¿Qué pensamos? ¿Qué sentimos? ¿Cómo vivimos la realidad adicta?

¿Cómo somos? ¿Es cierto que lo espiritual ayuda mucho? ¿El odio acompaña al adicto? ¿Hay una verdad sobre traumas de la niñez no resueltos? ¿Existen componentes genéticos presentes?

Las adicciones generan muchas preguntas, pero son más las dudas que las certezas y, en especial, cuando sigue siendo un problema de salud pública a nivel mundial.

Entender el mundo del adicto no es fácil. Me atrevo a asegurar que solo nosotros podemos comprenderlo, porque lo hemos vivido y sabemos lo que significa estar atrapado en ese enredo de pensamientos siniestros y malditos.

Con este libro, primero como autor, quiero agradecerle a la vida por permitirme sanar a través de contar la vida tan compleja que tuve que vivir al ser adicto.

Si volviera a nacer les aseguro que bajo ninguna circunstancia escogería serlo. Si bien esa experiencia me permitió trascender y buscar mi parte espiritual, salir de allí fue muy difícil, considerando también el dinero que perdí en mis adicciones, que no solo fue para alimentar mis compulsiones sino para buscar salidas, con psicólogos y psiquiatras, pues pensaba que solo ellos podían resolver mis angustias existenciales, que durante muchos años fueron permanentes.

El adicto nunca dejará de serlo y de eso soy consciente. Acepto mi realidad, convivo con ella y solo podré liberarme totalmente cuando muera. He aprendido a convivir con mis adicciones y ya logré ponerme de acuerdo con mis pensamientos repetitivos.

La sociedad juzga y es implacable con el adicto pero, como muchas cosas en este planeta, se analizan las situaciones y vivencias de una manera superficial, donde la mayoría de la gente no tiene ni idea de lo que significa y menos sabe qué hacer en caso de tener que ‘lidiar’ con una persona cercana que sea adicta.

Lo más sencillo es criticarlo, asediarlo con preguntas, hacerlo sentir culpable, estúpido y desadaptado y enviarlo a un psiquiátrico o a un centro de rehabilitación.

Muchas veces las familias tienden a culpar a todos menos a ellas mismas, que suelen sentirse mal y disfrazan su dolor y su responsabilidad, achacando a situaciones externas los males que padece su ser cercano.

A través de este libro quiero compartirles mi experiencia. A diferencia de Desahógate, despierta ya, donde escribí un capítulo sobre adicciones, este texto desnudará lo que, considero, son las claves para salir de allí. Esta publicación estará dedicada a comprender la realidad con testimonios de otro tipo de adicciones, entrevistas a expertos y la posibilidad de mirar de frente a este mal.

Para aprender sobre el origen de la enfermedad, te invito a que conozcas de primera mano algunas posturas científicas y testimoniales que te impulsan a comprender más allá nuestra realidad.

“La persona adicta no es el ‘sujeto’ (menos el ‘objeto’), ni el ‘individuo’, ni el ‘paciente’, ni el ‘usuario’, ni el ‘consumidor’, tal como se le trata, no en el plano coloquial sino en el discurso académico y en los manuales científicos. Ciertamente puede querer decir todo eso pero desde luego va mucho más allá: la persona adicta, ante todo, y antes que adicta, es persona” (Revista Familia y Sociedad. Antropología de las Adicciones de José Luis Cañas).

Este libro es una invitación para que comprendas lo que significa ser adicto, lo seas o no.

Vicio

Подняться наверх