Читать книгу Catorce comentarios sobre la enfermedad de Alzheimer y otras demencias - Carme Aràjol - Страница 11
Оглавление1. Planificación anticipada de decisiones
Pinterest Núria Turbau
Una vez traspasado el umbral de la edad adulta sería aconsejable que, cuando la persona todavía está en buenas condiciones físicas y mentales, fuera pensando en planificar cómo quiere envejecer y cómo quiere morir.
Porque si en algún momento de su vida no está en condiciones de decidir, lo tenga todo plasmado en un documento firmado por ella, lo cual facilitará la toma de decisiones de las personas que están a su lado y a la vez se respetaran sus deseos.
En el estado español actualmente hay protocolos elaborados en las distintas comunidades autónomas que facilitan estas decisiones, como el Documento de decisiones anticipadas semFYC (2) o el Pla de decisions anticipades GEN.CAT (3), entre otros.
Para las personas enfermas de Alzheimer y otras demencias, sería bueno que cuando estuviesen en plenitud de facultades firmasen un documento de esta categoría, en su pleno uso de razón; ya que una vez adquirida la enfermedad no siempre es fácil tomar decisiones por parte de las personas responsables legales de la persona enferma puesto que ésta no está en condiciones de dar su opinión ni de decidir.
En caso que este documento no se haya elaborado, el familiar responsable será el que tome todas las decisiones con el apoyo de los profesionales respectivos: médico de cabecera, neurólogo etc.
Sin embargo, en las primeras fases de la enfermedad, cuando la persona enferma todavía razona, si no existe este documento de decisiones anticipadas, sería conveniente que el familiar que está a su cargo, le preguntara sobre la manera que le gustaría que lo trataran si llega un momento que ella no puede decidir sobre diversos temas, como ingresar en una residencia, o si se encuentra en una situación médica terminal , si prefiere que lo ingresen en el hospital o prefiere quedarse en donde está, sea la casa o en la residencia y morir tranquilamente en su cama, etc.
Mi experiencia
En mi caso, mi madre no había preparado ningún documento de este tipo, entre otras cosas porque en su época estos protocolos se usaban muy poco; en algunas comunidades aún no los tenían elaborados y en otras eran muy recientes y no eran populares; por todo ello tuve que decidir, junto con mis hermanos, todos los temas de salud y recursos necesarios para ella, y en el caso del ingreso en la residencia contamos con el apoyo del neurólogo de mi madre.
Es por ello que tomamos todas las decisiones con la mejor intención para que ella estuviera bien, como por ejemplo ingresarla en una residencia y otras.
Cuando se acercó el momento de su muerte, la directora de la residencia me explicó que mi madre estaba en una situación terminal, aunque no tenía ninguna complicación médica concreta, y me preguntó si prefería que la llevaran al hospital o que se quedara en la residencia para pasar sus últimos días, yo le respondí que quería que se quedara en la residencia tranquila hasta que llegara el momento de irse, ya que ella se encontraba muy bien allí y para ella la residencia era su casa, puesto que así me lo había manifestado en alguna ocasión.
Yo tomé la decisión por ella en aquel momento, pero tuve en cuenta lo que ella me había dicho unos años antes cuando ya estaba viviendo en la residencia y todavía hablaba, aunque ya no razonaba bien.
Un dia en un momento de lucidez cuando ella estaba acostada en su cama a punto de dormirse, y yo estaba a su lado acariciándola me dijo lo siguiente: “a fuera pasan muchas cosas, pero no me interesan, yo estoy muy bien aquí, esta es mi casa”.
Tuve en cuenta estas palabras y respeté su deseo, lo cual fue muy bueno para ella porqué murió muy tranquila y feliz en su cama.
Reflexión
Actualmente está mucho más al alcance de todos tomar decisiones anticipadas sobre nuestro futuro.
Ante un deterioro físico o mental, sería importante que todos nos concienciáramos de elaborar y firmar este documento de planificación anticipada de decisiones, ya que da mucha tranquilidad a los familiares de la persona enferma porque pueden respetar su voluntad.