Читать книгу Las bellas artes reducidas a un principio único - Charles Batteux - Страница 9

PARTE 1

Оглавление

EN LA QUE SE ESTABLECE

LA NATURALEZA DE LAS ARTES A PARTIR

DE LA NATURALEZA DEL GENIO QUE LAS PRODUCE

Poco es el orden que reina en la manera de tratar las bellas artes. Veámoslo por medio de la poesía. Se [2] cree dar una idea adecuada de la misma diciendo que abarca todas las artes: es un compuesto de pintura, de música y de elocuencia.

Como la elocuencia, habla, prueba, narra. Como la música, tiene un curso regulado, tonos y cadencias, cuya mezcla forma una especie de concierto. Como la pintura, dibuja objetos: expande colores, mezcla todos los matices de la naturaleza. En una palabra, utiliza los colores y el pincel, emplea la melodía y los acordes, muestra la verdad y sabe hacerla amable.

La poesía abarca todo tipo de materias: se encarga de lo más brillante que hay en la historia, entra en los campos de la filosofía, se eleva hasta el cielo para admirar la marcha de los astros, se sumerge en los abismos [3] para examinar los secretos de la naturaleza, se introduce entre los muertos para ver las recompensas de los justos y los suplicios de los impíos: comprende todo el universo. Si este mundo no le basta, crea mundos nuevos, que embellece con moradas encantadas, pobladas por mil habitantes diversos. Ahí compone seres a su gusto; no engendra nada que no sea perfecto, sobrepasa todas las producciones de la naturaleza; es una especie de magia: ofrece ilusión a los ojos, a la imaginación, al mismo espíritu; y consigue darles a las personas placeres reales mediante invenciones quiméricas. Así es como la mayoría de autores han hablado de la poesía; y, más o menos, han dicho lo mismo de las demás artes.

Poseídos por la valía de las artes a las que se habían dedicado, nos han ofrecido descripciones [4] pomposas de ellas, pero ni una sola definición precisa como se les pedía; o bien, cuando han tratado de definírnoslas, como la naturaleza es de por sí muy complicada, a veces han tomado lo accesorio por lo esencial y lo esencial por lo accesorio. Otras veces incluso, arrastrados por cierto interés de autor, han aprovechado la oscuridad de la materia y nos han ofrecido ideas, formadas a partir del modelo de sus propias obras.

No nos vamos a detener aquí para refutar las diferentes opiniones que hay sobre la esencia de las artes y, sobre todo, de la poesía: empezaremos por establecer nuestro principio y, una vez bien probado, con las pruebas que lo han establecido se convertirán en la refutación de las demás opiniones.

Las bellas artes reducidas a un principio único

Подняться наверх