Читать книгу La música que agrada a Dios - Daniel Oscar Plenc - Страница 5
Introducción
ОглавлениеNunca hubo un tiempo en que las iglesias tuvieran a su alcance más recursos para el desarrollo de un Ministerio de la Música que ahora. Los instrumentos cuentan cada vez con mayores posibilidades; y la musicología ha estado haciendo continuos aportes. A su vez, muchas congregaciones enfrentan tensiones relacionadas con los estilos de música destinados a la adoración corporativa. Algunas de estas situaciones están expresadas, por ejemplo, en la obra de Miguel Ángel Palomino acerca del culto evangélico latinoamericano.1 El autor explora dos hipótesis: (1) que el actual Movimiento de Renovación de la Alabanza contribuye a la desaparición de las fronteras confesionales, a la pérdida de identidad y de fidelidad a la iglesia local, y a la “migración religiosa”; y (2) que la forma del culto evangélico ha recibido el impacto de la cultura mediática, que afectó el sentido y la naturaleza del culto.
Estos ensayos litúrgicos y musicales en boga producen, en muchos casos, intranquilidad personal, conflictos eclesiales y preocupación pastoral. Pero, sobre todo, exponen la necesidad de un criterio bíblico, teológico y pastoral adecuado, que permita orientar las prácticas y las propuestas musicales destinadas a la liturgia. Este fundamento teológico pareciera no ser suficientemente claro para la comunidad cristiana, para los líderes de iglesia y para quienes se preparan para el ministerio. La problemática en estudio se relaciona, entonces, con tres áreas significativas: (1) La comprensión bíblica y teológica acerca de la música cristiana, (2) la aceptación respecto del lugar y del propósito de la música en el culto, y (3) la adopción de un criterio pastoral y eclesial para el Ministerio de la Música, en las congregaciones locales y en las instituciones confesionales.
La revisión de la bibliografía disponible permite inferir que el tratamiento de la música cristiana en la teología adventista se limita, básicamente, a cuestiones litúrgicas y prácticas, más que al desarrollo de un criterio teológico para el Ministerio de la Música.2 Ciertos autores han avanzado hacia una evaluación de las implicaciones espirituales de la música.3Respecto de las pautas eclesiales para el Ministerio de la Música, pueden encontrarse orientaciones en los manuales de la iglesia, en las guías para los ministros y en los documentos oficiales. Existen trabajos que abordan la evolución histórica de la música de iglesia o los desafíos de la música cristiana contemporánea.4 Varios investigadores han realizado trabajos de teología bíblica y pastoral sobre esta temática, tanto como presentaciones de las enseñanzas de Elena de White.5 Sin embargo, existen pocos esfuerzos dirigidos a un abordaje teológico de la música de la iglesia;6 por lo que persiste la necesidad de elaborar un criterio teológico orientador para el Ministerio de la Música en la iglesia contemporánea.
La presente investigación, descriptiva y analítica, mayormente bibliográfica, se acercará al tema de la música cristiana congregacional desde la teología bíblica, histórica, sistemática y pastoral. Comenzará con una descripción panorámica de la música en las Escrituras, deteniéndose en sus instrumentos musicales, en los propósitos evidentes de la actividad musical, para insinuar, finalmente, una teología bíblica respecto de la música. El abordaje histórico se limitará a la comprensión de la música para la iglesia tal como se observa en los extensos escritos de Elena de White, en la producción de himnarios y en los documentos elaborados por la iglesia. A continuación, se efectuará un ensayo teórico sobre la música eclesiástica desde una perspectiva sistemática, desprendiéndose de allí algunas aplicaciones prácticas. Los estudios anteriores confluirán en una mirada hacia la música de la iglesia desde la óptica pastoral, proponiendo un Ministerio de la Música que pueda moverse, dentro de un marco adecuado, en favor de la liturgia y de la vitalidad de la iglesia.
Esta mirada particular hacia el arte de la música cristiana se expone a riesgos de críticas inevitables, debido a la carencia reconocida de una estética cristiana o de una teología del arte eclesiástico. Ya desde mediados del siglo anterior decía Dorothy Sayers, de Oxford: “Mas, por extraño que parezca, no poseemos ninguna estética cristiana, ninguna filosofía cristiana relacionada con las artes. La iglesia, como un todo, nunca se decidió en cuanto a la cuestión de las artes, y es muy difícil afirmar que ella nunca lo ha intentado”.7 Por lo tanto, como lo expresara Wolfgang Hans Martin Stefani: “Ciertamente, parece que la ausencia de una filosofía cristiana global de las artes es aún visiblemente manifiesta en la manera en que la iglesia cristiana ha abordado la selección de la música de adoración en la última década”.8
Debe reconocerse, entonces, que buscar una teología del arte en general, y de la música religiosa en especial, es una tarea tanto esquiva como necesaria.9 Existe una comprensible resistencia a todo intento de juzgar el arte con los anteojos de la teología; y, por otra parte, es imperativa la búsqueda de una base teológica para una actividad tan relevante para la comunidad eclesial como lo es la música destinada al culto. Se trata de una tarea escasamente realizada, e importante como un aporte luminoso y fundamentado a las discusiones actuales sobre el tema.
1 Miguel Ángel Palomino, ¿Qué pasó con el culto en América Latina? La adoración en las iglesias evangélicas (Lima, Perú: Ediciones Puma, 2011).
2 Un ejemplo se ofrece en ciertos materiales preparados por las Divisiones Interamericana y Sudamericana de la Iglesia Adventista del Séptimo Día: Departamento de Música de la División Sudamericana, La música en la iglesia, vehículo de adoración y loor (Buenos Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana, 1999); J. Francisco Stout Villalón, Funciones de la música en la iglesia adventista del séptimo día (Miami, Florida: Asociación Publicadora Interamericana, 1999). Véanse los números especiales que se han publicado en los últimos años respecto del culto y de la música: Ministry, October 1991 (Ministerio adventista, julio-agosto 1992); Ministry, September 1996 (Ministerio adventista, noviembre-diciembre 1996); Adventists Affirm 12, Nº 1 (Spring 1998); Adventists Affirm 13, Nº 1 (Spring 1999).
3 Véase, por ejemplo: Dario Pires de Araújo, Música, adventismo e eternidade, 4ª ed. (Sao Paulo: Alfa, 2007); A. Joseph Kidder, Majesty: Experiencing Authentic Worship (Hagerstown, MD: Review and Herald, 2009).
4 Véanse los trabajos de: Donald P. Hustad, ¡Regocijaos!: la música cristiana en la adoración, trad. Olivia de Lerín, Bonnie de Martínez, J. Bruce Muskrat, Josie de Smith y Ann Marie Swenson (El Paso, Texas: Casa Bautista de Publicaciones, 1998); Robert E. Webber, ed., Music and the Arts in Christian Worship (Nashville, Tennessee: Star Song, 1994); Samuele Bacchiocchi, ed., La música rock y el cristiano: un estudio acerca de los principios bíblicos de la música, trad. Rolf Baier Schmidt (Berrien Springs, Michigan: Biblical Perspectives, 2004); Louis R. Torres y Carol Reinke A. Torres, Notas sobre música, trad. Elsa Schulz (Siloam Springs, Arkansas: Creation Enterprises International, 1992); Lilianne Doukhan, In Tune With God (Hagerstown, MD: Review and Herald, 2010).
5 Véanse: Francis D. Nichol, ed., Comentario bíblico adventista del séptimo día, trad. V. E. Ampuero Matta, 7 vols. (Boise, Idaho: Publicaciones Interamericanas, 1978-1990); Alfred Küen, La música en la Biblia y en la iglesia (Terrassa, Barcelona: Clie, 1992); Doukhan, In Tune With God; Harold Byron Hannum, Music and Worship (Nashville, Tennessee: Southern Publishing Association, 1969); Paul Hamel, Ellen White and Music: Background and Principles (Washington: Review and Herald, 1976); Daniel Oscar Plenc, “Hacia una teología de la música sacra en los escritos de Elena G. de White”, Cathedra: Revista de investigación. Departamento de Investigación de la Universidad Peruana Unión, Juliaca, t. I, Nº 1 (2007) pp. 6-15.
6 Un buen ejemplo es la investigación de Wolfgang Hans Martin Stefani, “The Concept of God and Sacred Music Style: An Intercultural Exploration of Divine Transcendence/Immanence as a Stylistic Determinant for Worship Music with Paradigmatic Implications for the Contemporary Christian Context”, tesis de Doctorado en Teología, Andrews University School of Education (Berrien Springs, Michigan: 1993).
7 Dorothy L. Sayers, “Toward a Christian Aesthetic”, Christian Letters to a Post-Christian World: A Selection of Essays (Grand Rapids, Michigan: William B. Eerdmans Publishing Company, 1969), pp. 69, 70; citado en Wolfgang Hans Martin Stefani, Música sacra, cultura y adoración, trad. Fernanda Caroline de Andrade (Engenheiro Coelho, SP: Imprensa Universitaria Adventista, 2002), p. 9.
8 Stefani, Música sacra, cultura y adoración, p. 9.
9 Véase: John Wesley Taylor V, “Un enfoque cristiano para las artes”, Revista de educación adventista, Nº 30 (2010), pp. 18-22.