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[LA CELESTINA]
ARGUMENTO DEL PRIMER AUTO DESTA COMEDIA

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Entrando Calisto vna huerta empos de un falcon suyo hallo y a Melibea de cuyo amor preso comenzole de hablar: de la qual rigorosamente despedido: fue para su casa muy sangustiado. hablo con vn criado suyo llamado Sempronio. el qual despues de muchas razones le enderezo a vna vieja llamada Celestina: en cuya casa tenia el mesmo criado vna enamorada llamada Elicia: la qual viniendo Sempronio a casa de Celestina con el negocio de su amo tenia a otro consigo llamado Crito: al qual escondieron. Entretanto que Sempronio esta negociando con Celestina: Calisto esta razonando con otro criado suyo por nombre Parmeno: el qual razonamiento dura fasta que llega Sempronio e Celestina a casa de Calisto. Parmeno fue conoscido de Celestina: la qual mucho le dize de los fechos e conoscimiento de su madre induziendole a amor e concordia de Sempronio.

CALISTO. MELIBEA. SEMPRONIO. CELESTINA. ELICIA. CRITO. PARMENO

CALISTO.—En esto veo, Melibea, la grandeza de dios. MELIBEA.—en que, Calisto? CAL.—en dar poder a natura que de tan perfeta hermosura te dotasse: e fazer a mi inmerito tanta merced que verte alcanzasse: e en tan conueniente lugar que mi secreto dolor manifestarte pudiesse. sin dubda encomparablemente es mayor tal galardon que el seruicio: sacrificio: deuocion e obras pias que por este lugar alcanzar tengo yo a dios ofrescido. Ni otro poder mi voluntad humana puede conplir. quien vido en esta vida cuerpo glorificado de ningun hombre como agora el mio? Por cierto los gloriosos sanctos que se deleytan en la vision diuina no gozan mas que yo agora en el acatamiento tuyo. Mas, o triste, que en esto deferimos: que ellos puramente se glorifican sin temor de caer de tal bienauenturanza: e yo misto me alegro con recelo del esquiuo tormento que tu absencia me ha de causar. MELIB.—por grand premio tienes esto, Calisto? CAL.—tengolo por tanto en verdad, que si dios me diesse en el cielo la silla sobre sus sanctos, no lo ternia por tanta felicidad. MELIB.—pues avn mas ygual galardon te dare yo, si perseueras. CAL.—o bienauenturadas orejas mias, que indignamente tan gran palabra haueys oydo. MELIB.—mas desauenturadas de que me acabes de oyr: porque la paga sera tan fiera qual la merece tu loco atreuimiento; e el intento de tus palabras, Calisto, ha seydo: de ingenio de tal hombre como tu, hauer de salir para se perder en la virtud de tal muger como yo. Vete, vete de ay, torpe: que no puede mi paciencia tollerar que aya subido en corazon humano comigo el ylicito amor comunicar su deleyte. CAL.—yre como aquel contra quien solamente la aduersa fortuna pone su estudio con odio cruel. Sempronio: Sempronio: Sempronio: donde esta este maldito? SEMPRONIO.—aqui estoy, senor, curando destos cauallos. CAL.—pues como sales de la sala? SEMP.—abatiose el girifalte, e vinele enderezar en el alcandara. CAL.—assi los diablos te ganen: assi por infortunio arrebatado perezcas / o perpetuo intollerable tormento consigas: el qual en grado incomparable a la penosa e desastrada muerte que espero traspassa. Anda, anda, maluado, abre la camara e endereza la cama. SEMP.—senor, luego. hecho es. CAL.—cierra la ventana e dexa la tiniebla acompanar al triste, e al desdichado la ceguedad: mis pensamientos tristes no son dignos de luz. O bienauenturada muerte aquella que deseada a los afligidos viene. O si viniessedes agora, Eras e Crato, medicos, sentiriades mi mal. O piedad de silencio, inspira en el Pleberico corazon: porque sin esperanza de salud no embie el espiritu perdido con el desastrado Piramo e de la desdichada Tisbe. SEMP.—que cosa es? CAL.—vete de ay, no me fables: sino quiza ante del tiempo de mi rabiosa muerte mis manos causaran tu arrebatado fin. SEMP.—yre, pues solo quieres padecer tu mal. CAL.—ve con el diablo. SEMP.—no creo, segun pienso, yr comigo el que contigo queda. O desauentura. O subito mal: qual fue tan contrario acontescimiento que assi tan presto robo el alegria deste hombre: e lo que peor es, junto con ella el seso? dexarle he solo? o entrare alla? Si le dexo, matarse ha. si entro alla, matarme ha. Quedese, no me curo: mas vale que muera aquel a quien es enojosa la vida: que no yo, que huelgo con ella. Avnque por al no deseasse viuir: sino por ver a mi Elicia me deuria guardar de peligros. pero si se mata sin otro testigo: yo quedo obligado a dar cuenta de su vida. Quiero entrar. Mas puesto que entre, no quiere consolacion ni consejo. asaz es senal mortal no querer sanar. Con todo, quierole dexar vn poco: desbraue. madure. que oydo he dezir que es peligro abrir o apremiar las postemas duras: porque mas se enconan. este vn poco. dexemos llorar al que dolor tiene: que las lagrimas e sospiros mucho desenconan el corazon dolorido. E avn si delante me tiene, mas comigo se encendera. que el sol mas arde donde puede reuerberar. la vista a quien objecto no se antepone, cansa: e quando aquel es cerca, aguzase: por esso quierome sofrir vn poco: si entretanto se matare: muera. quiza con algo me quedare que otro no lo sabe: con que mude el pelo malo. Avnque malo es esperar salud en muerte agena. Y quiza me engana el diablo: e si muere matarme han: e yran alla la soga e el calderon. Por otra parte dizen los sabios que es grande descanso a los afligidos tener con quien puedan sus cuytas llorar. Y que la llaga interior mas empece. Pues en estos estremos en que estoy perplexo: lo mas sano es entrar e sofrirle e consolarle: porque si possible es sanar sin arte ni aparejo: mas ligero es guarescer por arte: e por cura. CAL.—Sempronio. SEMP.—senor. CAL.—dame aca el laud. SEMP.—senor, vesle aqui. CAL.—qual dolor puede ser tal: que se yguale con mi mal? SEMP.—destemplado esta esse laud. CAL.—como templara el destemplado? como sentira el armonia aquel que consigo esta tan discorde? aquel a quien la voluntad a la razon no obedece? quien tiene dentro del pecho aguijones, paz: guerra: tregua: amor: enemistad: injurias, pecados: sospechas, todo a vna causa? Pero tane e canta la mas triste cancion que sepas. SEMP.—mira Nero de Tarpeya a Roma como se ardia: gritos dan ninos e viejos: e el de nada se dolia. CAL.—mayor es mi fuego: e menor la piedad de quien yo agora digo. SEMP.—no me engano yo, que loco esta este mi amo. CAL.—que estas murmurando, Sempronio? SEMP.—no digo nada. CAL.—di lo que dizes, no temas. SEMP.—digo que como puede ser mayor el fuego que atormenta vn viuo, que el que quemo tal cibdad e tanta multitud de gente? CAL.—como? yo te lo dire: mayor es la llama que dura ochenta anos que la que en vn dia passa: e mayor la que mata vna anima que la que quema cient mill cuerpos. Como de la aparencia a la existencia: como de lo viuo a lo pintado: como de la sombra a lo real: tanta diferencia ay del fuego que dizes al que me quema. Por cierto si el del purgatorio es tal: mas querria que mi spiritu fuesse con los de los brutos animales: que por medio de aquel yr a la gloria de los sanctos. SEMP.—algo es lo que digo. a mas ha de yr este hecho: no basta loco, sino ereje. CAL.—no te digo que fables alto quando fablares? Que dizes? SEMP.—digo que nunca dios quiera tal: que es especie de heregia lo que agora dixiste. CAL.—porque? SEMP.—porque lo que dizes contradize la cristiana religion. CAL.—que a mi? SEMP.—tu no eres cristiano? CAL.—yo? Melibeo soy. e a Melibea adoro e en Melibea creo: e a Melibea amo. SEMP.—tu te lo diras. como Melibea es grande: no cabe en el corazon de mi amo: que por la boca le sale a borbollones. No es mas menester: bien se de que pie coxqueas: yo te sanare. CAL.—increyble cosa prometes. SEMP.—antes facil. Que el comienzo de la salud es conoscer hombre la dolencia del enfermo. CAL.—qual consejo puede regir lo que en si no tiene orden ni consejo? SEMP.—ha ha ha. esto es el fuego de Calisto? Estas son sus congoxas? Como si solamente el amor contra el asestara sus tiros. O soberano dios, quan altos son tus misterios. Quanta premia pusiste en el amor: que es necessaria turbacion en el amante. Su limite posiste por marauilla: paresce al amante que atras queda. todos passan, todos rompen: pungidos e esgarrochados como ligeros toros: sin freno saltan por las barreras. Mandaste al hombre por la muger dexar el padre e la madre: agora no solo aquello, mas a ti e a tu ley desamparan, como agora Calisto, del qual no me marauillo: pues los sabios, los santos, los profetas por el te oluidaron. CAL.—Sempronio. SEMP.—senor. CAL.—no me dexes. SEMP.—de otro temple esta esta gayta. CAL.—que te paresce de mi mal? SEMP.—que amas a Melibea. CAL.—e no otra cosa? SEMP.—harto mal es tener la voluntad en vn solo lugar catiua. CAL.—poco sabes de firmeza. SEMP.—la perseuerancia en el mal no es constancia mas dureza / o pertinacia la llaman en mi tierra. Vosotros los filosofos de Cupido llamalda como quisierdes. CAL.—torpe cosa es mentir "el" que ensena a otro; pues que tu te precias de loar a tu amiga Elicia. SEMP.—haz tu lo que bien digo: y no lo que mal hago. CAL.—que me reprobas? SEMP.—que sometes la dignidad del hombre a la imperfecion de la flaca muger. CAL.—muger? o grossero: dios, dios! SEMP.—e assi lo crees, o burlas? CAL.—que burlo? por dios la creo: por dios la confiesso: e no creo que ay otro soberano en el cielo, avnque entre nosotros mora. SEMP.—ha ha ha. oystes que blasfemia? vistes que ceguedad? CAL.—de que te ries? SEMP.—riome: que no pensaua que hauia peor inuencion de pecado que en Sodoma. CAL.—como? SEMP.—porque aquellos procuraron abominable vso con los angeles no conocidos: e tu con el que confiessas ser dios. CAL.—maldito seas, que fecho me has reyr, lo que no pense ogano. SEMP.—pues que: toda tu vida auias de llorar? CAL.—si. SEMP.—porque? CAL.—porque amo a aquella, ante quien tan indigno me hallo: que no la espero alcanzar. SEMP.—o pusilanimo: o fideputa! que Nembrot: que magno Alexandre: los quales no solo del senorio del mundo: mas del cielo se juzgaron ser dignos. CAL.—no te oy bien esso que dixiste; torna, dilo, no procedas. SEMP.—dixe que tu, que tienes mas corazon que Nembrot ni Alexandre, desesperas de alcanzar vna muger. muchas de las quales en grandes estados constituydas se sometieron a los pechos e resollos de viles azemileros: e otras a brutos animales: no has leydo de Pasife con el toro? de Minerua con el can? CAL.—no lo creo, hablillas son. SEMP.—lo de tu abuela con el ximio, hablilla fue? testigo es el cuchillo de tu abuelo. CAL.—maldito sea este necio, e que porradas dize. SEMP.—escoziote? lee los ystoriales: estudia los filosofos: mira los poetas: llenos estan los libros de sus viles e malos exemplos: e de las caydas que leuaron los que en algo, como tu, las reputaron. Oye a Salomon: do dize que las mugeres e el vino hazen a los hombres renegar. consejate con Seneca e veras en que las tiene. escucha al Aristoteles: mira a Bernardo: gentiles: judios: cristianos: e moros: todos en esta concordia estan. Pero lo dicho e lo que dellas dixere: no te contezca error de tomarlo en comun, que muchas houo: y ay sanctas e virtuosas e notables cuya resplandesciente corona quita el general vituperio. Pero destas otras, quien te contaria sus mentiras: sus trafagos: sus cambios: su liuiandad: sus lagrimillas: sus alteraciones: sus osadias? que todo lo que piensan, osan sin deliberar: sus dissimulaciones: su lengua: su engano: su oluido: su desamor: su ingratitud: su inconstancia: su testimoniar: su negar: su reboluer: su presuncion: su vanagloria: su abatimiento: su locura: su desden: su soberuia: su subjecion: su parleria: su golosina: su luxuria e suziedad. su miedo: su atreuimiento: sus hechizerias: sus embaymientos: sus escarnios: su deslenguamiento: su desuerguenza: su alcahueteria. Considera que sesito esta debaxo de aquellas grandes e delgadas tocas: que pensamientos so aquellas gorgueras: so aquel fausto: so aquellas largas e autorizantes ropas. Que imperficion: que aluanares debaxo de templos pintados. Por ellas es dicho: arma del diablo: cabeza de pecado: destruycion de parayso. No has rezado en la festiuidad de Sant Juan baptista, do dize: las mugeres e el vino hazen los hombres renegar: do dize esta es la muger, antigua malicia que a Adam echo de los deleytes de parayso? Esta el linaje humano metio en el infierno. A esta menosprecio Helias propheta &c.? CAL.—di pues, esse Adam. esse Salomon. esse Dauid. esse Aristoteles. esse Vergilio. essos que dizes, como se sometieron a ellas: soy mas que ellos? SEMP.—a los que las vencieron querria que remedasses: que no a los que dellas fueron vencidos. Huye de sus enganos. Sabes que fazen? cosa que es dificil entenderlas. No tienen modo. no razon. no intencion. Por rigor comienzan el ofrescimiento que de si quieren hazer. A los que meten por los agujeros: denuestan en la calle. Combidan. despiden. llaman. niegan. senalan amor. pronuncian enemiga. Ensananse presto. apaciguanse luego. Quieren que adeuinen lo que quieren. O que plaga. o que enojo. o que fastio es conferir con ellas: mas de aquel breue tiempo que son aparejadas "a" deleyte. CAL.—ve; mientra mas me dizes e mas inconuenientes me pones: mas la quiero: no se que se es. SEMP.—no es este juyzio para mozos segun veo: que no se saben a razon someter: no se saben administrar: miserable cosa es pensar ser maestro el que nunca fue discipulo. CAL.—y tu que sabes? quien te mostro esto? SEMP.—quien? ellas; que desque se descubren, assi pierden la verguenza: que todo esto e avn mas a los hombres manifiestan. Ponte pues en la medida de honrra: piensa ser mas digno de lo que te reputas. Que cierto peor estremo es dexarse hombre caer de su merescimiento: que ponerse en mas alto lugar que deue. CAL.—pues quien yo para esso? SEMP.—quien? lo primero eres hombre: e de claro ingenio: e mas, a quien la natura doto de los mejores bienes que tuuo. Conuiene a saber: fermosura. gracia. grandeza de miembros. fuerza. ligereza. e allende desto, fortuna medianamente partio contigo lo suyo: en tal quantidad: que los bienes que tienes de dentro con los de fuera resplandescen: porque sin los bienes de fuera, de los quales la fortuna es senora: a ninguno acaece en esta vida ser bienauenturado: e mas, a constelacion de todos eres amado. CAL.—pero no de Melibea. E en todo lo que me as gloriado, Sempronio: sin proporcion ni comparacion se auentaja Melibea. Miras la nobleza e antiguedad de su linaje? El grandissimo patrimonio? el excelentissimo ingenio? las resplandescientes virtudes? la altitud e enefable gracia? la soberana hermosura? de la qual te ruego me dexes hablar vn poco: porque aya algun refrigerio. Y lo que te dixere sera de lo descubierto: que si de lo oculto yo hablarte supiera: no nos fuera necessario altercar tan miserablemente estas razones. SEMP.—que mentiras e que locuras dira agora este cautiuo de mi amo? CAL.—como es esso? SEMP.—dixe que digas, que muy gran plazer haure de lo oyr. Assi te medre dios: como me sera agradable esse sermon. CAL.—que? SEMP.—que assi me medre dios como me sera gracioso de oyr. CAL.—pues porque ayas plazer: yo lo figurare por partes mucho por estenso. SEMP.—duelos tenemos: esto es tras lo que yo andaua. De passarse haura ya esta importunidad. CAL.—comienzo por los cabellos. Vees tu las madexas del oro delgado que hilan en Arabia? mas lindos son e no resplandescen menos: su longura hasta el postrero assiento de sus pies: despues crinados e atados con la delgada cuerda como ella se los pone: no ha mas menester para conuertir los hombres en piedras. SEMP.—mas en asnos. CAL.—que dizes? SEMP.—dixe que essos tales no serian cerdas de asno. CAL.—veed que torpe e que comparacion? SEMP.—tu cuerdo? CAL.—los ojos verdes rasgados: las pestanas luengas: las cejas delgadas e alzadas: la nariz mediana: la boca pequena: los dientes menudos e blancos: los labrios colorados e grosezuelos: el torno del rostro poco mas luengo que redondo: el pecho alto: la redondeza e forma de las pequenas tetas: quien te la podra figurar? que se despereza el hombre quando las mira. la tez lisa lustrosa. el cuero suyo escurece la nieue: la color mezclada qual ella la escogio para si. SEMP.—en sus treze esta este necio. CAL.—las manos pequenas en mediana manera: de dulce carne acompanadas: los dedos luengos, las vnas en ellos largas e coloradas que parescen rubies entre perlas. Aquella proporcion que veer yo no pude: no sin duda por el bulto de fuera juzgo incomparablemente ser mejor que la que Paris juzgo entre las tres deesas. SEMP.—has dicho? CAL.—quan breuemente pude. SEMP.—puesto que sea todo esso verdad: por ser tu hombre eres mas digno. CAL.—en que? SEMP.—en que ella es imperfeta: por el qual defeto desea e apetece a ti e a otro menor que tu. No as leydo el filosofo do dize: assi como la materia apetece a la forma: asi la muger al varon? CAL.—o triste, e quando vere yo esso entre mi e Melibea. SEMP.—possible es: y avnque la aborrezcas quanto agora la amas: podra ser alcanzandola: e viendola con otros ojos libres del engano en que agora estas. CAL.—con que ojos? SEMP.—con ojos claros. CAL.—e agora, con que la veo? SEMP.—con ojos de alinde: con que lo poco parece mucho, e lo pequeno grande. E porque no te desesperes: yo quiero tomar esta empresa de complir tu desseo. CAL.—o dios te de lo que desseas: que glorioso me es oyrte: avnque no espero que lo has de hazer. SEMP.—antes lo hare cierto. CAL.—dios te consuele. El jubon de brocado que ayer vesti, Sempronio, vistetele tu. SEMP.—prosperete dios por este e por muchos mas que me daras. De la burla yo me lleuo lo mejor: con todo, si destos aguijones me da, traergela he hasta la cama. Bueno ando! hazelo esto que me dio mi amo: que sin merced, impossible es obrarse bien ninguna cosa. CAL.—no seas agora negligente. SEMP.—no lo seas tu: que impossible es fazer sieruo diligente el amo perezoso. CAL.—como has pensado de fazer esta piedad? SEMP.—yo te lo dire. Dias ha grandes que conozco en fin desta vezindad vna vieja barbuda que se dize Celestina, hechizera, astuta, sagaz en quantas maldades ay. Entiendo que passan de cinco mill virgos: los que se han hecho e deshecho por su auctoridad en esta cibdad. A las duras penas promouera e prouocara a luxuria si quiere. CAL.—podriala yo fablar? SEMP.—yo te la traere hasta aca. por esso aparejate. seyle gracioso: seyle franco. estudia, mientra vo yo, de le dezir tu pena: tan bien como ella te dara el remedio. CAL.—y tardas? SEMP.—ya voy: quede dios contigo. CAL.—y contigo vaya. O todopoderoso, perdurable dios! tu que guias los perdidos: e los reyes orientales por el estrella precedente a Belen truxiste: e en su patria los reduxiste: humilmente te ruego que guies a mi Sempronio: en manera que conuierta mi pena e tristeza en gozo: e yo indigno merezca venir en el deseado fin. CELESTINA.—albricias, albricias, Elicia. Sempronio, Sempronio. ELICIA.—ce. ce. ce. CEL.—porque? ELIC.—porque esta aqui Crito. CEL.—metelo en la camarilla de las escobas: presto: dile que viene tu primo e mi familiar. ELIC.—Crito, retraete ay: mi primo viene: perdida soy. CRITO.—plazeme, no te congoxes. SEMP.—madre bendita! que desseo traygo! gracias a dios que te me dexo ver. CEL.—fijo mio: rey mio, turbado me has: no te puedo fablar; torna e dame otro abrazo: y tres dias podiste estar sin vernos? Elicia, Elicia, catale aqui. ELIC.—a quien, madre? CEL.—Sempronio. ELIC.—ay triste! que saltos me da el corazon: y que es del? CEL.—vesle aqui: vesle. yo me lo abrazare, que no tu. ELIC.—ay! maldito seas, traydor: postema e landre te mate: e a manos de tus enemigos mueras: e por crimines dignos de cruel muerte: en poder de rigurosa justicia te veas! ay, ay! SEMP.—hy. hy. hy. que has, mi Elicia: de que te congoxas? ELIC.—tres dias ha no me ves. nunca dios te vea. nunca dios te consuele ni visite: guay de la triste que en ti tiene su esperanza e el fin de todo su bien. SEMP.—calla, senora mia: tu piensas que la distancia del lugar es poderosa de apartar el entranable amor: el fuego que esta en mi corazon? do yo vo, comigo vas: comigo estas: no te aflijas ni me atormentes mas de lo que yo he padecido: mas di, que passos suenan arriba? ELIC.—quien? vn mi enamorado. SEMP.– pues creolo. ELIC.—alahe, verdad es: sube alla e verle has. SEMP.– voy. CEL.—anda aca; dexa essa loca: que ella es liuiana: e turbada de tu absencia: sacasla agora de seso: dira mill locuras: ven e fablemos; no dexemos passar el tiempo en balde. SEMP.—pues quien esta arriba? CEL.—quiereslo saber? SEMP.-quiero. CEL.—vna moza que me encomendo vn frayle. SEMP.-que frayle? CEL.– no lo procures. SEMP.—por mi vida, madre, que frayle? CEL.—porfias? el ministro, el gordo. SEMP.—o desauenturada, e que carga espera. CEL.—todo lo leuamos: pocas mataduras as tu visto en la barriga. SEMP.—mataduras no: mas petreras si. CEL.—ay burlador. SEMP.—dexa si soy burlador: e muestramela. ELIC.—ha! don maluado, verla quieres? los ojos se te salten; que no basta a ti vna ni otra. anda! veela, e dexa a mi para siempre. SEMP.—calla, dios mio: e enojaste? que ni la quiero ver a ella ni a muger nascida. A mi madre quiero fablar: e quedate adios. ELIC.—anda, anda: vete, desconoscido: e esta otros tres anos que no me bueluas a ver. SEMP.—madre mia, bien ternas confianza, e creeras que no te burlo. Toma el manto, e vamos: que por el camino sabras lo que si aqui me tardasse en dezirte: empediria tu prouecho e el mio. CEL.—vamos: Elicia, quedate a dios: cierra la puerta: adios paredes. SEMP.—o madre mia: todas cosas dexadas aparte: solamente se atenta: e ymagina en lo que te dixere: e no derrames tu pensamiento en muchas partes: que quien junto en diuersos lugares le pone, en ninguno le tiene: sino por caso determina lo cierto. e quiero que sepas de mi lo que no has oydo. E es: que jamas pude despues que mi fe contigo puse: desear bien de que no te cupiesse parte. CEL.—parta dios, hijo, de lo suyo contigo. que no sin causa lo hara: siquiera porque has piedad desta pecadora de vieja. Pero di, no te detengas: que la amistad que entre ti e mi se afirma no ha menester preambulos: ni correlarios: ni aparejos para ganar voluntad. Abreuia e ven al fecho: que vanamente se dize por muchas palabras: lo que por pocas se puede entender. SEMP.—assi es; Calisto arde en amores de Melibea: de ti e de mi tiene necessidad: pues juntos nos ha menester: juntos nos aprouechemos. que conoscer el tiempo e vsar el hombre de la oportunidad haze los hombres prosperos. CEL.—bien has dicho: al cabo estoy: basta para mi mescer el ojo. Digo que me alegro destas nueuas: como los cirujanos de los descalabrados. E como aquellos danan en los principios las llagas: e encarecen el prometimiento de la salud: assi entiendo yo fazer a Calisto: alargarle he la certenidad del remedio. Porque, como dizen. El esperanza luenga aflige el corazon. y quanto el la perdiere, tanto gela promete. bien me entiendes. SEMP.—callemos: que a la puerta estamos: e como dizen: las paredes han oydos. CEL.—llama. SEMP.—tha. tha. tha. CAL.—Parmeno. PARMENO.—senor. CAL.—no oyes: maldito sordo? PARM.—que es, senor? CAL.—a la puerta llaman; corre. PARM.—quien es? SEMP.—abre a mi e a esta duena. PARM.—senor, Sempronio e vna puta vieja alcoholada dauan aquellas porradas. CAL.—calla, calla, maluado: que es mi tia. corre, corre, abre. siempre lo vi, que por huyr hombre de vn peligro: cae en otro mayor. Por encubrir yo este fecho de Parmeno: a quien amor / o fidelidad / o temor pusieran freno, cay en indignacion desta que no tiene menor poderio en mi vida que dios. PARM.—porque, senor, te matas? porque, senor, te congoxas? y tu piensas que es vituperio en las orejas desta el nombre que la llame? no lo creas: que assi se glorifica en le oyr como tu quando dizen: diestro cauallero es Calisto. E demas desto es nombrada e por tal titulo conocida. Si entre cient mugeres va, e alguno dize, puta vieja: sin ningun empacho luego buelue la cabeza: e responde con alegre cara. En los conbites: en las fiestas: en las bodas: en las confradias, en los mortuorios, en todos los ayuntamientos de gentes: con ella passan tiempo: si passa por los perros: aquello suena su ladrido. si esta cerca las aues, otra cosa no cantan. si cerca los ganados, balando lo pregonan; si cerca las bestias, rebuznando dizen puta vieja. las ranas de los charcos otra cosa no suelen mentar. si va entre los herreros: aquello dizen sus martillos. carpinteros e armeros. herradores: caldereros; arcadores. Todo oficio de instrumento forma en el ayre su nombre. Cantanla los carpinteros. peynanla los peynadores. texedores. labradores. en las huertas. en las aradas. en las vinas. en las segadas: con ella passan el afan cotidiano. al perder en los tableros. luego suenan sus loores todas cosas que son hazen. a do quiera que ella esta el tal nombre representa. O que comedor de hueuos asados era su marido. Que quieres mas: sino que si vna piedra toca con otra: luego suena puta vieja. CAL.—y tu como lo sabes y la conosces? PARM.—saberlo has. Dias grandes son passados que mi madre, muger pobre, moraua en su vezindad: la qual, rogada por esta Celestina, me dio a ella por siruiente: avnque ella no me conoce por lo poco que la serui: e por la mudanza que la edad ha hecho. CAL.—de que la seruias? PARM.—senor, yua a la plaza e trayale de comer: e acompanauala: suplia en aquellos menesteres que mi tierna fuerza bastaua. pero de aquel poco tiempo que la serui: recogia la nueua memoria lo que la vejez no ha podido quitar. Tiene esta buena duena al cabo de la ciudad, alla cerca de las tenerias: en la cuesta del rio: vna casa apartada, medio cayda, poco compuesta e menos abastada. Ella tenia seys oficios. conuiene a saber: labrandera, perfumera, maestra de fazer afeytes e de fazer virgos, alcahueta e vn poquito hechizera. Era el primer oficio cobertura de los otros: so color del qual muchas mozas destas siruientes entrauan en su casa: a labrarse e a labrar camisas e gorgueras: e otras muchas cosas. ninguna venia sin torrezno: trigo: harina: o jarro de vino: e de las otras prouisiones que podian a sus amas furtar: e avn otros furtillos de mas qualidad alli se encubrian. Asaz era amiga de estudiantes: e despenseros: e mozos de abades. E a estos vendia ella aquella sangre innocente de las cuytadillas: la qual ligeramente auenturauan en esfuerzo de la restitucion que ella les prometia. Subio su fecho a mas: que por medio de aquellas: comunicaua con las mas encerradas: hasta traer a execucion su proposito: e aquestas en tiempo onesto: como estaciones, processiones de noche, missas del gallo: missas del alua: e otras secretas deuociones, muchas encubiertas vi entrar en su casa: tras ellas hombres descalzos, contritos, e rebozados, desatacados: que entrauan alli a llorar sus pecados. que trafagos, si piensas, traya. faziase fisica de ninos. tomaua estambre de vnas casas: daualo a filar en otras por achaque de entrar en todas. las vnas, madre aca: las otras, madre aculla. cata la vieja, ya viene el ama; de todos muy conocida. Con todos estos afanes, nunca pasaua sin missa ni bisperas: ni dexaua monesterios de frayles: ni de monjas. esto porque alli fazia ella sus aleluyas e conciertos. y en su casa fazia perfumes, falsaua estoraques, menjuy, animes, ambar, algalia, poluillos, almizcles, mosquetes. Tenia vna camara llena de alambiques, de redomillas, de barrilejos de barro: de vidrio: de arambre: de estano: hechos de mill faziones. hazia soliman, afeyte cozido, argentadas, bujelladas, cerillas, llanillas, vnturillas, lustres, luzentores, clarimientes, alualinos. E otras aguas de rostro, de rasuras de gamones, de cortezas de spantalobos, de taraguntia, de hieles, de agraz, de mosto, destiladas e azucaradas. Adelgazaua los cueros con zumos de limones, con turuino, con tuetano de corzo: e de garza: e otras confaciones. Sacaua aguas para oler de rosas, de azahar: de jasmin, de trebol, de madreselua, e clauellinas, mosquetas e almizcladas, poluorizadas con vino. Hazia lexias para enrubiar, de sarmientos, de carrasca, de centeno, de marrubios, con salitre, con alumbre, e millifolia, e otras diuersas cosas. E los vntos e mantecas que tenia es hastio de dezir: de vaca, de osso, de cauallos, e de camellos, de culebra, e de conejo, de vallena, de garza: e de alcarauan, e de gamo, e de gato montes, e de texon, de harda, de herizo, de nutria. Aparejos para banos, esto es vna marauilla: de las yeruas e rayzes que tenia en el techo de su casa colgadas: manzanilla e romero, maluauiscos, culantrillo, coronillas, flor de sauco e de mostaza, espliego. e laurel blanco, tortarosa e gramonilla, flor saluaje, e higueruela, pico de oro e hoja tinta. Los azeytes que sacaua para el rostro no es cosa de creer. de estoraque e de jazmin, de limon, de pepitas, de violetas, de menjuy, de alfocigos, de pinones, de granillo, de azofeyfas, de neguilla, de altramuzes, de aruejas, e de carillas, e de yerua paxarera. E vn poquillo de balsamo tenia ella en vna redomilla que guardaua para aquel rascuno que tiene por las narizes. Esto de los virgos, vnos fazia de bexiga: e otros curaua de punto. Tenia en vn tabladillo: en vna caxuela pintada, agujas delgadas de pelligeros: e hilos de seda encerados, e colgadas alli rayzes de hojaplasma e fuste sanguino, cebolla albarrana, e cepacauallo. Hazia con esto marauillas: que quando vino por aqui el embaxador frances: tres vezes vendio por virgen vna criada que tenia. CAL.—asi pudiera ciento. PARM.—si, santo dios. e remediaua por caridad muchas huerfanas e erradas que se encomendauan a ella. E en otro apartado tenia para remediar amores, e para se querer bien. Tenia huessos de corazon de cieruo: lengua de biuora, cabezas de codornizes: sesos de asno, tela de cauallo, mantillo de nino, haua morisca, guija marina, soga de ahorcado, flor de yedra, espina de erizo, pie de texo, granos de helecho, la piedra del nido del aguila, e otras mill cosas. Venian a ella muchos hombres e mugeres. e a vnos demandaua el pan do mordian. a otros de su ropa. a otros de sus cabellos. a otros pintaua en la palma letras con azafran. a otros con bermellon. a otros daua vnos corazones de cera llenos de agujas quebradas. e otras cosas en barro e en plomo hechas, muy espantables al ver. Pintaua figuras. dezia palabras en tierra. quien te podra dezir lo que esta vieja fazia? y todo era burla e mentira. CAL.—bien esta, Parmeno: dexalo para mas oportunidad. asaz soy de ti auisado: tengotelo en gracia; no nos detengamos: que la necessidad desecha la tardanza. Oye, aquella viene rogada: espera mas que deue: vamos, no se indigne. Yo temo: e el temor reduze la memoria: e a la prouidencia despierta. Sus; vamos, proueamos. Pero ruegote, Parmeno: la embidia de Sempronio, que en esto me sirue e complaze: no ponga impedimiento en el remedio de mi vida. que si para el houo jubon, para ti no faltara sayo. ni pienses que tengo en menos tu consejo e auiso: que su trabajo e obra. como lo espiritual sepa yo que precede a lo corporal: e que puesto que las bestias corporalmente trabajen mas que los hombres: por esso son pensadas e curadas: pero no amigas dellos: en la tal diferencia seras comigo en respeto de Sempronio: e so secreto sello, pospuesto el dominio: por tal amigo a ti me concedo. PARM.—quexome, Calisto, de la dubda de mi fidelidad e seruicio: por los prometimientos e amonestaciones tuyas. Quando me viste, senor, embidiar? o por ningun interesse ni resabio tu prouecho estorcer? CAL.—no te escandalizes: que sin dubda tus costumbres e gentil crianza en mis ojos: ante todos los que me siruen estan: mas como en caso tan arduo, do todo mi bien e vida pende: es necessario proueer. proueo a los contescimientos: como quiera que creo que tus buenas costumbres sobre buen natural florescen: como el buen natural sea principio del artificio. E no mas: sino vamos a ver la salud. CEL.—pasos oyo: aca descienden: haz, Sempronio, que no lo oyes. Escucha, e dexame hablar lo que a ti e a mi conuiene. SEMP.—habla. CEL.—no me congoxes, ni me importunes: que sobrecargar el cuydado es aguijar al animal congoxoso. Assi sientes la pena de tu amo Calisto que parece que tu eres el: e el tu: e que los tormentos son en vn mismo subjeto. Pues cree que yo no vine aca por dexar este pleyto indeciso: o morir en la demanda. CAL.—Parmeno? detente: ce, escucha, que hablan estos: veamos en que viuimos. O notable muger. o bienes mundanos, indignos de ser poseydos de tan alto corazon. O fiel e verdadero Sempronio. Has visto, mi Parmeno? oyste? tengo razon? que me dizes? rincon de mi secreto, e consejo e alma mia? PARM.—protestando mi innocencia en la primera sospecha: e cumpliendo con la fidelidad: porque te me concediste, hablare. oyeme: e el afecto no te ensorde: ni la esperanza del deleyte te ciegue. Tiemplate, e no te apresures: que muchos con cobdicia de dar en el fiel, yerran el blanco. Avnque soy mozo, cosas he visto asaz: e el seso e la vista de las muchas cosas demuestran la experiencia: de verte o de oyrte descender por la escalera, parlan lo que estos fingidamente han dicho: en cuyas falsas palabras pones el fin de tu deseo. SEMP.—Celestina, ruynmente suena lo que Parmeno dize. CEL.—calla, que para la mi santiguada: do vino el asno verna el albarda. Dexame tu a Parmeno: que yo te le hare vno de nos: e de lo que houieremos, demosle parte. que los bienes, si no son comunicados, no son bienes. Ganemos todos: partamos todos: holguemos todos: yo te le traere manso e benigno a picar el pan en el puno. e seremos dos a dos. e como dizen, tres al mohino. CAL.—Sempronio. SEMP.—senor. CAL.—que hazes, llaue de mi vida? abre. O Parmeno, ya la veo. Sano soy: viuo so. Miras que reuerenda persona: que acatamiento. Por la mayor parte, por la philosomia es conocida la virtud interior. O vejez virtuosa! o virtud enuejecida! O gloriosa esperanza de mi desseado fin. O fin de mi deleytosa esperanza. O salud de mi passion. Reparo de mi tormento. Regeneracion mia. Viuificacion de mi vida. Resurrecion de mi muerte. Deseo llegar a ti. Cobdicio besar essas manos llenas de remedio. la indignidad de mi persona lo embarga. Dende aqui adoro la tierra que huellas: e en reuerencia tuya beso. CEL.—Sempronio: de aquellas viuo yo? los huessos que yo roy piensa este necio de tu amo de darme a comer: pues al le sueno, al freyr lo vera: dile que cierre la boca e comience abrir la bolsa: que de las obras dudo: quanto mas de las palabras: xo, que te estriego: asna coxa, mas hauias de madrugar. PARM.—guay de orejas que tal oyen. Perdido es, quien tras perdido anda. O Calisto desauenturado, abatido, ciego: e en tierra esta adorando a la mas antigua e puta tierra: que fregaron sus espaldas en todos los burdeles. deshecho es. vencido es. caydo es. no es capaz de ninguna redencion, ni consejo, ni esfuerzo. CAL.—que dezia la madre? paresceme que pensaua que le ofrescia palabras por escusar galardon. SEMP.—assi lo senti. CAL.—pues ven comigo: trae las llaues, que yo sanare su duda. SEMP.—bien faras: e luego vamos: que no se deue dexar crescer la yerua entre los panes: ni la sospecha en los corazones de los amigos. Sino alimpiarla luego con el escardilla de las buenas obras. CAL.—astuto hablas: vamos, e no tardemos. CEL.—plazeme, Parmeno: que hauemos auido oportunidad para que conozcas el amor mio contigo: e la parte que en mi immerito tienes: e digo immerito por lo que te he oydo dezir: de que no hago caso; porque virtud nos amonesta sufrir las tentaciones: e no dar mal por mal. e especial quando somos tentados por mozos: e no bien instrutos en lo mundano, en que con necia lealtad pierdan a si e a sus amos: como agora tu a Calisto. bien te oy: e no pienses que el oyr con los otros exteriores sesos mi vejez aya perdido: que no solo lo que veo, oyo e conozco: mas avn lo intrinseco con los intellectuales ojos penetro. Has de saber, Parmeno, que Calisto anda de amor quexoso: e no lo juzgues por eso por flaco: que el amor imperuio todas las cosas vence. e sabe, si no sabes, que dos conclusiones son verdaderas. La primera, que es forzoso el hombre amar a la muger: e la muger al hombre. La segunda, que el que verdaderamente ama, es necessario que se turbe: con la dulzura del soberano deleyte: que por el hazedor de las cosas fue puesto: porque el linaje de los hombres perpetuase: sin lo qual peresceria. E no solo en la humana especie: mas en los pesces / en las bestias / en las aues / en las reptilias. E en lo vegetatiuo algunas plantas han este respeto: si sin interposicion de otra cosa en poca distancia de tierra estan puestas: en que ay determinacion de heruolarios e agricultores ser machos e hembras. Que diras a esto, Parmeno? neciuelo, loquito, angelico / perlica, simplezico, lobitos en tal gestico: llegate aca, putico, que no sabes nada del mundo / ni de sus deleytes. Mas rauia mala me mate si te llego a mi, avnque vieja: que la voz tienes ronca, las barbas te apuntan: mal sosegadilla deues tener la punta de la barriga. PAR.—como cola de alacran. CEL.—y avn peor: que la otra muerde sin hinchar: e la tuya hincha por nueue meses. PARM.—hy. hy. hy. CEL.—rieste: landrezilla, fijo? PARM.—calla, madre: no me culpes ni me tengas, avnque mozo, por insipiente. Amo a Calisto porque le deuo fidelidad por crianza: por beneficios: por ser del honrrado e bien tratado: que es la mayor cadena que el amor del seruidor al seruicio del senor prende: quanto lo contrario aparta. veole perdido, e no ay cosa peor que yr tras desseo sin esperanza de buen fin: e especial, pensando remediar su hecho tan arduo e dificil con vanos consejos e necias razones de aquel bruto Sempronio: que es pensar sacar aradores a pala e azadon: no lo puedo sufrir: digolo, e lloro. CEL.—Parmeno: tu no vees que es necedad o simpleza llorar por lo que con llorar no se puede remediar? PARM.—por esso lloro: que si con llorar fuesse possible traer a mi amo el remedio: tan grande seria el plazer de la tal esperanza: que de gozo no podria llorar. pero assi perdida ya la esperanza: pierdo el alegria e lloro. CEL.—lloraras sin prouecho: por lo que llorando estoruar no podras: ni sanarlo presumas. A otros no ha contecido esto, Parmeno? PARM.—si; pero a mi amo no le querria doliente. CEL.—no lo es: mas avnque fuesse doliente, podria sanar. PARM.—no curo de lo que dizes. porque en los bienes mejor es el acto que la potencia: e en los males mejor la potencia que el acto. assi que mejor es ser sano, que poderlo ser. e mejor es poder ser doliente, que ser enfermo por acto. e por tanto es mejor tener la potencia en el mal que el acto. CEL.—o maluado: como que no se te entiende! tu no sientes su enfermedad? que has dicho hasta agora? de que te quexas? pues burla, o di por verdad lo falso, e cree lo que quisieres: que el es enfermo por acto: e el poder ser sano es en mano desta flaca vieja. PARM.—mas desta flaca puta vieja. CEL.—putos dias biuas, vellaquillo: e como te atreues? PARM.—como te conozco. CEL.—quien eres tu? PARM.—quien? Parmeno, hijo de Alberto tu compadre: que estuue contigo vn mes: que te me dio mi madre quando morauas a la cuesta del rio, cerca de las tenerias. CEL.—Jesu. Jesu. Jesu. E tu eres Parmeno, hijo de la Claudiana? PARM.—alahe, yo. CEL.—pues fuego malo te queme: que tan puta vieja era tu madre como yo: porque me persigues, Parmenico? El es, el es, por los santos de dios. allegate a mi: ven aca, que mill azotes e punadas te di en este mundo: e otros tantos besos. Acuerdaste quando dormias a mis pies, loquito? PARM.—si, en buena fe: e algunas vezes, avnque era nino, me subias a la cabecera, e me apretauas contigo: e porque olias a vieja me fuya de ti. CEL.—mala landre te mate: e como lo dize el desuergonzado. Dexadas burlas e pasatiempos: oye agora, mi fijo, e escucha; que, avnque a vn fin soy llamada, a otro so venida: e maguera que contigo me aya fecho de nueuas, tu eres la causa. Hijo, bien sabes como tu madre, que dios aya, te me dio, viuiendo tu padre: el qual, como de mi te fueste, con otra ansia no murio, sino con la incertedumbre de tu vida e persona: por la qual absencia: algunos anos de su vejez sufrio angustiosa e cuydosa vida: e al tiempo que della passo, embio por mi: e en su secreto te me encargo: e me dixo sin otro testigo, sino aquel que es testigo de todas las obras e pensamientos: e los corazones e entranas escudrina: al qual puso entre el e mi que te buscasse, e allegasse, e abrigasse: e quando de complida edad fueses: tal que en tu viuir supieses tener manera e forma: te descubriesse adonde dexo encerrada tal copia de oro e plata que basta mas que la renta de tu amo Calisto. y porque gelo prometi, e con mi promessa lleuo descanso: e la fe es de guardar mas que a los viuos a los muertos, que no pueden hazer por si: en pesquisa e seguimiento tuyo yo he gastado asaz tiempo e quantias: hasta agora que ha plazido aquel que todos los cuydados tiene: e remedia las justas peticiones, e las piadosas obras endereza: que te hallase aqui, donde solos ha tres dias que se que moras: sin duda dolor he sentido: porque has por tantas partes vagado e peregrinado: que ni has hauido prouecho, ni ganado debdo ni amistad; que, como Seneca nos dize, Los peregrinos tienen muchas posadas e pocas amistades. Porque en breue tiempo con ninguno no pueden firmar amistad. E el que esta en muchos cabos no esta en ninguno. ni puede aprouechar el manjar a los cuerpos, que en comiendo se lanza. ni ay cosa que mas la sanidad impida que la diuersidad e mudanza e variacion de los manjares. e nunca la llaga viene a cicatrizar: en la qual muchas melezinas se tientan. ni conualesce la planta que muchas vezes es traspuesta. ni ay cosa tan prouechosa, que en llegando aproueche: por tanto, mi hijo, dexa los impetus de la juuentud: e tornate con la doctrina de tus mayores a la razon: reposa en alguna parte: e donde mejor que en mi voluntad? en mi animo: en mi consejo: a quien tus padres te remetieron? e yo assi como verdadera madre tuya te digo: so las maldiciones que tus padres te pusieron si me fuesses inobediente: que por el presente sufras e siruas a este tu amo que procuraste: hasta en ello hauer otro consejo mio: pero no con necia lealdad: proponiendo firmeza sobre lo mouible: como son estos senores deste tiempo. E tu, gana amigos, que es cosa durable: ten con ellos constancia. no viuas en flores. dexa los vanos prometimientos de los senores: los quales desechan la substancia de sus siruientes con huecos e vanos prometimientos: como la sanguijuela saca la sangre: desagradescen, injurian, oluidan seruicios, niegan galardon. Guay de quien en palacio enuejece: como se escriue de la probatica piscina: que de ciento que entrauan, sanaua vno. Estos senores deste tiempo mas aman a si, que a los suyos; e no yerran: los suyos ygualmente lo deuen hazer. perdidas son las mercedes, las magnificencias, los actos nobles. cada vno destos catiuan e mezquinamente procuran su interesse con los suyos: pues aquellos no deuen menos hazer: como sean en facultades menores, sino viuir a su ley: digolo, fijo Parmeno: porque este tu amo, como dizen, me parece rompenecios: de todos se quiere seruir sin merced: mira bien, creeme: en su casa cobra amigos, que es el mayor precio mundano: que con el no pienses tener amistad: como por la diferencia de los estados o condiciones pocas vezes contezca. Caso es ofrecido, como sabes, en que todos medremos: e tu por el presente te remedies: que lo al que te he dicho, guardado te esta a su tiempo: e mucho te aprouecharas siendo amigo de Sempronio. PARM.—Celestina: todo tremo en oyrte: no se que haga: perplexo esto: por vna parte tengote por madre: por otra a Calisto por amo. Riqueza desseo. pero quien torpemente sube a lo alto: mas ayna cae que subio. No querria bienes malganados. CEL.—yo si. A tuerto o a derecho, nuestra casa hasta el techo. PARM.—pues yo con ellos no viuiria contento: e tengo por onesta cosa la pobreza alegre. E avn mas te digo: que no los que poco tienen son pobres: mas los que mucho dessean: e por esto, avnque mas digas, no te creo en esta parte: querria passar la vida sin embidia: los yermos e aspereza sin temor: el sueno sin sobresalto: las injurias con respuesta: las fuerzas sin denuesto: las premias con resistencia. CEL.—o hijo, bien dizen que la prudencia no puede ser sino en los viejos: e tu mucho eres mozo. PARM.—mucho segura es la mansa pobreza. CEL.—mas di, como mayor: que la fortuna ayuda a los osados. e demas desto, quien que tenga bienes en la republica: que escoja viuir sin amigos? pues, loado dios, bienes tienes: e no sabes que has menester amigos para los conseruar? y no pienses que tu priuanza con este senor te haze seguro: que quanto mayor es la fortuna, tanto es menos segura: e por tanto, en los infortunios el remedio es a los amigos. E a donde puedes ganar mejor este debdo, que donde las tres maneras de amistad concurren? Conuiene a saber; por bien, e prouecho, e deleyte. Por bien, mira la voluntad de Sempronio conforme a la tuya: e la gran similitud que tu y el en la virtud teneys. Por prouecho, en la mano esta, si soys concordes. Por deleyte, semejable es: como seays en edad dispuestos para todo linaje de plazer: en que mas los mozos que los viejos se juntan. Assi como para jugar: para vestir: para burlar: para comer e beuer: para negociar amores, juntos de compania. O si quisiesses, Parmeno, que vida gozariamos. Sempronio ama a Elicia, prima de Areusa. PARM.—de Areusa? CEL.—de Areusa. PARM.—de Areusa, hija de Eliso? CEL.—de Areusa, hija de Eliso. PARM.—cierto? CEL.—cierto. PARM.—marauillosa cosa es. CEL.—pero bien te paresce? PARM.—no cosa mejor. CEL.—pues tu buena dicha quiere, aqui esta quien te la dara. PARM.—mi fe, madre, no creo a nadie. CEL.—estremo es creer a todos: e yerro no creer a ninguno. PARM.—digo que te creo: pero no me atreuo; dexame. CEL.—o mezquino: de enfermo corazon es no poder sufrir el bien. Da dios hauas a quien no tiene quixadas. O simple: diras que a donde ay mayor entendimiento: ay menor fortuna: e donde mas discrecion, alli es menor la fortuna: dichas son. PARM.—o Celestina! oydo he a mis mayores que vn exemplo de luxuria o auaricia mucho mal haze: e que con aquellos deue hombre conuersar, que le fagan mejor: e aquellos dexar, a quien el mejores piensa hazer. E Sempronio en su enxemplo no me hara mejor: ni yo a el sanare su vicio. E puesto que yo a lo que dizes me incline: solo yo querria saberlo: porque a lo menos por el exemplo fuese oculto el pecado. E si hombre vencido del deleyte de este mundo: va contra la virtud: no se atreua a la honestad. CEL.—sin prudencia hablas: que de ninguna cosa es alegre possession sin compania. No te retrayas ni amargues, que la natura huye lo triste: e apetece lo delectable. El buen deleyte es con los amigos en las cosas sensuales: e especial en recontar las cosas de amores: e comunicarlas. Esto hize: esto otro me dixo: tal donayre passamos: de tal manera la tome: assi la bese: assi me mordio: assi la abrace: assi se allego. O que fabla. o que gracia. o que juegos. o que besos. Vamos alla. boluamos aca. ande la musica. pintemos los motes. canten canciones. inuenciones. justemos. que cimera sacaremos: o que letra? ya va a la missa. manana saldra. rondemos su calle. mira su carta. vamos de noche. tenme el escala. aguarda a la puerta. como te fue? cata el cornudo, sola la dexa, dale otra buelta. tornemos alla. E para esto, Parmeno, ay deleyte sin compania? alahe: alahe: la que las sabe las tane. este es el deleyte: que lo al mejor fazen los asnos en el prado. PARM.—no querria, madre, me combidasses a consejo con amonestacion de deleyte: como hizieron los que, caresciendo de razonable fundamento: opinando hizieron sectas embueltas en dulce veneno: para captar e tomar las voluntades de los flacos: e con poluos de sabroso afeto cegaron los ojos de la razon. CEL.—que es razon, loco? que es afeto, asnillo? la discrecion que no tienes lo determina. E de la discrecion mayor es la prudencia. e la prudencia no puede ser sin esperimiento: e la esperiencia no puede ser mas que en los viejos. E los ancianos somos llamados padres. E los buenos padres bien aconsejan a sus hijos: e especial yo a ti: cuya vida e honrra mas que la mia deseo. E quando me pagaras tu esto? nunca: pues a los padres e a los maestros no puede ser fecho seruicio ygualmente. PARM.—todo me recelo, madre, de recebir dudoso consejo. CEL.—no quieres? pues dezirte he lo que dize el sabio al varon que con dura ceruiz al que le castiga menosprecia: arrebatado quebrantamiento le verna, e sanidad ninguna le consiguira. E assi, Parmeno, me despido de ti e deste negocio. PARM.—ensanada esta mi madre; duda tengo en su consejo. yerro es no creer: e culpa creerlo todo. Mas humano es confiar: mayormente en esta que interesse promete: ado prouecho no puede allende de amor conseguir. Oydo he que deue hombre a sus mayores creer: esta, que me aconseja? paz con Sempronio. La paz no se deue negar: que bienauenturados son los pacificos: que fijos de dios seran llamados. Amor no se deue rehuyr: caridad a los hermanos: interesse pocos le apartan. Pues quierola complazer y oyr. Madre: no se deue ensanar el maestro de la ignorancia del discipulo: sino raras vezes: por la sciencia que es de su natural comunicable: e en pocos lugares se podria infundir. Por eso, perdoname: hablame: que no solo quiero oyrte e creerte: mas en singular merced rescebir tu consejo. E no me lo agradezcas: pues el loor: e las gracias de la acion: mas al dante que no al recibiente se deuen dar. Por esso, manda, que a tu mandado mi consentimiento se humilla. CEL..—de los hombres es errar, e bestial es la porfia. Por ende gozome, Parmeno, que ayas limpiado las turbias telas de tus ojos: e respondido al reconoscimiento, discrecion e ingenio sotil de tu padre: cuya persona, agora representada en mi memoria: enternece los ojos piadosos por do tan abundantes lagrimas vees derramar. Algunas vezes duros propositos, como tu, defendia: pero luego tornaua a lo cierto. En dios e en mi anima, que en veer agora lo que has porfiado: e como a la verdad eres reduzido: no paresce sino que viuo le tengo delante. O que persona: o que hartura: o que cara tan venerable. Pero callemos, que se acerca Calisto, e tu nueuo amigo Sempronio: con quien tu conformidad para mas oportunidad dexo. Que dos en vn corazon viuiendo son mas poderosos de hazer e de entender. CALISTO.—dubda traygo, madre, segun mis infortunios, de hallarte viua. Pero mas es marauilla, segun el deseo de como llego viuo: recibe la dadiua pobre de aquel que con ella la vida te ofrece. CEL.—como en el oro muy fino labrado por la mano del sotil artifice: la obra sobrepuja a la materia: asi se auentaja a tu magnifico dar la gracia e forma de tu dulce liberalidad: e sin duda la presta dadiua su efeto ha doblado: porque la que tarda, el prometimiento muestra negar: e arrepentirse del don prometido. PARMENO.—que le dio, Sempronio? SEMP.—cient monedas de oro. PARM.—hy. hy. hy. SEMP.—hablo contigo la madre? PARM.—calla, que si. SEMP.—pues como estamos? PARM.—como quisieres: avnque estoy espantado. SEMP.—pues calla: que yo te hare espantar dos tanto. PARM.—o dios! no ay pestilencia mas eficaz: quel enemigo de casa para empecer. CALISTO.—ve agora, madre, e consuela tu casa: e despues ven, consuela la mia: e luego. CEL.—quede dios contigo. CAL.—y el te me guarde.

La Celestina

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