Читать книгу Filosofía de la imagen: lenguaje, imagen y representación - Fernando Zamora Águila - Страница 6
Agradecimientos
ОглавлениеLa primera formulación de estas indagaciones se remonta a 1988, cuando empecé a cursar la Maestría en Filosofía en la Universidad Nacional Autónoma de México. Siete años después redacté la primera versión de mis hallazgos principales (que hoy siguen siendo los mismos). Hacia 1998 reformulé el proyecto como investigación doctoral para esta misma universidad, sin cambiar sus objetivos centrales pero sí con la ambición de darle más amplitud y profundidad. En 2003 lo presenté como tesis doctoral. El texto que ahora presento es una versión reducida y reestructurada de esa tesis.
De 2003 a la fecha han aparecido en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica interesantes estudios sobre teoría de la imagen (filosofía, historia, metodología). No creí conveniente referirlos en la bibliografía y hemerografía de este libro, para dejar constancia sólo del aparato crítico que utilicé originalmente. Hasta donde alcanzo a conocer estos materiales recientes, puedo afirmar que lo planteado en ellos no me llevaría a modificar mis propias posturas.
En las últimas dos décadas, los planes de estudio universitarios de diversos países han ido introduciendo asignaturas relativas a la imagen (estudios visuales, imagen y sociedad, historia de la imagen, etc.), de modo que los intereses académicos se hacen eco de la realidad cultural. Espero que mi aportación se inserte en dicha tendencia.
Un libro no se escribe; se manufactura, se elabora. Para que lo escrito por mí llegara a formar parte del libro que el lector tiene en sus manos, se conjuntó la intervención de personas e instituciones a las que doy las gracias.
En primer lugar a Ignacio Salazar Arroyo, Director de la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM, por su interés en la teoría de la imagen y sus gestiones académicas. Con él he tenido desde hace décadas una amistad que no requiere demostraciones. También agradezco a María Rosa Palazón Mayoral, que como tutora creyó en este proyecto y me animó a difundir sus resultados. Ella es para mí un ejemplo de probidad intelectual. Asimismo, a Raúl Alcalá Campos y a José de Santiago Silva, por cuyos dictámenes favorables el Comité Editorial de la ENAP aprobó la publicación de mi trabajo.
Doy las gracias a la Facultad de Filosofía y Letras (UNAM), mi alma mater, que me formó en el mundo de la palabra poética y la palabra filosófica. A todos mis colegas, amigos y alumnos de la ENAP, que me abrieron al mundo de la imagen. De ellos aprendí cuán compleja es la creación en las artes y en el diseño: han sido para mí un gran estímulo a lo largo de veintisiete años. Y al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, que me otorgó de enero de 2001 a julio de 2002 una beca para realizar esta investigación.
Estoy muy agradecido con Rodolfo Peláez, por su rigor editorial y su paciencia, y porque coordinó de modo inmejorable todos los aspectos necesarios para la impresión y distribución de este libro. Con Adriana García Valderrama, por la cuidadosa revisión del texto y sus sugerencias tan pertinentes. Y con Gabriela García Jurado, por la formación tipográfica y la captura de ilustraciones.
Debo a Josset Herrera Vinueza, mi compañera, el impulso y el apoyo incondicionales para llevar a término el presente trabajo. A mis hijas, Montserrat Zamora Márquez y Úrsula Zamora Herrera, les debo el gusto por estar vivo.
— Fernando Zamora Águila