Читать книгу Meditaciones diarias para la vida espiri - Henri J. M. Nouwen - Страница 4
ОглавлениеINTRODUCCIÓN
Este es un libro de meditaciones diarias seleccionadas a partir de los escritos, charlas y cartas de Henri Nouwen, algunos de los cuales no han sido publicados anteriormente. Reservar tiempo para la meditación diaria era esencial para Henri. Era su momento para estar ante Dios, para escuchar a Dios hablar con él.
Leer era una parte fundamental de la práctica diaria de Henri. Poseía una perspectiva única sobre la lectura espiritual. En su libro Aquí y ahora escribió:
La lectura espiritual no consiste solo en leer sobre personas espirituales o asuntos espirituales. Es también leer espiritualmente, es decir, ¡de forma espiritual! Leer de forma espiritual es leer con el deseo de dejar que Dios se acerque más a nosotros...
El propósito de la lectura espiritual [...] no es dominar el conocimiento o la información, sino dejar que sea el Espíritu de Dios el que nos domine. Por extraño que suene, la lectura espiritual significa dejarnos leer por Dios [...]
La lectura espiritual es leer con paciencia interior los movimientos del Espíritu de Dios en nuestra vida exterior y en nuestra vida interior. Con esa paciencia permitiremos que Dios nos lea y nos explique cómo somos en realidad.
Henri Nouwen luchó durante toda su vida contra la soledad y la angustia, que en cierto momento le condujeron a una espiral descendente de rechazo de sí mismo y desesperación. Henri optó deliberadamente por pasar gran parte del día en soledad, buscando a Dios. El resultado fue una epifanía: Eres el amado de Dios. Al principio apenas podía oír esas palabras, pero poco a poco aprendió a proclamarlas, permitiendo que su identidad primera como hijo de Dios echara raíces en el terreno de su corazón. Cuando se recuperó, sus charlas y retiros empezaron a centrarse más en la inmensidad de la compasión y el amor de Dios. En su libro Tú eres mi amado escribió:
Solo quiero decirte que tú eres el amado, y solo espero que puedas escuchar estas palabras mientras son pronunciadas con toda la ternura y la fuerza que el amor puede contener. Mi único deseo es hacer que estas palabras resuenen en cada rincón de tu ser: «Eres el amado».
Conforme iba haciéndose mayor, Henri escuchaba dos voces contradictorias en su cabeza sobre cómo vivir. La primera decía: «Mantente cerca del corazón de Jesús», y la otra le prevenía: «Asegúrate de tener éxito». Henri no era inmune a la llamada del mundo secular, que nos dice de forma sutil y manifiesta que no damos la talla. Se nos valora por la cantidad de dinero que ganamos, por el número de amigos que tenemos y por lo productivos que somos. Sin embargo, lo que Henri oía en lo más profundo de su lucha era contrario al instinto y radical: que rechazara una identidad mundana y reclamara su lugar como el amado de Dios.
En este libro, Henri nos invita a considerarnos, también nosotros, como preciosos a los ojos de Dios. ¡Se produce un cambio tan grande cuando lo hacemos! Nos interesa más ser que hacer; vendamos nuestras heridas en lugar de correr de lo que nos hace daño; trabamos amistad con la muerte en lugar de negarla.
Henri encontró una nueva capacidad para la alegría. Al proclamar que era amado sentía más compasión por la gente que le hacía daño, tenía más valor para vivir sus luchas como salidas hacia la libertad interior. Se volvió más afectuoso y se sintió más en paz consigo mismo y con el mundo.
Este libro de meditaciones diarias es una invitación a caminar con Henri Nouwen al centro de tu propio corazón, donde puede oírse la suave y dulce voz de Dios: tú también eres el amado.