Читать книгу Punta de lanza - Jorge A. Freire - Страница 10
ОглавлениеSi me quedara un minuto
Si me quedara un minuto,
no lo perdería diciéndote te quiero,
trataría de besarte,
me agarraría a tus muros,
y dejaría un grafiti en tus paredes,
me ahorraría en notarios,
testamentos,
epitafios,
declaraciones.
Si me quedara un minuto
de la última de mis siete vidas,
no saldría a la calle a coger aire,
que después no podría gastar,
me tumbaría contigo
en mi lecho de papel de fumar
a esperar tranquilo mi regreso,
a que me cante mi cisne,
a que se doblen mis campanas.
Si me quedara un minuto
y me alcanzara el aliento,
rondaría por tus aceras
de miradas tristes,
de pupilas desgastadas,
de iris miopes,
desprendiendo retinas,
agujereando vítreos,
entornando párpados,
tratando de fijar una imagen
que llevarme a mi alma famélica
de hambres atrasadas
y quimeras incumplidas.
Si me quedara un minuto,
no lo perdería escribiendo tonterías.