Читать книгу El Estado del miedo - Laura Dodsworth - Страница 11
ОглавлениеSarah, 85, según su hijaMi madre tiene 85 años y dice que no quiere ningún tratamiento si lo contrae. Quiere dejar que la naturaleza siga su curso. |
No tiene problemas de salud, así que no había razón para que estuviera escondida. Para una persona de su edad, solía ser muy activa, participaba en la Universidad de la Tercera Edad y frecuentaba un club de horticultura, pero todo lo que daba sentido a su vida y la impulsaba ha desaparecido.
Al principio, el runrún del miedo la atrapó. Empezó a pensar que era inevitable que muriera de covid. Era lo principal que tenía en mente.
Tuvimos que decirle que apagara la bbc. Sinceramente, creo que como la bbc es tan respetada y admirada por ser la voz de la calma y la razón, decepcionó por completo a los contribuyentes al mantener una constante narrativa del miedo. Ha dejado de cumplir con su obligación de ser equilibrada y no cuestionó al gobierno. Si solo veías o escuchabas a la bbc cada día, ¿qué esperanza te quedaba?
Entonces recuperó el sentido. Se había criado durante la guerra, su familia sufrió un bombardeo y entiende lo que es el riesgo y la mortalidad. Llegó un punto en el que quería tener elección para poder decidir a discreción. No estaba de acuerdo en que le hurtaran la capacidad de elegir.
Lo triste es que ha ido decayendo, no por el miedo que sintió, sino porque no tenía suficiente para llenar sus días. Le amargaron la vida.
Nos saltábamos las reglas y la visitábamos en el jardín con una taza de té. Era muy importante para todos que nos siguiéramos viendo. Cuando oigo de personas que dejaron que un miembro de su familia muriera solo en una residencia, me sorprende que prescindieran de la esencia misma del ser humano. ¿Cómo pudieron ser tan conformistas?
Uno tiene que valorar los riesgos que quiere asumir. No deberíamos dejar que el miedo nos manipule y nos impida pensar con claridad. Pienso que se debería animar a la gente a ser estoica y fuerte, pero ocurrió exactamente lo contrario.
Para navegar por la vida, el miedo no es la brújula adecuada.