Читать книгу La percepción élfica del reino vegetal y del reino animal - María José Ribas Albendea - Страница 23

Capítulo 2.

Las costas

Querido lector, las costas representan el aspecto perdido de ti mismo que anhelas volver a encontrar.

El abismo queda a nuestros pies, mientras que la arena que pisas marca el inicio de un nuevo camino que está por llegar.

El agua representa tus emociones más profundas y, al mismo tiempo, el éter de la materia todavía por manifestar.

Sabemos que suena extraño, y sin sentido, todo cuanto ahora estamos diciendo.

Pero vamos a seguir el hilo conductor que te va a llevar a comprender una Verdad no manifestada todavía en tu realidad física; una Verdad por concretar todavía en la materia.

¿Cuánto tiempo has pasado en las costas frente al mar?

O, ¿Cuántas son las veces que sueñas con hacerlo dormido o despierto?

El mar, como ya hemos dicho, representa el vaivén de tus emociones más profundas pero, a su vez, sus aguas son el elemento más puro de concreción en la materia.

¿Y qué significa esto?

Vayamos paso a paso.

Por el momento solo pretendemos que empieces a intuir, o captar, lo que representan las costas en tu vida o en la vida de cada persona.

Las costas representan la línea que separa la concreción de la inconcreción en la materia.

Las costas representan el abismo entre lo manifestado y lo no manifestado.

Las costas SON la ventana al Gran Mar de Creación, te acercan a él de forma literal y contundente:

¡Te asomas a él, lo sientes, lo intuyes

y ELIGES!

¿Y qué es exactamente el Gran Mar de la Creación?

El Gran Mar de la Creación es el éter que contiene todas las posibilidades de Vida en esta Tierra; es el éter que contiene todos los potenciales a nivel de toda la Humanidad y todos los potenciales en tu vida particular.

El Gran Mar de la Creación es el infinito de tus posibilidades de Vida donde tú exploras y eliges aquello que quieres manifestar; o vagas por él, de forma descontrolada, y precipitas aquello en lo que te has estado enfocando consciente o inconscientemente.

El Gran Mar de la Creación obedece a tu enfoque más puro: obedece a aquello que sientes en lo más profundo de tu corazón o a aquello en lo que te has enfocado intensamente lo quieras manifestar o no.

Navegar por el Gran Mar de la Creación, sin control emocional, es literalmente un peligro; ya que atraes a la manifestación física aquello que, con mucha probabilidad, no querías manifestar.

El Gran Mar de la Creación se manifiesta en tu mundo onírico, momento en el cual determinas la precipitación de los siguientes acontecimientos en tu vida.

Navegar por el Gran Mar de la Creación supone ELEGIR, ya sea consciente o inconscientemente, aquello que voy a manifestar en mi día a día.

Mantener un control emocional sano implica una navegación segura, mientras que un descontrol emocional es riesgo seguro de error en la elección de la experiencias que quiero precipitar.

De igual modo que navegar en un mar calmo nos asegura una buena travesía, navegar calmadamente en el Gran Mar de la Creación nos asegura una vida feliz y serena.

Navegar por el Gran Mar de la Creación no es algo que podamos eludir, lo hacemos día a día, momento a momento, en cada instante de nuestras vidas; por lo que, nos interesa asumir el control de dicha navegación.

Y entonces, dicho todo esto, ¿qué función tienen las costas del mar en este planeta?

Como ya habíamos dicho antes, su función más sublime es acercarnos al Gran Mar de la Creación:

Ponérnoslo delante, al alcance de nuestra mano, acercarnos a él de una forma contundente y literal.

Y sí, mi querido amigo, cuando decimos literal es literal.

¿Y cómo puede ser esto?

¡El agua es la LLAVE!

El agua cumple su función más importante que es acercarte al conocimiento de Quién Eres y de por qué estás aquí.

El agua es el éter que transmite la Verdad al igual que lo hace el aire, pero de un modo diferente y con objetivos completamente distintos.

Mientras que el aire tiene la función de transmitirte el verdadero funcionamiento del cuerpo humano aquí en la Tierra, el agua te muestra la concreción en la materia de aquello que quieres manifestar.

El agua nos conecta con este Gran Mar de Creación por el que debemos navegar eligiendo las imágenes de aquello que queremos plasmar en nuestra realidad.

Por tanto, ¿qué representan las costas en nuestras vidas?

Las costas nos acercan al abismo o al camino que queremos seguir: las costas abruptas te hablan de peligro, las costas calmas y llanas de camino ligero y seguro.

El abismo queda a nuestros pies, no nos permite acceder al Mar Cuántico de Creación sin que ello implique riesgos; el descontrol emocional nos acerca al abismo, lo que supone el acceso al Mar Cuántico de Creación con riesgo seguro de precipitar aquello que no queremos manifestar.

En cambio, la arena que pisas marca el inicio de un nuevo camino que está por llegar de acuerdo a nuestras elecciones serenas.

Siéntate a la orilla de un mar calmo y conéctate a las aguas del mar, la inspiración que te llegue vendrá directamente de la conexión con este vasto Mar de Creación, con este éter que determina, literalmente, la concreción en la materia de aquello que quieres, o que está, por manifestar.

La costas te abren una ventana directa a este Gran Mar de Creación lo que en la práctica supone que te acercan a él.

Las costas calmas y llanas te acercan, de forma serena, a este campo cuántico donde puedes elegir tus experiencias de Vida de una forma más consciente y segura.

Y ello es debido a que te acercan, a esta sopa cósmica de elección, desde un nivel de consciencia muy cercano a tu realidad ya manifestada5; al mismo tiempo que sus aguas te relajan y te hacen entrar en un estado favorable que te direcciona, irremediablemente, a SENTIR o, lo que es lo mismo, a ELEGIR aquellas experiencias de Vida que SÍ quieres manifestar.

En resumen, y dicho en otras palabras para que se acabe de entender:

Las costas son la ventana a un gran campo cuántico de información que se halla contenido en el agua.

Las aguas más puras del mar contienen el Sustrato de Vida ya que no solo representan al gran campo cuántico de información sino que constituyen su proyección física.

Por lo que, al sumergirnos en las aguas del mar nos estamos sumergiendo en el gran campo cuántico de información.

Así que, acercarnos al mar a través de sus costas supone, literalmente, asomarnos al campo cuántico de información de la forma más física o consciente que se puede realizar.

Este campo cuántico de información contiene todas las experiencias que podemos manifestar en este mundo.

Es un campo de elección donde realmente eliges diariamente aquello que vas a manifestar en el plano físico; donde realmente eliges las imágenes que se van a proyectar.

Navegar por el Gran Mar de la Creación es algo que hacemos constante y diariamente.

El control de las emociones nos asegura una navegación tranquila y, por tanto, la precipitación en lo físico de una vida próspera y placentera.

Las costas calmas y llanas del mar nos abren la ventana para que podamos elegir con tranquilidad y, sobre todo, con seguridad.

Así que, hagamos uso consciente de esta parte del cuerpo de nuestra amada Madre Tierra que, al igual que cada parte del cuerpo humano tiene su función concreta en el proceso de creación en la materia6, lo mismo sucede con las diferentes partes del cuerpo del planeta que nos sostiene.

Shalom.

5. Nos referimos con ello a que tu percepción de este acercamiento se da a un nivel del subconsciente rozando casi tu percepción consciente.

6. Ribas Albendea, M.J. El Libro de las Hadas. Regeneración Cuántica. Disponible en: https://www.bubok.es/libros/260747/EL-LIBRO-DE-LAS-HADAS-REGENERACION-CUANTICA