Читать книгу Nunca me dejes de responder - María Lucila Quarleri - Страница 8

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De: lucilaelextranjero@gmail.com

Para: tefi.enzenhofer@gmail.com

Lun, 17 Jun, 2019, 12:38 AM


No me quedó muy claro sobre qué vamos a escribir pero arranco (con todo).


Después de proponerte empezar este intercambio de mails me arrepentí porque me siento corta de palabras desde que me pasó lo que me pasó. Nunca fui un diccionario, pero bueno, hablaba, me defendía en la mesa de los domingos cuando se hablaba de feminismo, pero ahora ni eso.

Estoy como muda, atontada, mi novio a veces me mira y me dice “hablame de algo, de lo que se te ocurra” y a mí se me caen las lágrimas. Por eso me gusta mirarte en las redes sociales, porque vos hablás de lo tuyo, de lo que tenés (que no sé muy bien qué es) y seguís viviendo, te sacas fotos, caminás por Buenos Aires, vas a las marchas. Yo no, desde el diagnóstico que estoy en un retiro espiritual. Te confieso que siempre había querido ir a uno, cuando me lo imaginaba lo pensaba como un lugar en el Tigre, con muchas plantas, una sala de meditación, compañeres meditativos y lindos ja, termas, porro, y que en algún cuartito después de hacer el voto de silencio me revolcaba con un yogi, –era lindo, barbudo y el sexo, atlético. Nunca me imaginé que iba a ser lo que fue: con mis papás, en la casa de mi infancia, en el pueblo de mi infancia, con mis amigas de mi infancia, con muchos ruidos, discusiones, quimioterapia, múltiples medicamentos y análisis de sangre. Igual, no estuvo o no está (no sé todavía si terminé o no el retiro, tengo mis dudas) muy mal que digamos. Recibo mucho amor, tiempo y dinero (sí, mi papá ni bien me pasó esto me dijo que me quede tranquila, que él quería ayudarme todo el año y cuando me dijo eso me di cuenta de que lo que tenía era grave). Tuve cáncer de colon, lo pongo en pasado porque quiero que sea así y porque me falta ver al genetista del orto. No quiero hablar más de mi enfermedad.

Me intriga saber cómo es tu vínculo con los otros desde que te enfermaste. Quiero saber si te pasó algo de lo que me pasó a mí, me gustaría que así sea (perdón el egoísmo). ¿Se fue gente de tu vida cuando enfermaste? Nunca imaginé que se iban a ir tan pronto, eso me gustaría decirle a esas personas que desaparecieron del mapa cuando enfermé, que nunca me imaginé que iban a irse tan pronto. Hace poco leí que durante la tempestad los insectos huyen. ¿Te da miedo pensar esto? ¿Qué hacemos con los que quedan? ¿Cómo soy con ellxs? ¿Agradezco? ¿Qué les tengo que agradecer? ¿Vos les haces tortas a las personas? ¿Me prometés que vos nunca me vas a dejar de responder? No me quiero morir, quiero ser mamá, viajar, hacer más obras de teatro, escribir mi propia historia, mis propios libros. ¿Y si no tengo las cosas que se necesitan para mejorar? ¿Y si no soy tan fuerte? ¿Y si todes se cansan de mí y me dejan? ¿Y si esta sensación de intemperie sigue intacta? ¿ Y si la soledad no acaba? ¿Y si mejoro? ¿Y si todo termina antes de lo pensado? Chau. Me acuerdo siempre de la primera vez que te vi, de la primera impresión que me diste, creo que te das cuenta un poco de lo que generás porque entraste como haciéndote cargo. Llegaste tarde, muy cheta vestida y con los pelos revueltos. Yo pensé, debe ser escenógrafa o vestuarista, por tu desparpajo, y empezaste a hablar, un poco gritando, y me gustaste más, me gustó esa chica conflictuada con su tesis, me gustó que nosotras no te importáramos. O así lo sentí yo, que me suelen importar mucho todes. Me resultaste muy particular, no te pude sacar la ficha. Y eso está muy bien. PD: Te lo mando así crudo, como lo sentí. Luli . . .

Nunca me dejes de responder

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