Читать книгу Siempre Puedo Dejar de Beber - Max Marshall - Страница 5

En una bulliciosa ciudad llena de luces brillantes y calles muy transitadas, vivía un muchacho regordete gato negro llamado Mateo. Mateo no era un simple gato – trabajó como vendedor en una pequeña y acogedora supermercado llamado Lucas de la Tienda.

Con su mullido pelaje y ojos grandes y redondos, Mateo encantado a todo el que se puso en su camino. Pero detrás de su encantadora fachada era un travieso secreto: Mateo tenía una tendencia a robar la comida de los estantes de la tienda cuando nadie estaba mirando. Él no pudo resistir la tentación de una deliciosa golosina, especialmente cuando se trataba de esos deliciosos bocadillos de pescado galletas y copos de queso.

Una tarde de sol, cuando el reloj marcó el mediodía y la tienda estaba llena de clientes, Mateo aprovechó su oportunidad. Con imperceptible gracia, robó un jugosas salchichas en la rotisería de contador y esquivó el golpe en una esquina tranquila junto a la caja registradora.

Ocultos de las miradas indiscretas, Mateo alegremente saboreó el robo de la merienda, lamiendo las chuletas, disfrutando de lo prohibido fiesta. Pero sus fechorías no terminó ahí. Se puede ver, Mateo tenía una desagradable hábito que causó aún más problemas-su insaciable sed de cerveza.

Cada vez que el reloj mostraba la hora de cierre, Mateo dijo adiós a sus compañeros de los vendedores y se fue al bar más cercano se llama Bigote de la Guarida. Allí, en medio del tintineo de los vasos y el parloteo de los clientes, Mateo disfrutar de su bebida favorita – un vaso de cerveza fría con espuma.

Pero Mateo no tenía idea de que su amor por la cerveza pronto iba a llevar por el camino de la maldad y la iniquidad. Cuando el sol se puso en el otro día en la ciudad, Mateo aventuras fueron sólo el principio…