Читать книгу Filosofía del perdón - Menéxeno - Страница 4
ОглавлениеPrólogo
El presente trabajo tiene como propósito proveer de algunas herramientas a la persona para facilitarle el acto de perdonar y pedir perdón. No pretende agotar todo lo existente teórico sobre el perdón, sería imposible. Pero sí se busca que, al menos, la persona confronte su noción y establezca un diálogo con lo que conoce sobre el perdón. Tampoco busco convencer o imponer una teoría del perdón, al contrario. Parte del propósito es que la persona se critique, que al menos uno cuestione sus nociones.
Todos nos hemos encontrado al menos una vez en alguna situación en la que nos es difícil perdonar o el otro no está dispuesto a perdonar. Nos es complicado lidiar con la situación. En muchas ocasiones podremos tener la disposición de perdonar y querer seguir adelante, pero siempre hay algo que nos detiene. Con este escrito pretendo ayudar a alguien a lidiar con algún problema que lo carcoma.
Expuesta la intención, menciono que tal vez no sea lo que se espera cuando alguien habla sobre el perdón. Tal vez se espere algo sentimental que haga sentir bien. Ante esto, me apena decir que no se trata de ello. Bajo mi consideración, el perdón y pedir perdón son acciones que siempre deben darse con una cabeza fría, y de igual manera debe ser tratado el dolor. Hago la petición de que, quien lea el texto, y si por alguna razón lo termina, haga el esfuerzo por hacer este ejercicio, aunque quizás esta no sea la vía para todos poder lograrlo.
Mi escrito se basa en diferentes corrientes de distintos filósofos. Considero que en muchos casos no hago justicia a sus conceptos e ideas. No se trata de un trabajo académico, pero tampoco de uno plenamente accesible. Si se simplificara más, los usos que intentaría darles se perderían.
Espero, con sinceridad, que pueda ser de algún uso para alguien. El perdón es un acto que debemos incorporar en nuestras vidas diarias. Nos permite ser mejores personas, más saludables. El perdón nos permite dejar de lado temas que nos pueden bloquear o frenar. El perdón es un acto que requiere de mucho esfuerzo y reflexión interna.
Quisiera extender mi agradecimiento a todas las personas que hicieron posible este trabajo. Gracias a su confianza. En específico, quisiera agradecer al padre Alberto Meouchi, a Daniel Holguín y mi familia. Sin ninguno de ellos, no habría posibilidad de este escrito.
Pero los hombres son criaturas sin esperanza, y entre más se concentran en sus propios pecados, más interesados se vuelven en los pecados de otros. Buscan criticar, no corregir. Incapaces de excusarse, están listos para acusar a los otros […]
Ahora tienes un ofrecimiento que hacer. No es necesario examinar al rebaño, no es necesario zarpar en barcos y viajar a las provincias más remotas en busca del incienso. Busca dentro de tu corazón por lo que es complaciente a Dios. Tu corazón debe ser destruido. ¿Tienes miedo de que perezca de ese modo? Tienes que contestar: Crea un corazón limpio en mí, oh Dios. Pues, para que un corazón limpio sea creado, el impío debe ser destruido. (Agustín de Hipona)