Читать книгу Desenfrenada lujuria - Pablo Bedoya Molina - Страница 7
ОглавлениеAgradecimientos
Como es ya un decir de cajón, hay muchas personas e instituciones a las que debo agradecer su apoyo económico, político, académico y, sobre todo, emocional en este proceso. Primero, debo agradecer a la profesora Ruth López Oseira, quien en varios momentos me ha ofrecido su erudición, su experiencia y la agudeza de sus lecturas. También fue fundamental su apoyo emocional en algunos momentos en los que no lograba encontrar el equilibrio entre la historia y los movimientos feministas, lgbt y queer, no solo para este proyecto, sino también para mi vida como académico en esta área.
A la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas de la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín, por la formación y el incontable listado de oportunidades académicas y laborales que me brindó. De igual forma, debo agradecer el apoyo económico recibido de la Vicedecanatura de Investigaciones de la Facultad, quien financió el proyecto “Las caras de la sodomía. Las identidades sexuales en las postrimerías del periodo colonial”. Así mismo, a la profesora María Eugenia Chaves, quien fue la tutora de ese proyecto.
Agradezco los valiosos comentarios y aportes que, en distintos momentos de la investigación, me hicieron las profesoras y los profesores de la Facultad. Especialmente a Alberto Castrillón, Diana Luz Ceballos y Orián Jiménez.
Debo agradecer también a Daniela Vásquez, Joan Tejada, Carlos Satizábal y Sebastián García, quienes, en distintos momentos del desarrollo de esta investigación, me apoyaron con transcripciones de archivos. También a Madelin Clavijo, quien en la recta final me apoyó con la minucia de los formatos de citación. A Daniel Bedoya por su revisión estilística del texto.
Al movimiento social lgbti y queer, y a los movimientos de mujeres y feministas en los que me he formado. Si bien los temas específicos de este libro no son en apariencia el tipo de problemas que discutimos cotidianamente, es indudable que estos años de formación han sido fundamentales para mis reflexiones en torno a la heteronormatividad y la heterosexualidad obligatoria en nuestro país, ideas que subyacen a lo que aquí está escrito.
En esa misma línea, les agradezco a Walter Bustamante, Hernando Muñoz y Guillermo Correa, que en distintos momentos me han ofrecido su experiencia, su biblioteca y su conocimiento. Les consideraré siempre mis maestros, en lo que a la reflexividad maricona se refiere. Particularmente, le agradezco a Guille las conversaciones de los últimos meses, su casa, sus referencias y sus comentarios agudos, siempre tan útiles para hacer los análisis menos “políticamente correctos”.
Quisiera agradecer especialmente a mis estudiantes de la Universidad Nacional y la Universidad de Antioquia. Realmente siento que las clases y el reto que han significado en el día a día me han brindado aprendizajes invaluables, y la posibilidad de entrar en otros campos de conocimiento, a otras autorías, a nuevos textos y debates que también han alimentado esta investigación.
A Daniel Chacón, quien con paciencia y afecto me brindó la compañía y el apoyo emocional durante este proceso de escritura. Gracias por las idas al archivo, a la biblioteca y por, a pesar de ser de un área tan distinta, haber sentido que esto podía ser importante para la academia y el movimiento social. A Maritza, Tefa, Estefa, Julio, Daniel, Analú, Made, Gian, Lina, Juliana, Nancy, Hunza y Carly, por el afecto, los cafés, las cervezas y la felicidad compartida.
A David Marín-Hincapié, agradecerte ante todo el amor, el cuidado y cada acción de afecto. También tus juiciosas lecturas y tu conocimiento editorial. Ha sido una aventura cada tramo del camino recorrido juntos.
A todas estas personas y las que me faltan: muchas gracias.