Читать книгу Malvinas Misión Secreta - Roberto D. Gelves - Страница 7
ОглавлениеPrimera Etapa
Capítulo 1
Era Marzo de 1982, yo comenzaba el cursado de primer año del secundario, en la Escuela Nacional de Educación Técnica N° 2 de la IV Brigada Aérea, en el departamento de Las Heras Mendoza.
Desde chico, siempre fue mi deseo poder ser un piloto de la Fuerza Aérea, es por eso que mi primer paso era ingresar a la escuela de la “Base”, como se la conocía, por estar ésta dentro de una base militar. En realidad era un colegio Técnico dentro de una institución militar. Estar bajo la dirección, indirecta, de la brigada, hacía que las cosas fueran diferentes a la de los colegios normales. Estábamos más controlados, para ingresar solo a la brigada, necesitábamos un pase o credencial donde figuraba nombre y el año de cursado, nos presentábamos al oficial de guardia, como lo hacía un conscripto, y después de ser autorizados nos acercábamos a la garita del oficial, y tras verificar el pase entrábamos para seguir por su interior hasta el colegio.
El edificio era pequeño comparado con una escuela secundaria común, tenía solo seis aulas, en la que se repartían dos primeros, dos segundos, y dos terceros solo en el turno mañana, y en la tarde quedaban un cuarto, un quinto y un sexto año. También teníamos un galpón donde funcionaba la parte de taller donde aprendíamos, carpintería, electricidad, soldadura, ajuste y hojalatería.
El día transcurría con cada clase, pero lo mejor era el momento de los recreos, era cuando solíamos ver despegar a los aviones que para esa época la brigada contaba con los Morane Soulnier 760-París, los F-86 Sabre y los más lindos A-4C Skyhawk. Todos nos acercábamos a la alambrada que daba frente al aeropuerto. Verlos, y escuchar el bramido de las turbinas al máximo durante la carrera de despegue era fascinante para nosotros.
En esos años era normal verlos despegar varias veces durante la mañana y luego regresar, el régimen militar no se privaba en mantener su flota de aviones en plena tarea de custodiar nuestros cielos.
El 2 de abril todos nos despertamos con la noticia de la recuperación de las Malvinas, todo era júbilo y alegría, por fin volvían a nuestra patria. Es así que días después los vuelos de los Skyhawk, no los vimos más y en su lugar salían los Sabres.
Habían sido trasladados al sur, más precisamente a San Julián, desde allí iban a emprender durante la guerra, sus ataques contra la flota inglesa.
El 1° de Mayo comenzaba la batalla por Malvinas, la Fuerza Aérea tenía su bautismo de fuego ante los piratas. Los días transcurrían y las primeras noticias nos hacían vencedores, pero al pasar las semanas la verdad iba cambiando.
A fines de Mayo se planifica una misión de los Super Etendard de la armada, que utilizarían el último misil Exocet aire-mar del que disponían, en busca de uno de los porta-aviones ingleses, pero para aumentar la eficacia del ataque se le sumarían cuatro aviones A-4C Skyhawk, que llevaban 3 bombas de 250kg bajo sus planos. La misión era considerada de muy alto riesgo por lo que los pilotos que participaron fueron voluntarios.
Como luego se supo, el ataque se produjo exitosamente, con la confirmación del impacto del misil y el posterior lanzamiento de las bombas de los dos supervivientes que regresaron al continente, y de acuerdo a lo que los pilotos describieron en sus informes, ambos por separado, el buque atacado fue el porta-aviones HMS Invincible. Obviamente el gobierno británico lo negó completamente, aludiendo que el misil fue engañado con medidas electrónicas y que el buque atacado por los A-4C era una fragata y que no había sido tocada por las bombas, tratando de inexpertos o incapaces a los pilotos argentinos al no saber reconocer el tipo de buque atacado.
Dos semanas más tarde llegaría la rendición de la guarnición argentina en las islas, lo que produjo una inmensa tristeza en aquellos que combatieron, como en los que estábamos en el continente.
Pero la vida continuó en el país, al año siguiente la democracia era restablecida con la subida al gobierno del Dr. Raúl Alfonsín.
También con él, vendría una campaña desmalvinizadora, impuesta por la economía internacional en la que los principales interesados eran los piratas y sus aliados. Es así que todos los gobiernos sucesores también hicieron lo mismo.
Pero siempre en cada nación, existen patriotas, y Argentina los tenía.