Читать книгу Alma, corazón y fuego - Rodolfo Cardozo - Страница 24

Como tantas otras veces, otra vez el sonido de la sirena después de la medianoche. Al ingresar rápido en el vestuario un compañero dice; -apuren es un accidente en el acceso a Lima. En ese tiempo era el único acceso asfaltado que se dirigía hacia ruta nacional número 9, salimos rápido, llegamos detrás de las ambulancias que se llevaban a los heridos que eran tres, al desplegarnos veo dos vehículos que habían colisionado de frente, en el auto azul yacían los cuerpos sin vida del conductor y una mujer en la parte trasera del mismo lado, en el auto gris no había nadie porque las ambulancias que llegaron primeras se habían llevado los heridos, esta vez la muerte se hizo presente antes que llegáramos al lugar. Procedimos al corte de baterías, balizar, control del tránsito, cortar y desviar, perimetrar la zona para evitar el acercamiento de los transeúntes, la conmoción era grande al pasar las horas, al constatar nombres y dirección de las víctimas, se trataba de vecinos del pueblo, gente que conocíamos, en mi caso había trabajado con una de las víctimas en la radio, fue el primer golpe duro para mí, más aún ver a los familiares destrozados por semejante pérdida, es tremenda situación donde hay que ser fuerte y tratar de contener. Siempre que sucede algo así con víctimas lleva un par de horas o más hasta que llega el fiscal y policía científica para tomar datos y fotos del siniestro y ordenar la extracción de los cuerpos, vi algunos de mis compañeros pálidos asombrados o tal vez sobrepasados por el cuadro de situación, también para algunos era la primera vez en un accidente con víctimas fatales y con el agregado que eran conocidos, a otros los vi más dispuestos, y con esto no quiero decir que los pálidos y temerosos no sirven o estorban cada uno tiene sus grandes virtudes y en otras ocasiones responden mejor, los súper bombero están en las películas nosotros somos de carne y hueso y como a todos en la vida hay cosas que nos afectan y otras no, en mi caso le temo a la electricidad, es por eso que se busca formar un equipo. Dada la orden del fiscal procedimos a sacar los cuerpos del auto con profundo respeto y cuidado, momento difícil que quedan grabados para siempre en la mente, con los años me daría cuenta de que estas es una de las grandes falencias del sistema. El soporte psicológico al bombero, no alcanza con un cursito o un par de charlas, los bomberos son sometidos a situaciones muy estresantes y emocionales que no se arreglan así no más, muchos se hacen los que no les afecta nada, pero guardan y se cierran en sus sentimientos de angustia para después colmarse y explotar en el alcohol o drogas, ponerse agresivos y rebeldes, resultados de no tener una contención adecuada puertas adentro, otros se reprimen se ponen débiles y lloran por cualquier cosa sobrepasados de aguantar sus lágrimas que las endurecen ante los ojos de otros. Algunos se arman de una coraza tan rígida que no pueden salir de ella y conviven con ella siendo muy duros con sus parejas, familia, amigos y compañeros. Todo fue cambiando con los años, es hora que esto sea materia de discusión y llevarlo a la práctica en cada una de las instituciones, el bombero debe tener un psicólogo permanente que lo visite y lo contenga. Nosotros sin darnos cuenta hacíamos terapia de grupo, nos desahogamos al volver en rondas de mate, hablábamos de lo que nos pasaba y de esa manera podíamos seguir, pero el tiempo, la cantidad de imágenes, y las injusticias hicieron su trabajo en mí. Más adelante se las contaré.